Imagen de la rueda de prensa del Gobierno de Suiza para anunciar la compra de Credit Suisse por UBS.

Imagen de la rueda de prensa del Gobierno de Suiza para anunciar la compra de Credit Suisse por UBS. Reuters

Banca

El Gobierno suizo cree que la compra de Credit Suisse por UBS "es una solución comercial y no un rescate"

El Ejecutivo pondrá encima de la mesa 9.000 millones en garantías públicas y otros 100.000 millones en liquidez para que la operación no naufrague. 

19 marzo, 2023 20:55

Se deshojó la margarita. El Gobierno de Suiza junto al Banco Nacional y el supervisor bancario Finma han forzar el matrimonio entre UBS y Credit Suisse. Una operación valorada en 3.000 millones de francos suizos, que conllevará también la puesta a disposición de 9.000 millones en garantías públicas y otros 100.000 millones en líneas de liquidez urgente. 

"Una solución comercial y no un rescate" en palabras de la ministra de Economía, Karin Keller-Sutter, quien ha asegurado que si no se llevara a cabo esta operación estaríamos ante una situación que hubiera tenido "severas consecuencias" para el sistema financiero internacional. 

Eso es lo que ha obligado, ha explicado, al Ejecutivo suizo a actuar en Credit Suisse que, en los últimos días había visto cómo las salidas de depósitos se habían incrementado. Especialmente desde que el pasado jueves decidiera acudir a una línea de urgencia de liquidez de 54.000 millones de euros. 

Según el Gobierno suizo, que ha dado una rueda de prensa para explicar la situación, las salidas de depósitos alcanzaron en los últimos días los 10.000 millones, frente a los 111.000 millones que sufrió en el cuarto trimestre de 2022. 

Una situación que había hecho "imposible para Credit Suisse" seguir en solitario, por lo que el Gobierno suizo decidió actuar para evitar daños en el mercado financiero internacional; pero también para "recuperar la confianza" en la banca suiza en particular. 

Por ahora se desconoce cuáles son los planes exactos de UBS con Credit Suisse, que juntas van a conformar una entidad de 5 billones de dólares en activos bajo gestión en todo el mundo. Todo un gigante 'too big to fail', demasiado grande para caer, pero que debe servir para preservar los depósitos de los clientes de la que, hasta ahora, era la segunda entidad más grande del país. 

El presidente suizo, Alain Berset, ha explicado que "nuestra responsabilidad era evitar una crisis global", y eso es, dice, lo que han hecho. De este modo, esperan que se logre acabar con las dudas suscitadas por Credit Suisse en el sistema financiero, y que los mercados abran este lunes con una cierta calma.