Las rebajas de enero siempre han sido uno de los momentos más deseados por los comerciantes. La avalancha de consumidores en las puertas de los comercios el 7 de enero era una prueba de ello. Pero tras la liberalización de los descuentos, la Covid y sus efectos secundarios dibujan una campaña que el sector califica de “catastrófica” y que no ayudará a levantar las ventas. 

¿Por qué? “Porque llevamos toda la temporada con descuentos y ya hemos visto como caen las ventas”, denuncia Eduardo Zamácola, presidente de la patronal textil (Acotex). Lo dice en referencia a otras campañas anteriores como la del Black Friday, que tuvo un impacto peor al esperado. 

Por ello, las previsiones para la campaña de rebajas de enero no son nada halagüeñas y desde la patronal estiman que las ventas caerán entre un 35% y un 40% con respecto al año anterior. Un duro golpe para el comercio textil en un momento en el que uno de cada cuatro establecimientos ya ha echado el cierre a sus negocios por la Covid. 

Detrás de estas estimaciones encontramos el efecto negativo de las fiestas navideñas y la tercera ola de contagios. Además, la inestabilidad e incertidumbre de la economía y las restricciones de movilidad y de aforo tampoco estimulan el consumo para esta campaña. 

Estas malas previsiones ya tienen una primera consecuencia: caída en la contratación. La campaña de rebajas de enero traerá la firma de más de 167.000 contratos en todo el país, pero llevará aparejada una caída interanual de entre un 5% y un 10% con respecto al año pasado, dependiendo del sector, según Adecco.

‘Online’ frente físico

A pesar de estos datos, el ecommerce -el gran beneficiado de la pandemia- parece ser la gran esperanza. Según el informe de 'Rebajas de Invierno' que realiza cada año iAhorro, “la caída de un 4,06% de las rebajas en tiendas físicas (17,72%) es algo claramente derivado de las limitaciones actuales de la pandemia, pero se compensa en buena parte por la subida de las rebajas online (+3,11%, hasta un 17,04%)”, apunta Antonio Gallardo, experto financiero de iAhorro.

De hecho, el ecommerce, el gran consumo, la alimentación, la distribución, la logística, y el transporte serán los sectores más beneficiados y los que seguirán generando empleo en esta época.

Gracias a la venta online, en estas fechas aumentará la necesidad de personal para la distribución y preparación de los envíos online. Por ello, los perfiles más buscados serán: empaquetadores, mozos, preparadores de pedidos y carretilleros, según Adecco. 

En el otro lado de la balanza está el pequeño comercio. La Unión de Asociaciones de Trabajadores Autónomos y Emprendedores (Uatae) remarca la necesidad de apoyar el comercio de proximidad frente al imperio digital de las grandes superficies.

Desde la organización, recuerdan que "los últimos datos proporcionados por la Seguridad Social reflejan que en términos anuales el sector con mayores pérdidas fue el del comercio con 11.019 autónomos menos y ponen de manifiesto la necesidad de afrontar este mes de ofertas y grandes descuentos desde un prisma que priorice la adquisición de productos en los pequeños comercios".

Cae el gasto 

Otro de los grandes problemas para el comercio es la crisis económica. La incertidumbre sobre la situación -que parece que no mejora ni con la llegada de la vacuna- hace que muchos consumidores opten más por el ahorro que por el consumo. 

Así, se espera que el presupuesto medio para esta campaña de rebajas tire a la baja. En concreto, pasa de los 96,34 euros anteriores a los 93,13 euros, siendo un 3,33% más bajo. Una caída más acentuada si lo comparamos con el presupuesto de 2019 de 99,34 euros, según el estudio de iAhorro. 

¿Recuperación?

La campaña de rebajas de enero no es más que la continuación de una situación dramática en el comercio. En noviembre, las ventas en el comercio minorista cayeron un 4,3% interanual, un registro 1,3 puntos menor al del mes anterior. Desde que se decretó el primer estado de alarma no han dejado de caer debido a las restricciones, aforo y caída del turismo. 

Ni tan siquiera el inicio de la vacunación trae algo de optimismo al sector. “El ritmo de vacunación es muy lento y es imposible visualizar algo a este ritmo”, señala Zamácola, quien critica que el plan de apoyo a la hostelería, turismo y comercio del Gobierno “no incluya ayudas directas”. 

Con este panorama es muy difícil poner una fecha en el calendario para la recuperación. Desde Acotex, ven un primer trimestre “muy crudo” y vaticinan “una cascada de cierres de negocios” si la situación sigue igual.