El sector del vino sigue sufriendo el impacto del coronavirus, especialmente por el cierre de bares y restaurantes, que ha provocado caídas de ventas de las bodegas de hasta el 65% a nivel nacional y del 49% a nivel internacional, según datos de la Federación Española del Vino (FEV).
También se ha visto afectado, aunque en menor medida, el canal Alimentación, con una reducción de la facturación de entre el 12% (nacional) y el 23% (exportación).
Dos meses después de la primera encuesta, el 93,9% de las bodegas sigue considerando que se han visto afectados “bastante”, “gravemente” o “muy gravemente”, solo un 2% menos que en la anterior encuesta. Además, las empresas señalan que su facturación durante el primer semestre se ha reducido de media en un 38,7%.
Por tamaño de empresa, las microempresas (menos de 10 trabajadores y de 2 millones de euros de facturación), son las que más se están viendo afectadas por esta crisis, con una caída media del 54% en su facturación en los seis primeros meses del año, mientras que el resto –pequeñas, medianas y grandes- sufren también una importante reducción de aproximadamente el 30%.
Respecto a las previsiones de futuro, las bodegas estiman que para el ejercicio 2020 su facturación sufrirá de media una reducción en torno al 28% y solo un 35% de ellas cree que podrá recuperar los niveles de facturación previos a la crisis en 2021, mientras que un 56% cree que esto no ocurrirá hasta 2022.
Venta 'online'
Los datos positivos del cuestionario llegan de las ventas exteriores y online. En cuanto a la exportación, a pesar de una caída del 12% en abril, el 61% de las bodegas afirma que empieza a notar cierta mejoría en algunos mercados de exportación, en primer lugar del mercado asiático y posteriormente en países europeos como Alemania, Países Bajos y los países nórdicos.
Ahora bien, en el ámbito internacional, desde la FEV consideran que “es fundamental que el Gobierno español, de la mano de sus socios europeos, siga trabajando para llegar a un acuerdo con Reino Unido que evite un Brexit duro y para eliminar los aranceles adicionales impuestos por Estados Unidos el año pasado”.
Con respecto a las ventas online, el 81,7% de las bodegas manifiesta que vende en este canal, cuya facturación ha aumentado de media un 161% desde mediados de marzo, si bien todavía supone un porcentaje muy pequeño de las ventas para la gran mayoría de ellas. Con todo, un 84% de las bodegas que comercializan online manifiestan que han intensificado su estrategia en el mercado de venta online debido a la situación provocada por el Covid19.
Medidas de apoyo
En este sentido, las recientes medidas extraordinarias de apoyo al sector publicadas por el Ministerio de Agricultura (destilación de crisis, almacenamiento de vino y cosecha en verde) “van en la buena dirección y suponen una ayuda importante, pero las cantidades destinadas a ello son insuficientes para las necesidades actuales y, en algún caso, no se adaptan bien a la tipología de empresas más pequeñas”, reconocen desde la federación.
Igualmente, una de las principales preocupaciones de las bodegas se encuentra en el ámbito laboral, tanto por la necesidad de ampliación de ERTE como por la posible falta de mano de obra para la vendimia que está a punto de comenzar.
Por eso, desde la FEV “apoyamos la reivindicación de FIAB al Gobierno para ampliar los ERTE en todas aquellas empresas de la industria de alimentación y bebidas y distribuidores que acrediten un porcentaje del 40% de su facturación dependiente del canal horeca”.