Santander se impone en la puja por ser el banco de la CNMV durante dos años

Hace algunas semanas, la CNMV abrió un proceso para encontrar un nuevo banco en un contexto en el que las entidades han endurecido las condiciones de sus productos, como reconoce el propio organismo en la memoria en la que justifica este contrato.

"Es el caso de las condiciones aplicadas por nuestro propio banco, con aumento de las comisiones por actividad y del coste de mantenimiento de saldos en nuestras cuentas bancarias, tendencia que se mantendrá al menos a medio plazo", explica el supervisor en esta memoria.

Al concurso se presentaron tres entidades, como adelantó Invertia. Se trata del propio Santander, de Bankinter y de BBVA, que aspiraba a repetir como banco de la CNMV tras tres décadas ofreciéndole sus servicios, aunque bajo distintas marcas que han terminado integradas en el grupo.

Tras su puesta en marcha, hace unas tres décadas, el primer proveedor bancario de la CNMV fue Caja Postal y más tarde fue Argentaria la que ejerció de entidad de referencia del supervisor. Desde hace años, es el propio BBVA el que ha tomado ese papel, pero ahora eso va a cambiar.

Tres ofertas

La oferta de Santander fue, precisamente, la primera en llegar al supervisor para esta convocatoria, apenas dos días antes del cierre del plazo, mientras que la de Bankinter llegó horas después y la de BBVA lo hizo in extremis, escasas cuatro horas antes de que se cerrara la recepción de ofertas.

Finalmente, la mejor propuesta a juicio de la CNMV ha sido la del banco que preside Ana Botín y en las próximas dos semanas formalizará el contrato para que comience el servicio.

El presidente de la CNMV, Rodrigo Buenaventura, durante su intervención en el curso de verano de la Apie.

El importe del contrato ha sido el presupuestado inicialmente, 221.900 euros, una cifra que fijó a partir del interés negativo máximo que acepta pagar la CNMV (-0,7%) por el saldo medio de sus cuentas en 2020, que era de 15,85 millones (era 16,5 millones un año antes), y multiplicado por dos, que son los años durante los que el banco seleccionado suministrará sus servicios a la CNMV.

Con todo, el supervisor valora el contrato en unos 554.750 euros, dado que existe la posibilidad de prorrogar el servicio, que en un principio está fijado para dos años. Concretamente, contempla que la licitación se prorrogue hasta en tres ocasiones, cada una de un año de duración.

Seis cuentas

Los servicios que requiere la CNMV son, principalmente, disponer de una cuenta para recaudar las tasas, de una cuenta corriente principal (en la que poder recibir los traspasos de la cuenta de tasas y desde la que pagar nóminas, impuestos, seguros, proveedores...), de tres cuentas corrientes auxiliares (para pagos de importe poco significativo, compra de divisa o retirada de efectivo de las sedes de la CNMV) y de una cuenta de valores.

A cambio de la licitación, Santander ofrecerá estas cuentas bancarias libres de gastos y comisiones y tampoco podrá cobrar por la gestión bancaria, las transferencias y la emisión de cheques y tarjetas de crédito de empresa, que deberán tener un seguro de cobertura en caso de fraude. Actualmente, solo hay operativa una tarjeta.

Requisitos

Uno de los requisitos que Santander ha tenido que cumplir para optar a ofrecer este servicio es tener una oficina física a menos de cuatro kilómetros de las sedes de la CNMV en Madrid (calle Edison, 4), Barcelona (Passeig de Gràcia, 19) y Bilbao (Calle Heros, 3). Algo que, vista la transformación de la banca durante los últimos años, no está en la mano de todas las entidades financieras del país.

Además, a Santander se le ha requerido ofrecer un servicio gratuito de banca por internet, que la CNMV quiere utilizar para realizar gestiones como pago de nóminas, a proveedores, de impuestos, órdenes de transferencias, consultas, envío de información o descarga de comprobantes, así como poner a disposición de la CNMV un gestor para las cuentas y otra persona dedicada a resolver las incidencias de la gestión diaria.

El banco con sede en Cantabria tendrá que ofrecer formación gratuita a los trabajadores de la CNMV para el uso de la banca online y prestar un servicio gratuito de entrega de efectivo y divisa en las oficinas de la CNMV cuando el organismo lo solicite.