Respaldo de Moody's a las previsiones de emisión de deuda de la nueva Unicaja una vez se complete la fusión. En un informe publicado este jueves, la agencia de rating prevé que la entidad resultante tras la integración de Liberbank sea uno de los mayores emisores de cédulas hipotecarias en España, mejorando el perfil crediticio que las dos presentan actualmente de forma individual.
El programa de emisiones tras la fusión, prevista para el tercer trimestre del año, será clave para valorar la capacidad de la nueva entidad para financiarse en el mercado, en un momento en el que la crisis todavía golpeará la recuperación económica.
La confianza de los inversores resulta clave en este sentido y, a juicio de Moody's, la nueva Unicaja tiene todas las bazas para liderar el mercado de cédulas hipotecarias, una clase de títulos de deuda emitidos por las entidades, que suelen pagar un interés fijo y que tienen como garantía los créditos hipotecarios concedidos por la entidad que los emite.
La agencia considera en su informe que la fusión será positiva para las cédulas hipotecarias del grupo resultante. "El programa de emisiones combinado tendrá un menor riesgo de mercado, una calidad crediticia del fondo de cobertura ligeramente mejor y una mayor diversificación regional de las garantías", señala.
En este sentido, recuerda que durante el próximo año vencen unos 1.000 millones de euros en cédulas hipotecarias entre las dos entidades, estimando que Unicaja absorberá el programa de emisiones de Liberbank (y sus vencimientos) una vez se complete la fusión.
En concreto, la firma calcula que durante el próximo año vencerán alrededor de 1.000 millones de euros en cédulas hipotecarias agregados de Unicaja Banco y Liberbank. Y recuerdan que la refinanciación de estas emisiones coincidirá con la implementación en España de las nuevas reglas de la Unión Europea en torno a este mercado, que entran en vigor en julio de 2021, aunque las entidades tendrán un año más, hasta julio de 2022, para ponerlas en marcha.
Moody's explica que estos cambios podrían plantear ciertos retos debido a que las nuevas reglas requieren múltiples cambios, como la segregación de los activos, la introducción de un colchón de liquidez para las emisiones realizadas "y una supervisión pública más estricta", entre otros requisitos.
Desde la firma insisten en que la solidez crediticia de Unicaja Banco como nuevo emisor de cédulas hipotecarias será superior a la de Liberbank en solitario, lo que compensará la calidad ligeramente inferior de las de la entidad absorbida.