Dos decisiones adoptadas esta semana por Ford Almussafes dan buena cuenta de la locura en la que se halla inmersa la industria del automóvil desde el estallido de la pandemia. Mientras la factoría se ha visto obligada a suspender la semana que viene producción de vehículos por la escasez de componentes llegados de Asia, su planta de motores se ha convertido en un 'oasis'. La elevada demanda de unidades por parte de Estados Unidos ha llevado a la firma a recuperar el turno de noche que había perdido.

Así lo confirman a EL ESPAÑOL-Invertia fuentes de la planta, que precisan que se tratará de un turno reducido de 40 operarios y 15 técnicos y oficiales. Comenzará a funcionar la noche del próximo domingo 15 de mayo, y la previsión es que, pasados los primeros siete días, el número de operarios se incremente en 20 más hasta alcanzar los 60. Por el momento no hay fecha prevista para el cese de este nuevo turno.

Su misión será atender la creciente demanda de los motores 2.0 y 2.3 Maverik EcoBoost, así como el 2.0 GDI. Todos destinados al mercado norteamericano. Las principales plantas destinatarias son Louisville (donde se monta el modelo Escape, la marca americana del Kuga), la de Flat Rock (donde se ensamblan los Lincoln, la marca premium de Ford) y Oakville (donde se fabrica el gran todoterreno Edge).

Los modelos Mustang y Connect producidos en EEUU también hacen uso de los motores fabricados en Almussafes. La producción prevista para el restituido turno de noche de Ford Almussafes será de 400 motores, algo menos de la mitad de un turno convencional. Tanto por la mañana como por la tarde se producirán 900 unidades, respectivamente, de modo que el total de motores diarios ascenderá a los 2.200, según precisaron las mismas fuentes.

La buena marcha de la planta de motores contrasta con los apuros en los que se vio hace dos años, cuando logró su continuidad gracias a que Ford Almussafes se adjudicó el modelo 2.0 GTI de gasolina tras un acuerdo laboral firmado por UGT. Este fue, además, el paso previo para que Ford encargara también a la fábrica valenciana la producción del motor híbrido de la multinacional Duratec 2.5.

Caída en vehículos

Y mientras la factoría recupera el turno de noche de motores, se producirá la gran paradoja de que la planta de motores se encontrará completamente parada. En concreto, la dirección de la fábrica trasladó este martes a los trabajadores que detendrá la producción en 'operaciones de vehículos' desde el lunes 16 hasta el viernes 20 de mayo.

A su vez, la planta de mecanizados de motores parará durante el próximo fin de semana. Se trata en estos casos de modificaciones en el calendario ya pactado del expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) vigente.

¿La razón? Que "continúan las tensiones de la cadena de suministros de componentes, agravadas por la situación geopolítica en el este de Europa". También, fundamentalmente, por el impacto de las recientes restricciones en Asia por el último brote de la Covid-19.

Así lo trasladó la dirección a los sindicatos en una nueva reunión este martes de la comisión mixta de seguimiento del ERTE de Ford España, según informó UGT.

La fábrica de Almussafes tiene en vigor un ERTE de 15 días hasta el 30 de junio por la escasez de componentes y microchips. Los nuevos cambios afectan tanto a los departamentos de 'operaciones de vehículos' como a 'operaciones de motores'. En el primer caso, se parará la producción desde el lunes 16 al viernes 20.

En cuanto a 'operaciones de motores', por un lado en 'montaje' se trabajará toda la semana del 16 al 20 de mayo, con lo que los días de ERTE previstos para esta semana se retrasan al 10 de junio y del 20 al 23 de junio.

En 'mecanizados' se parará la producción los días 14 y 15 de mayo en todas las líneas, excepto la de culatas. La parada comenzará a las 22 horas del viernes 13 de mayo hasta las 22 horas del domingo 15. Estas paradas sustituyen al ERTE previsto para el 18 y 19 de mayo.