Donald Trump, bebiendo una copa de vino tinto.
El vino teme el impacto de los aranceles del 200% de Trump : "No podemos permitir que nos saquen de EEUU"
El mercado estadounidense es el principal destino de las exportaciones españolas de vino.
Más información: Trump amenaza a la UE con aranceles "del 200%" al vino y bebidas alcohólicas para que quite el impuesto al whisky
El sector del vino español, y europeo, ha temblado este jueves. La amenaza de Donald Trump de aplicar unos aranceles del 200% al vino y a toda bebida alcohólica fabricada en la Unión Europea ha generado una importante inquietud en los productores, que ven peligrar uno de sus principales mercados: Estados Unidos.
De hecho, las tiendas y los restaurantes estadounidenses son el primer destino de las exportaciones de vinos espumosos españoles y el segundo de los vinos conocidos como tranquilos. Estos son los habituales tintos, blancos y rosados. En 2024, las exportaciones de vino a Estados Unidos sumaron unos 390 millones de euros.
En un comunicado, José Luis Benítez, director general de la Federación Española del Vino (FEV), avisa de que la medida anunciada por Trump "sacaría a los vinos españoles y europeos de todo el mercado de Estados Unidos y es algo que no nos podemos permitir".
De hecho, el Comité Europeo de Empresas Vitivinícolas (CEEV) ha exigido ya la Comisión Europea que "mantenga al vino fuera del actual conflicto comercial entre la UE y Estados Unidos, motivado principalmente por los aranceles al acero y al aluminio".
De esta manera, las empresas vitivinícolas se "oponen firmemente a la inclusión de los vinos estadounidenses y otras bebidas alcohólicas en el listado de contramedidas de la UE para aplicar aranceles a productos norteamericanos".
En la actual situación, "el vino, junto con otros productos agroalimentarios, se convierte en rehén de una disputa comercial ajena a su sector".
Lo cierto es que, según Trump, su amenaza al alcohol europeo es un contraataque a los aranceles anunciados por la Unión Europea al whisky made in Estados Unidos.
"La Unión Europea, una de las autoridades fiscales y arancelarias más hostiles y abusivas del mundo, creada con el único propósito de aprovecharse de Estados Unidos, acaba de imponer un arancel del 50% al whisky", escribió Trump su red Truth Social.
"Si este arancel no se elimina de inmediato, Estados Unidos impondrá en breve un arancel del 200 % a todos los vinos, champán y productos alcohólicos procedentes de Francia y otros países representados por la UE. Esto beneficiará enormemente al sector del vino y el champán en EEUU", añadió en el mensaje, uno más en su dilatada lista de amenazas económicas a otros países que en algunos casos, como con Canadá, retira tan solo unas horas después.
Los espirituosos, "hartos"
También han reaccionado desde Espirituosos España. Los productores de estas bebidas se declaran "hartos de ver cómo el valor icónico de nuestras marcas es utilizado como arma política en disputas que nada tienen que ver con nuestra naturaleza”, en palabras de Bosco Torremocha, director de la organización.
En este sentido, ha recordado que el anuncio llega en un momento extremadamente difícil para el sector de las bebidas espirituosas, que trata aún de amortiguar las consecuencias de una marcada desaceleración en muchos mercados clave.
Por eso, el regreso de aranceles de represalia -que ya se introdujeron en 2018- tendría ahora "consecuencias devastadoras para el sector". Cabe recordar que los espirituosos españoles, que cuentan con 19 indicaciones geográficas, exportan un 40% de todo lo que producen, con un valor que supera los 1.000 millones de euros.
“Una vez más, las bebidas espirituosas se encuentran en la posición de víctimas colaterales. No tenemos nada que ver con la disputa sobre el acero y el aluminio. Los sectores de bebidas espirituosas de la UE y EE.UU. se mantienen unidos en su firme compromiso de mantener el comercio transatlántico de bebidas espirituosas libre de aranceles”, ha enfatizado Torremocha.
Planas avisa
En su primera reacción tras conocer la amenaza, el ministro de Agricultura, Luis Planas, ha avisado de que tanto por parte del Gobierno como de la UE habrá "firmeza" en la guerra arancelaria.
"Nuestra voluntad, como siempre, es la de hablar, negociar y entendernos, pero tampoco nos va a temblar el pulso en la defensa de nuestros productores", ha sostenido en el Congreso.
Allí Planas ha admitido que la amenaza sobre el vino "no es un buen camino", si bien ha señalado que por ahora es apenas un anuncio. "Yo creo que los hechos son lo importante", ha subrayado.
