Dennis Muilenburg CEO de Boeing habló con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, por teléfono el martes por la mañana para intentar que EEUU no prohíba volar a los 737 MAX. Desde Boeing señalaron que en la llamada Muilenburg "reiteró nuestra posición de que Max es un avión seguro".
Un portavoz de la compañía estadounidense confirmó la llamada al New York Times, pero no ofreció detalles sobre quién solicitó la llamada o cualquier otra información. La compañía dijo que Muilenberg reiteró la posición de Boeing de que la aeronave MAX es segura.
Pese a la llamada, el presidente Trump fue uno de los encargados de echar más gasolina al fuego con un polémico tweet en el que afirmaba que los aviones actuales eran "demasiado complejos de pilotar".
Alrededor de dos tercios de la flota de 737 MAX del mundo no pueden volar en este momento. El martes, la Agencia de Seguridad Aérea de la Unión Europea (EASA) anunció la prohibición de que esas aeronaves volaran en el espacio aéreo europeo tras el accidente mortal del vuelo de Ethiopian Airlines.
El avión también ha sido prohibido en China, Indonesia, Singapur, Australia y otros países.
En este sentido, varios senadores estadounidenses han instado a la Administración Federal de Aviación, FAA, a prohibir volar al avión. Una opinión contraria a los representantes de los pilotos de la aerolínea estadounidense Soutwest. En un comunicado el representante de este colectivo, Jon Weaks, dijo que, en su opinión "los 34 aviones MAX 8 de la aerolínea son seguros para volar".