Christine Lagarde, presidenta del BCE, el pasado jueves durante la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Gobierno.

Christine Lagarde, presidenta del BCE, el pasado jueves durante la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Gobierno. BCE Fráncfort (Alemania)

Banca

La incógnita de qué hará el BCE en septiembre frustra el deseo de ver fuertes bajadas en las cuotas hipotecarias

El Euríbor a doce meses se estanca en la semana en la que la institución decide mantener los tipos de interés.

22 julio, 2024 03:10

El Banco Central Europeo (BCE) decidió el jueves lo que todo el mundo esperaba: mantener los tipos de interés. Las esperanzas del mercado estaban puestas en conocer qué intenciones tiene la institución para septiembre, pero se vieron frustradas. Las dudas sobre que el BCE pueda volver a mantener sin cambios los tipos están dando al traste con el deseo de los hipotecados españoles de ver bajadas en sus cuotas que compensen las fuertes subidas de los dos pasados años.

Hace ya mucho tiempo que, influidos por el contexto inflacionario, los miembros del Consejo de Gobierno del BCE decidieron que su política pasaría a ser más que nunca "dependiente de los datos" (data dependent, en inglés). Esto quiere decir que prefieren no dar pistas sobre qué pasará meses adelante, sino ir analizando con cuidado los datos macro disponibles en cada momento para tomar cada decisión.

En los últimos meses la economía de la zona euro ha experimentado un fuerte proceso de desinflación, el cual ha permitido al BCE empezar a dar marcha atrás en la subida más rápida de los tipos de interés que la institución ha vivido en su historia.

Sin embargo, en ese proceso de vuelta atrás solamente ha dado un paso: la bajada de las tasas del pasado mes de junio.

En la reunión de julio, la celebrada los pasados miércoles y jueves, el BCE decidió mantener los tipos de interés en su nivel actual, que es del 4,25% para el tipo general, del 4,5% para la facilidad marginal de crédito y del 3,75% para la facilidad de depósito.

La incógnita de septiembre

El mercado esperaba alguna clave sobre qué decisión tomará el Consejo de Gobierno del BCE en su próxima reunión de política monetaria, que se celebrará los días 25 y 26 de septiembre. Sin embargo, la respuesta por parte del también supervisor bancario fue que la decisión dependerá de los datos, principalmente los relativo a la inflación.

"Las presiones inflacionistas internas siguen siendo intensas, la inflación de los servicios es elevada y es probable que la inflación general continúe por encima del objetivo hasta bien avanzado el próximo año", apuntó el Consejo de Gobierno en el comunicado.

La presidenta del BCE, Christine Lagarde, durante la rueda de prensa de este jueves en Fráncfort

La presidenta del BCE, Christine Lagarde, durante la rueda de prensa de este jueves en Fráncfort Reuters

Durante la rueda de prensa del jueves, Christine Lagarde, su presidenta, no aclaró mucho más. "Lo que hagamos en septiembre está bien abierto y se basará en todos los datos que iremos recibiendo", dijo.

Ante este contexto, los analistas se inclinan por pensar que sí habrá un segundo recorte de los tipos dentro de dos meses"Seguimos esperando que el ciclo de recortes de tipos se reanude en septiembre", apuntan desde UBS, mientras que en Citi indican que esperan que el mercado "mantenga una alta probabilidad de que habrá una bajada en septiembre".

El Euríbor, a la espera

En este contexto, el Euríbor a doce meses, la referencia que se utiliza mayoritariamente para calcular los diferenciales de las hipotecas variables, se mantiene a la espera. Esta semana ha marcado su mínimo del año, tras lo cual ha permanecido estable.

Si bien el índice comenzó la semana en el 3,522% tras tocar el viernes anterior el 3,564%, el martes cayó al 3,506% y el miércoles y jueves se mantuvo en el 3,503%. El viernes cerró en el 3,502%.

Y es que esta referencia se mueve al ritmo de la política monetaria. De hecho, tocó su máximo de este ciclo en 4,228% el pasado 29 de septiembre, dos semanas después de la última subida de los tipos y cuando se hizo palpable que la institución no volvería a incrementar el precio del dinero.

Desde entonces y al ritmo de las expectativas sobre recorte de los tipos de interés, se ha movido el índice y también lo han hecho las esperanzas de los titulares de hipotecas variables de ver fuertes bajadas en sus cuotas para dar marcha atrás en las importantes subidas que experimentaron en 2022 y 2023.

Sin embargo, no parece que esto vaya a tener lugar. La subida de los tipos de interés fue muy rápida -de hecho, la más rápida de la historia del BCE-, pero la bajada no se va a producir a la misma velocidad. Ya se está viendo, pues en junio se produjo un recorte, pero en julio no y hay dudas sobre qué pasará en septiembre.

Por el momento, los titulares de hipotecas variables pueden celebrar que ya ha habido varios meses de bajadas de las cuotas. En concreto, todos los que hayan tenido que aplicar una revisión anual a su cuota con las referencias de abril, mayo y junio ya habrán visto una rebaja. En el caso de las revisiones semestrales, las bajadas se producen desde diciembre.

A día de hoy, la media provisional del Euríbor de julio se sitúa en el 3,561%, de forma que los hipotecados que tengan que revisar su cuota con esta referencia experimentarán un abaratamiento de la misma.

Tomando como ejemplo una hipoteca concedida por 300.000 euros a Euríbor +1% a 25 años, la rebaja será de unos 1.200 euros al año (100 euros al mes) para la revisión anual y de unos 50 euros al año (8 euros al mes) para la semestral.

Con el mismo ejemplo, pero para un préstamo de 150.000 euros, la cuota se reducirá unos 610 euros al año (50 euros al mes) si se revisa anualmente o unos 25 euros al año en el caso semestral. No obstante, las bajadas dependerán de las condiciones de cada hipoteca a nivel particular.