El brexit es uno de los temas más polémicos y que más miedo generan entre los líderes europeos y las grandes empresas que negocian con el Reino Unido. Una ruptura que aún no sabe cómo va a darse, aunque sí es perfectamente conocido que sucederá. Boris Johnson, primer ministro británico, aseguró poco después de su nombramiento que "el 31 de octubre habrá brexit cueste lo que cueste".
El sector cervecero español no es una excepción dentro de las industrias que miran con horror cómo se desarrollan las negociaciones entre la Unión Europea y Reino Unido. En la presentación de su tradicional informe anual, Jacobo Olalla, director general de Cerveceros de España, confesó que el mercado de la cerveza española tiene miedo a cómo pueda terminar el acuerdo sobre el brexit.
Las razones que explican este terror son varias. La primera de ellas es el factor turismo. Como el propio Olalla explicó, las cifras de consumo de cerveza en España vienen muy marcadas por las adquisiciones que hacen de este producto los extranjeros que visitan el país. El Reino Unido es el principal mercado emisor de turistas hacia el territorio español, y el brexit está provocando que la cantidad de visitantes británicos descienda cada año.
Exportación y consumo
Asimismo, también hay que tener en cuenta el consumo per cápita de cerveza que hacen los habitantes del Reino Unido, mayor que el que presentan los españoles. Por tanto, al reducirse el número de turistas británicos en un 2% en el pasado curso, también disminuyen las cifras de consumo de cerveza en verano, la época en la que se disfruta del 31% de la cerveza total consumida durante el año en el territorio español.
El siguiente factor que produce pavor en la industria cervecera es la exportación. España es el tercer país europeo en importancia del sector de la cerveza, por detrás de Alemania y Reino Unido, y exporta parte de esa producción al extranjero. De hecho, en 2018, el envío de cerveza española a otros países creció en un 3%.
El Reino Unido es uno de los principales destinos para la cerveza fabricada en el territorio español, y según cómo se den las negociaciones, comerciar con las islas británicas puede ser mucho más complejo y menos beneficioso.
Estos hechos parece que comienzan a causar efecto en las cifras del sector. Olalla, preguntado por los resultados del año 2019, expresó que está siendo "un curso raro", aunque comentó que era pronto para datos exactos.
Señaló que el buen clima que está predominando hasta ahora animaba a la gente a acudir a los bares, pero que estaban notando desaceleración por el consumo y el turismo, dos de los aspectos en los que los ciudadanos británicos tienen gran importancia.
Para estar seguros de cómo afecta realmente el brexit a las empresas del sector, la única forma exacta es esperar a que las negociaciones concluyan. Desde Cerveceros de España, estarán pendientes a los diálogos entre Boris Johnson y los representantes de la Unión Europea.