Vodafone ya permite ver Liga y Champions: se suma a Euskaltel y MásMóvil en la batalla del fútbol
La operadora permite descargar la aplicación de Mitele en su descodificador aunque no integra la plataforma en su oferta comercial.
12 noviembre, 2019 03:35Noticias relacionadas
Un año después del comienzo de la guerra del fútbol que cambió completamente la concepción comercial de Vodafone y se llevó un buen puñado de clientes, la operadora británica vuelve a permitir contratar Liga y Champions a través de sus descodificadores. La compañía no incluye el deporte rey en su oferta comercial, ni ha comprado sus derechos, pero gracias a MiTelePlus, la plataforma en streaming de Mediaset, permite a sus clientes poder ver todo el fútbol a través de su televisión.
De esta manera, los abonados de Vodafone pueden descargarse la aplicación de MiTelePlus en el marketplace de la operadora británica y contratar por su cuenta la oferta de Mediaset, que oscila entre los 19 euros por Liga o Champions y 35 por las dos competiciones. La televisión de Paolo Vasile ganó los derechos de la Copa del Rey, por lo que se espera que éstos se vean reflejados en nuevos paquetes en próximas semanas.
Una vez descargadas la aplicación en el descodificador de Vodafone y contratada la oferta de MiTelePlus, los usuarios de la compañía británica pueden ver el fútbol en sus televisiones. Es un modelo radicalmente distinto al que tienen Telefónica y Orange. El primero compró los derechos de La Liga y la Champions League por las próximas tres temporadas por unos 4.000 millones, mientras que el segundo se los compró por 300 millones.
El tercero que tiene los derechos en propiedad es MiTelePlus, pero solo por internet y por streaming, un modelo estilo Netflix que está presente en televisores conectados, internet y los descodificadores de los operadores que no han comprado los derechos como Vodafone, MásMóvil y Euskaltel.
Descodificadores abiertos
En su presentación a analistas de hace unas semanas, Euskaltel confirmó la incorporación de la aplicación de MiTelePlus en el descodificador 4K "de forma que nuestros clientes pueden acceder a todo el fútbol". Al mismo tiempo la compañía recordó que se eliminó el fútbol de Telecable -que tenía los derechos- "por no ser rentable". Una operación que, indicaron, se produjo con "bajas menores de las esperadas".
En el caso de MásMóvil, este periódico informó hace unas semanas que ya permite ver a través de su descodificador Agile TV el fútbol. El procedimiento es el mismo que Vodafone y Euskaltel, es decir, el usuario debe descargarse personalmente la aplicación y pagar su suscripción de manera separada del paquete de servicios que paga a las telecos. La ventaja es que puede ver los partidos a través del mismo descodificador del que ve todos los contenidos audiovisuales contratados con el operador.
Las compañías se apuran en aclarar que ellos no tienen los derechos, simplemente tienen ecosistemas abiertos en sus descodificadores con tecnología Android TV, al estilo de Google Chrome y Apple TV mediante los cuales dan la posibilidad a sus clientes de descargarse una aplicación que tenga todo el fútbol.
Dos modelos distintos
Del mismo modo, ninguna de estas tres operadoras puede incorporar a sus ofertas comerciales la aplicación MiTelePlus con todo el fútbol, porque deberían aumentar el pago de su tasa RTVE -ya que debería sumar los abonados de la aplicación de Mediaset- y todos los costes derivados de este aumento de clientes.
Por otro lado, MiTelePlus debería también sumar a sus abonados los clientes de televisión Vodafone, Euskaltel y MásMóvil lo que elevaría de manera importante la factura que debe pagar a Telefónica por estos derechos del fútbol. Una factura calculada en base a sus actuales abonados, pero que se revisa periódicamente a mediada que va creciendo su base de clientes.
Pese a todo ello, no deja de ser paradójico que en los descodificadores de todas las operadoras de telecomunicaciones de España ya se puede ver el fútbol pese a que solo dos de ellos -Movistar y Orange- han pagado por los derechos. Son dos modelos distintos, pero que compiten en un mismo mercado en el que cada ventaja competitiva es oro para la guerra comercial que actualmente viven los operadores.