Reducir las cifras de los españoles entregados a los juegos con dinero presenciales u online se ha convertido en uno de los grandes objetivos del Ministerio de Consumo de Alberto Garzón. Sin embargo, la pandemia ha jugado en su contra, al menos en el campo de las apuestas virtuales.
Durante el año pasado, con el estallido de la Covid-19, la cifra de jugadores online se puso en casi millón y medio, un crecimiento del 8% respecto a 2019. A las empresas dedicadas a este sector, no ha podido irles mejor: en el último trimestre del 2020 sus ganancias aumentaron un 25% anual y un 20% intertrimestral.
De hecho, según los últimos datos proporcionados por Consumo, en 2020 el negocio de las empresas del sector del juego aumentó hasta los 851 millones, un 14% más. El departamento de Garzón basa estas cuentas en los márgenes que obtienen los operadores de juego online.
Estas cuentas no son casualidad. Según los expertos, los confinamientos generados por la pandemia, también durante la tercera ola del coronavirus, han provocado que todas las formas de juego y apuestas online se hayan incrementado.
Esta misma semana el ministro de Consumo expresó su preocupación por este fenómeno. Indicó que la adicción al juego es un problema "complejo", que requiere soluciones "complejas, transversales y multidisciplinares".
Con este fin está desarrollando una normativa, que se terminará de poner en marcha a lo largo de este verano, contra la publicidad de las casas de apuestas, especialmente las virtuales, en el mundo del deporte. "Este real decreto es un salto cualitativo muy importante que, si bien no ataja el problema, sí ayuda a cerrar un sector muy importante. El deporte no debería ser un negocio, sino un transmisor de valores", indicó Garzón.
Pero esto no ha frenado a las casas de apuestas. Su inversión en marketing creció en el cuarto trimestre del año pasado un 23,8%, aunque en términos intertrimestrales se rebajó un 1,7%.
Precisamente es el negocio de las apuestas online, que incluye las apuestas deportivas, es el que supone más ingresos. En el último trimestre de 2020, generó más de 231 millones de euros, cerca de la mitad de lo que los operadores de juego virtuales se embolsan en márgenes en España. Esta cifra supone un incremento respecto al tercer trimestre del 25% y del 18% respecto al mismo periodo de 2019.
Según la última edición del 'Informe sobre Adicciones comportamentales' del Ministerio de Sanidad, que se dio a conocer en abril, el juego presencial y online cada vez está más extendido en la población de 15 a 64 años. Entre 2019 y 2020, un 64,2 % de estos ciudadanos ha jugado con dinero. Con todo, según el estudio, la vasta mayoría de los jugadores son presenciales.
Ello no implica que el juego online no esté en clara tendencia ascendente. Según dicho estudio, un 6,7% de los españoles de 15 a 64 años ha jugado con dinero online, el doble que el 2017. Y su prevalencia es mayor entre las personas más jóvenes, descendiendo a medida que aumenta la edad.