La falta de entrega de 737 MAX tendrá un impacto negativo de 1.000 millones de dólares (887 millones de euros) en la previsión de flujo de efectivo de 2019 de Boeing, según ha estimado en un informe el banco norteamericano JP Morgan.

La previsión actual para el flujo de caja del fabricante es de 17.000 millones de dólares (algo más de 15.000 millones de euros), pero queda por ver cómo evolucionará y cuál será el impacto total, que dependerá de cuándo se retomen las entregas, cómo crece el ratio de producción y con qué velocidad podrá volver el modelo al catálogo.

No obstante, JP Morgan valora que, a pesar de los dos accidentes aéreos protagonizados por el Boeing 737 MAX y de la paralización de las entregas, no hay señal de que la demanda de 737 MAX vaya a descender, sino que sigue habiendo aerolíneas "ansiosas" por volar con este avión, "siempre que se mejore la seguridad".

Se reduce casi un 20% la producción

Así, JP Morgan ha considerado que "es pronto", pero que la capacidad de Boeing para mejorar el modelo, el "duopolio" del mercado aeronáutico con un rival como Airbus, la consolidada trayectoria de los 737 y las sólidas relaciones de Boeing con sus clientes harán que la demanda de 737 MAX no se reduzca "dramáticamente". No obstante, ha señalado el fabricante necesitará recortar los precios para que aumente la demanda.

Tras los accidentes, Boeing informó la pasada semana de sus planes para reducir en casi un 20% su producción de aviones 737 -de 52 a 42 al mes-. En el primer trimestre del año, el fabricante estadounidense ha recibido siete encargos del 737 MAX y ha realizado 89 entregas de la familia 737 que comprende varios modelos, entre ellos los 737 MAX y 737 MAX 8, frente a las 184 del mismo periodo del año 2018, un 33% menos.

Por el momento, la compañía aérea Garuda Indonesia ya ha cancelado un pedido de 49 aviones Boeing 737 MAX 8 y aerolíneas como Norwegian o la polaca LOT exigirán compensación a Boeing por los problemas con este modelo y tener que dejar sus aviones en tierra ante la prohibición de volar con estos aparatos también en Europa. Boeing ya ha anunciado una actualización de software, así como la correspondiente formación para pilotos del 737 MAX.