El BCE y el BdE monitorizan la liquidez de la banca pero no prevén aumentar sus exigencias tras Credit Suisse
Por el momento el seguimiento está siendo "serio" pero no tan exhaustivo como lo fue durante la pandemia.
29 marzo, 2023 02:41Las recientes crisis de Silicon Valley Bank y Credit Suisse han puesto en alerta a los supervisores a pesar de que el riesgo de contagio a la banca española está muy limitado. Tanto el Banco Central Europeo (BCE) como el Banco de España están monitorizando de cerca la liquidez de la que disponen las entidades, si bien en principio no se plantean aumentar las exigencias al sector.
Si en algo coinciden bancos y supervisores estos días es en señalar la fortaleza del sistema financiero español en un contexto de muchas turbulencias bancarias. No solo a nivel de solvencia, sino también de liquidez, que al final es donde los bancos se la juegan y, precisamente, lo que ha estrangulado a Silicon Valley Bank y Credit Suisse.
De hecho, la ratio de liquidez a corto plazo (LCR, por sus siglas en inglés) es del 175% de media en el caso de las entidades significativas y del 300% en el de las menos significativas.
Con todo, tanto el BCE como el Banco de España están vigilando de cerca cómo va evolucionando la liquidez de las entidades para detectar con antelación cualquier posible problema que pudiera surgir y poner remedio a tiempo.
"Ahora estamos revisando mucho la liquidez, pero ya era un foco de atención. Ahora estamos revisando esto con mucho cuidado, tanto el BCE como nosotros", afirmaba Mercedes Olano, directora general de Supervisión del Banco de España, el martes durante la presentación de la Memoria de Supervisión de la institución.
Seguimiento "serio"
Este seguimiento está siendo continuo, "serio", pero no tan exhaustivo como el que ambas autoridades llevaron a cabo durante el confinamiento estricto que se impuso por la llegada de la Covid-19, cuando tenían verdadero temor a lo que pudiera pasar en un contexto de muchísima incertidumbre.
Por el momento, esta vigilancia se está llevando a cabo mediante el contacto con las entidades a través de "conversaciones", concretamente con los responsables de Tesorería de los bancos. Sin embargo, las autoridades no han llegado al punto de vigilancia extrema que llevaron a cabo durante la pandemia.
En el confinamiento estricto, ante la incertidumbre y el miedo de los supervisores de que los clientes retiraran sus depósitos por internet, el BCE diseñó una plantilla que los bancos estaban obligados a rellenar cada día. El Banco de España la replicó para las entidades menos significativas. "Esa plantilla existe, se podría volver a activar, pero el BCE no lo ha considerado necesario y el Banco de España tampoco", explicó Olano.
Sin embargo, "a día de hoy no prevemos que tengamos que utilizar medidas extremas". Y es que la directora general de Supervisión del Banco de España afirmó que no se plantean "aumentar las exigencias a los bancos hoy por hoy". "Hay temas encima de la mesa y se está discutiendo, como siempre que hay momentos de turbulencias", apuntó Olano, añadiendo que "siempre se hace", porque los supervisores intentan evitar los problemas en el futuro. "Pero ahora mismo no nos planteamos aumentar las exigencias de los bancos", añadió.
Prioridad supervisora
En todo caso, la gestión de la liquidez y las vías de financiación de los bancos españoles ya eran una de las prioridades supervisoras del Banco de España para este año antes de los colapsos bancarios, con el foco puesto en el vencimiento de las líneas de liquidez ultrabaratas del BCE, las TLTRO, que los bancos ya están devolviendo al sistema.
Olano considera que la liquidez de los bancos se va a reducir por el fin de estas líneas, pero no tanto como podría pensarse en un principio.
Esto es así porque cuando el BCE concede estas líneas de financiación exige activos que hagan de colateral -de garantía-, de forma que en el momento en el que vencen estas líneas de liquidez los colaterales se liberan y se contabilizan también en los LCR. En todo caso, algo se reducirán estos niveles, dado que algunos colaterales de los que admite el BCE no son líquidos.
Los supervisores están tranquilos. No en vano, los bancos españoles no solamente tienen aún unos 100.000 millones de euros en TLTRO, sino que cuentan con más del doble de este importe en situación de facilidad de depósito -guardados en las arcas del BCE-.
Volatilidad en los CoCos
Desde el Banco de España confían, además, en que la volatilidad que se ha vivido en el mercado de CoCos tras la venta acelerada de Credit Suisse será "momentánea". Como informó EL ESPAÑOL-Invertia, los precios de este tipo de deuda -llamada oficialmente AT1- se desplomaron en el mercado secundario el lunes siguiente a la venta, tras lo cual se han recuperado del susto de Credit Suisse.
El mismo lunes el Banco Central Europeo (BCE), la Autoridad Bancaria Europea (EBA) y la Junta Única de Resolución (JUR) dejaron claro que en el caso de que la intervención bancaria se hubiera llevado a cabo en la zona euro se habrían amortizado antes las acciones que los CoCos. El Banco de Inglaterra hizo lo propio. Todo lo contrario a lo que ocurrió en Suiza.
"No prevemos mayores incidencias. Indudablemente, lo que ha pasado en Suiza crea cierta volatilidad, pero creemos que es momentánea", apuntó Olano. Claro que otra cosa es que, al ser un instrumento con tipos de interés muy altos debido a su alto riesgo, "las entidades pueden elegir en el menú que tienen sustituir un instrumento más caro por otro más barato". Y en este caso se vería un cambio en las vías de financiación de las entidades.