La regulación del teletrabajo va llegando poco a poco a las empresas. Ya sea a nivel sectorial o individual, las compañías están adoptando progresivamente las reglas para permitir a sus empleados teletrabajar al menos un día a la semana e incorporándolas a sus convenios. Dentro del sector bancario, que ha sido pionero en incluirlo en sus acuerdos sectoriales, una de las primeras ha sido Kutxabank.

En el último convenio de la entidad, que rige para el periodo 2019-2024 (entra en vigor retroactivamente), se detallan las condiciones económicas por las que sus empleados podrán acogerse a la opción de teletrabajo, junto con sus obligaciones y derechos.

De acuerdo con las mismas, el banco abonará unos 90 euros al mes a cada trabajador en esta modalidad para poder sufragar los gastos fijos, de suministros y consumibles en los que incurra el empleado en relación con el desarrollo de la actividad, más allá del material necesario para trabajar. Esta cantidad se abonará en proporción al porcentaje de jornada que se realice en teletrabajo, pues el convenio contempla un mínimo del 30% y un máximo del 80% de la misma.

Este importe para costear los gastos del trabajador está por encima del pactado tanto en el convenio de banca como en el de las antiguas cajas de ahorro (que se negocian por separado), que es de unos 55 euros mensuales en ambos casos. Concretamente, es un 60% superior al que obligan estos pactos sectoriales.

Con la inclusión de las reglas del teletrabajo en este convenio, Kutxabank se convierte en uno de los primeros bancos que pacta con su comité de empresa las condiciones del teletrabajo, una modalidad que está regulada por ley desde otoño del año pasado.

300 euros por usar su propio equipo

La legislación vigente obliga a que los empleados que pacten con sus empresas esta modalidad de trabajo dispongan de todos los medios, equipos y herramientas necesarios para desarrollar la actividad, por lo que es obligatorio que la empresa lo facilite, algo que se contempla en el convenio de Kutxabank.

Eso sí, si algún trabajador quiere utilizar sus propios medios podrá hacerlo siempre que la entidad considere que son suficientes y, dado el caso, el banco abonará al empleado como compensación 300 euros en el momento en el que se firme su acuerdo individual de teletrabajo. Este importe solo se pagará una vez.

Los empleados que teletrabajen mantendrán los mismos derechos que los que desarrollen toda su jornada de manera presencial en todos los aspectos y, entre ellos, en materia de conciliación, de desconexión digital, de participación en las elecciones al comité de empresa, etc.

El convenio también detalla que el teletrabajo se desarrollará desde el domicilio del empleado y este tendrá que comunicar a la empresa si modifica esta ubicación con quince días de antelación, pues la localización del trabajador se fijará en el acuerdo individual.

Este convenio, firmado el pasado 31 de mayo por la dirección de la entidad y los representantes de la plantilla y que recogía el lunes el Boletín Oficial del Estado (BOE), es el tercero que se pacta desde la creación de la entidad, fruto de la fusión entre las tres antiguas cajas de ahorro vascas Bilbao Bizkaia Kutxa (BBK), Caja Vital y Kutxa.