"Es necesario sacar 20 millones de toneladas de cereales de Ucrania en menos de tres meses utilizando la infraestructura de la UE", avisa la comisaria europea de transportes, Adina Valean. Ucrania es una potencia agrícola en trigo, cebada, maíz o aceite de girasol. Pero los envíos al extranjero se han visto drásticamente limitados desde el estallido de la guerra debido al bloqueo de los puertos ucranianos del mar Negro por parte de la marina de Rusia. Unos puertos que representaban el 90% de las exportaciones agrícolas antes del conflicto.
Por todo ello, la invasión de Vladímir Putin ya está teniendo un gran impacto en los mercados agrícolas internacionales y Bruselas teme que ponga en riesgo la seguridad alimentaria mundial. En circunstancias normales, el 75% de la producción de grano de Ucrania se exportaba, generando alrededor del 20% de los ingresos anuales. Un tercio de las exportaciones tiene como destino Europa, otro tercio va a China y el tercio restante corresponde a África.
Por todo ello, el Ejecutivo comunitario ha presentado este jueves una estrategia para establecer rutas de transporte alternativas que permitan dar salida a las exportaciones ucranianas. "Se trata de un reto gigantesco, por lo que es esencial coordinar y optimizar las cadenas logísticas, poner en marcha nuevos corredores e impedir, en la medida de lo posible, los cuellos de botella", sostiene Valean.
A pesar de las medidas de Bruselas para facilitar el cruce de fronteras entre Ucrania y la UE, miles de vagones y camiones están a la espera de luz verde en la parte ucraniana. El tiempo medio de espera actual para los vagones es de dieciséis días, mientras que en algunas fronteras es de hasta treinta días.
Cada vez hay más cereales listos para la exportación almacenados y retenidos en silos ucranianos. Entre los principales problemas se encuentran las diferencias en el ancho de las vías: los vagones ucranianos no son compatibles con la mayor parte de la red ferroviaria de la UE, por lo que casi todas las mercancías deben transbordarse a camiones o vagones que se ajusten al ancho de vía estándar de la UE. Este proceso requiere mucho tiempo y las instalaciones de transbordo a lo largo de las fronteras son escasas.
Para resolver estos problemas, la Comisión pide en primer lugar a las empresas del sector de toda la UE que proporcionen urgentemente vehículos adicionales. Bruselas creará una plataforma logística para casar la oferta con la demanda y establecer los contactos pertinentes. Los Gobiernos deben designar puntos de contacto específicos para estos "corredores solidarios".
Las redes de transporte y las terminales de transbordo deben dar prioridad a los envíos de exportaciones agrícolas ucranianas. En este sentido, los gestores de infraestructuras deben reservar franjas horarias ferroviarias a disposición de estas exportaciones.
Bruselas solicita también a las empresas que envíen cargadoras móviles de cereales para acelerar el transbordo en los puntos fronterizos. También estudiará opciones para dar garantías financieras a los transportistas de la UE que se adentren en Ucrania.
En cuanto a las operaciones aduaneras y otras inspecciones, el Ejecutivo comunitario insta a las autoridades nacionales a aplicar la máxima flexibilidad y a garantizar una dotación de personal adecuada para acelerar los procedimientos en los pasos fronterizos.
Finalmente, Bruselas evaluará la capacidad de almacenamiento de cereales disponible en la UE y se coordinará con los Estados miembros para ayudar a garantizar una mayor capacidad de almacenamiento temporal de las exportaciones ucranianas.