CCOO critica que los empleados de BBVA "se enteren por la prensa" de los planes de ajuste
La entidad anunció en su última presentación de resultados que estudia una 'reestructuración rápida' para el primer semestre.
1 febrero, 2021 16:52Enfado monumental de los representantes de los trabajadores de BBVA con la directiva de la entidad. CCOO ha lanzado un comunicado en el que insta al banco a aclarar el plan de recortes que está estudiando para su plantilla en España. Un proceso que, según se conoció durante su última presentación de cuentas anuales, se acometerá a lo largo del primer semestre.
"Si fuera cierto que BBVA se está planteando una reestructuración, CCOO exigimos que nos lo aclaren cuanto antes y, si es así, en qué términos", indican desde el sindicato. "Hacer este tipo de declaraciones a la prensa sin haberlo comunicado previamente a la representación legal de los trabajadores es un desprecio hacia lo que representan las personas que conforman la plantilla de BBVA", añaden en un comuncado lanzado este mismo lunes.
En este sentido, aseguran que el anuncio conocido el pasado viernes "ha generado una gran preocupación" entre los empleados del Grupo.
El consejero delegado del banco, Onur Genç, dejó claro el firme compromiso de BBVA para "desarrollar y ejecutar" y estos recortes a lo largo del primer semestre para ganar en eficiencia, aunque explicó que aún están trabajando en el mismo.
Es decir, los directivos aún no han llegado a detalles sobre el número de empleados o de oficinas que se incluirán en el proceso, aunque si se atiende al ritmo de reducción de plantilla experimentado el pasado año, la cifra podría superar los 3.000.
En concreto, y aunque no se llevó a cabo un ERE como tal, BBVA cerró 2020 con 123.174 empleados, desde los 126.973 con los que la entidad despidió 2019, según sus cuentas anuales.
Así, CCOO ha exigido a BBVA aclaraciones sobre los planes de "reestructuración rápida" para el que, según indicó Genç, "se están analizando todas las alternativas".
Es decir, el 'tijeretazo' puede venir de la mano de un proceso de prejubilaciones y bajas voluntarias, como ha sido el caso de Banco Sabadell, o directamente de un ERE, como el que está siendo acometido por Banco Santander.