El envío de paquetería creció en España el año pasado casi un 16%, una bonanza que contrasta con el declive del sector postal tradicional, que descendió un 11%, aunque siguió siendo el grueso del negocio, según refleja el último informe anual sobre la evolución del sector postal, publicado este lunes por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC).
El estudio muestra una notable caída del volumen de actividad (-7,9%), hasta los 3.258 millones de euros, debido al descenso de la actividad en el sector postal tradicional, que cedió un 11,4% (2.727 millones de envíos), aunque sigue representando el 83,7% de los envíos. Sin embargo, los ingresos del conjunto del sector han aumentado un 19,4% hasta los 4.872 millones de euros, lo que se debe al fuerte aumento de los envíos de paquetes con valor añadido.
En detalle, los ingresos derivados del envío de paquetes crecen un 29,8%, hasta alcanzar los 3.521 millones de euros, el 72,3% del total, gracias al repunte del 15,8% de los envíos (531,4 millones de envíos), lo que representa aún solo el 16,3% del total. Los ingresos del sector postal tradicional cedieron un 1,1%, hasta los 1.350 millones de euros, el 27,7% del total, como consecuencia de la caída del 11,4% de los envíos.
El organismo regulador explica que la evolución del sector es un reflejo del cambio de hábitos que se está produciendo en la sociedad española como consecuencia del desarrollo del comercio electrónico y la generalización de las comunicaciones a través de Internet.
Según la CNMC, la evolución de la actividad en el sector postal está cambiando también el tejido empresarial. En 2018 figuraron inscritos en el Registro General de Empresas Prestadoras de Servicios Postales un total de 1.791 operadores, el 80% habilitados solo para la prestación de servicios no incluidos en el ámbito del servicio postal universal.
El 40% de ellos se concentra entre Madrid y Cataluña, aproximadamente dos tercios de los operadores toma la forma de sociedad limitada y opera bajo el esquema de red.
En el segmento tradicional y ante la definitiva desaparición de Unipost, el operador público ostenta una posición hegemónica (95% de la cifra total de negocios) y su plantilla supera los 52.000 empleados. En el sector de la paquetería mantiene un liderazgo importante.
Compras 'on line'
En relación con el uso de los servicios postales, en 2018 se produce una nueva caída en el envío y recepción de cartas entre particulares. Este medio de comunicación se concentra en las relaciones entre empresas y particulares. Aproximadamente tres de cada cuatro personas declaró no haber recibido ni enviado ninguna carta en el segundo semestre de 2018.
La recepción de paquetes está "íntimamente relacionada" con el comercio electrónico, dado que un 90% de las compras realizadas por Internet tuvieron como consecuencia la recepción de paquetes por parte de los compradores. El operador que en este segmento parece más presente es el grupo Correos, quién repartió casi la mitad de los últimos envíos recibidos por particulares vinculados con la compra 'online'.
Concretamente, Correos (incluyendo tanto Correos y Telégrafos como Correos Express) fue la empresa de mensajería que más paquetes de comercio electrónico gestionó el año pasado, con una media del 46,2%, ya que copó el 48,8% en el primer semestre y el 43,5% en el segundo.
A este respecto, la CNMC apunta en su informe que estos cambios han modificado los hábitos de los ciudadanos, puesto que menos de la mitad realizó alguna visita a una oficina postal en 2018 y, cuando acudió, el principal motivo fue la recepción de envíos postales.
Por último, en cuanto a la comparación del mercado español con el europeo, los últimos datos disponibles de 2017 reflejan que el mercado español superaba los promedios europeos en lo relativo al número de habitantes por empleado y por buzón del operador designado para la prestación del servicio postal universal.
En cambio, se mantuvo por debajo del promedio europeo respecto del resto de indicadores relevantes (número de habitantes por oficina postal y número de envíos de correspondencia por habitante).