El incremento de facturación en las empresas familiares españolas en el último año es el más significativo de toda Europa, según datos del Barómetro Europeo de la Empresa Familiar de KPMG. Los siguientes países en el ranking son Italia y Francia, empatados con un 72% de sociedades que aseguran haber incrementado su volumen de ventas.

La bondad del dato de las empresas familiares españolas es más evidente al compararse con el 64% en el que se queda la media europea del estudio. Esta mejor marcha del negocio explica que un 64% de las sociedades de este tipo radicadas en España hayan incrementado plantilla a lo largo del último año, superior al 59% señalado en el barómetro anterior y muy por encima del 53% de media del Viejo Continente.

El estudio realizado por KPMG y las Asociaciones Territoriales vinculadas al Instituto de Empresa Familiar (IEF) apunta también a continuidad en las cifras. Casi ocho de cada diez empresas familiares españolas (79,6%) aseguran tener confianza o mucha confianza en su situación de negocio de cara al próximo año. La media europea recorta este optimismo al 73% de las encuestadas.

A pesar de este escenario positivo, el estudio apunta las incertidumbres que con más peso golpean este segmento empresarial: mantenimiento de la rentabilidad (42%), dificultad para encontrar candidatos para sus vacantes de empleo (38%) y la inestabilidad política (35%). En la otra cara de la moneda, la búsqueda de vías para la mejora de la rentabilidad (54%) es la principal prioridad de las empresas familiares españolas, seguida de la innovación, señalada en un 32% de los casos, con especial atención a la inversión en nuevas tecnologías.

Por lo que se refiere a la sucesión al frente de la empresa, una cuestión siempre relevante en las sociedades de estructura familiar, cerca de la mitad contemplan el relevo ya para este próximo año. Mientras tanto, solo un 5% se ha planteado la venta de su sociedad con miras a los próximos tres años.

El barómetro también señala que la recuperación de la economía española ha frenado la búsqueda de internacionalización de negocio de las empresas familiares del país. En este sentido, solo un 64% de las firmas de este segmento dicen haber incrementado negocio en el extranjero en los últimos 12 meses, cuando hace un año este porcentaje se elevaba hasta el 70%. En este sentido, son un 32% las que afirman haber mantenido sin cambios su actividad exterior, según las respuestas recogidas por el informe.