Borja de la Cierva y su equipo en Dia llevan semanas trabajando en la búsqueda de inversores que acompañen la ampliación de capital de 600 millones que quieren lanzar en las próximas semanas. Un trabajo ímprovo que se ve entorpecido por las ‘trampas’ que aparecen dentro de la herencia recibida del anterior equipo gestor liderado por Ricardo Currás.
Si la semana pasada se conocía que las cuentas de la compañía presentaban irregularidades que fueron denunciadas ante la fiscalía, ahora se sabe que la empresa está siendo investigada por la Agencia Tributaria. Un análisis que abarca desde el ejercicio 2011, según reconoce la propia compañía en el informe de gestión presentado ante la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
En concreto, la Agencia Tributaria culminaba el pasado ejercicio la comprobación e investigación de los Impuestos de Sociedades de los ejercicios 2011 y 2012; el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) del ejercicio 2012 y del Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA) del ejercicio 2013.
No son las únicas. Según se puede leer en el informe remitido por la sociedad, los inspectores están comprobando y analizando otros muchos ejercicios impositivos de la cadena de supermercados. En el caso de Sociedades, desde enero de 2013 a diciembre de 2014. También analiza desde junio de 2014 a diciembre de 2014 del IVA; IRPF; retenciones y retenciones a cuenta de la imposición a no residentes.
"Podrían surgir pasivos adicionales"
Unas investigaciones sobre las que “podrían surgir pasivos adicionales”, según reconoce la propia sociedad que, sin embargo, sostiene que “no afectarían significativamente a las cuentas anuales”.
En el ejercicio 2018 la sociedad generó una base imponible negativa de 60,3 millones de euros, fruto de las pérdidas originadas en el ejercicio. Dia tributa en régimen de consolidación fiscal, por lo que es la cabecera de todas sus empresas a la hora de pagar el impuesto de sociedades. Una cifra que, después reparte de forma individual a cada entidad.
Las autoridades españolas no son las únicas donde la agencia tributaria investiga irregularidades fiscales. También en Brasil se han efectuado inspecciones, en este caso relativas al ejercicio 2014. En concreto, ha sido sancionada a pagar 97 millones de euros al fisco, en una decisión que se va a recurrir por la vía administrativa primero y la judicial después.
Curiosamente las inspecciones se han abierto en los mismos países en los que Dia ha encontrado irregularidades contables: España y Brasil y que han obligado a reformular las cuentas del ejercicio 2017.
El propio informe del auditor, KPMG, reconoce que las actuaciones de inspección de las irregularidades en España ya están terminadas, pero que en Brasil continúan y de la que podrían derivarse nuevas responsabilidades en los próximos meses. De hecho, en el caso de la matriz española el pasado viernes se pusieron en conocimiento de la fiscalía todas las ‘trampas’ detectadas por si fueran constitutivas de delito.