“Me acuerdo que cuando se lanzó llevábamos muchas horas despiertos y nerviosos hasta que llegase la primera compra”. Así vivió Eva Madrid, senior ACES Manager de Amazon, la entrada del primer pedido de la compañía de Jeff Bezos en España hace justo ahora 10 años. Se realizó 30 segundos después de la medianoche del 15 de septiembre e incluía el Código Penal español, enviado a un cliente de Archena (Murcia).
Unos inicios que Ruth Díaz, vicepresidenta de Amazon Fashion Europa, recuerda como si de una startup se tratase. “Éramos una auténtica startup con muy pocas personas en el lanzamiento. Se trabajaba desde las oficinas de Luxemburgo y París porque no había oficina todavía en Madrid [llegó un año después]”, asegura a Invertia.
No es casualidad que sean estas dos directivas españolas las que hablen del décimo aniversario de Amazon en Invertia. Ambas saben lo que es crear algo desde el inicio. Las dos proceden de BuyVip, startup que compró Amazon antes de su llegada a España. Concretamente en 2010; por lo que conocen el ecosistema del gigante del ecommerce a la perfección.
De ahí que reconozcan que los inicios fueron “ilusionantes” e “intensos” hasta que la cultura norteamericana de Amazon consiguió adaptarse a la española. Algo necesario si querían hacerse un hueco en el país. Y pronto lo consiguieron.
Pero no fue tan fácil. “Hoy se ven cosas diferentes, pero por entonces tratábamos de convencer a la gente de que Amazon era bueno para las pymes y clientes”, relata Ruth Díaz. ¿Y costó convencer a clientes y consumidores? La respuesta es sí. Amazon era una disrupción y el ecommerce no estaba muy desarrollado en nuestro país.
Ahora todo eso es parte de un pasado que aunque lo parezca, no es tan lejano. “Comparo Amazon hace 10 años, cuando la gente compraba productos esporádicos como un kindle para un regalo de cumpleaños”, recuerda Eva Madrid. “Y ahora ya no son productos puntuales. Ahora si necesito leche, la compro en Amazon porque mañana la tengo con Amazon Prime”, añade. Desde hace años, la empresa tiene acuerdos con cadenas como Dia.
En estos años el crecimiento ha sido imparable con servicios como entregas en el mismo día, Amazon Fresh, entrega en el día del lanzamiento o Amazon Lockers. Aunque la estrella de sus productos es Amazon Prime a través del cual los clientes en España también disfrutan de entregas gratuitas en un día en 2 millones de productos y de entregas ilimitadas y gratuitas en dos o tres días en millones de productos, así como servicios de vídeo o música.
De estos servicios, nacen otras curiosidades del gigante del comercio electrónico en España como, por ejemplo, que el artículo más vendido en los últimos 10 años es el Echo Dot de tercera generación.
Y el ebook Kindle más vendido en Amazon.es en los últimos 10 años es 'Reina Roja', de Juan Gómez-Jurado; mientras que 'La Suerte de los Idiotas', de Roberto Martínez Guzmán, es el libro electrónico más solicitado autopublicado a través de KDP.
No exento de polémica
Sus diez años en España también han estado rodeados de cierta polémica. Desde un inicio se les ha acusado de acabar con el pequeño comerciante llegando hasta el punto de que ayuntamientos como el de Barcelona pidieron boicotear a Amazon para favorecer a los más pequeños.
Algo de lo que siempre se ha defendido la compañía. “El negocio pequeño también se puede beneficiar de Amazon con millones de potenciales clientes”, asegura Eva Madrid. En 2020, las 12.000 pymes españolas que venden en Amazon exportaron 650 millones de euros, un 30% más que el año anterior.
Un ejemplo de ello es Amazon Fashion, que lleva 13 años en funcionamiento en Europa, y en España desde 2014. Ahora mismo, “vendemos todo tipo de marcas reconocidas como Lacoste o Levis; marcas españolas (Tous, Desigual...) o marcas pequeñas”, cuenta su vicepresidenta. Un ecosistema en el que conviven todas y todos.
En cuanto a las condiciones laborales, también han sido criticadas en ocasiones por los sindicatos. A lo que la empresa se defiende abriendo sus puertas. “Trabajar en Amazon es fantástico. Cuando ha habido dudas lo que hemos hecho es abrir las instalaciones para que vean como funcionan los almacenes”, argumenta Ruth Díaz.
Boom de empleo
La historia de la empresa en nuestro país tiene una importante dimensión en términos económicos. Desde que Amazon inició su actividad en España, la compañía ha invertido más de 6.800 millones de euros en infraestructuras e instalaciones, envíos y transporte, salarios para los empleados, así como en otros gastos logísticos.
La red de operaciones de Amazon en España comenzó en 2012 con el centro logístico de San Fernando de Henares (Madrid).
Desde entonces, la compañía ha abierto centros logísticos en El Prat (Barcelona), Martorelles (Barcelona), Castellbisbal (Barcelona), Illescas (Toledo), Dos Hermanas (Sevilla), Alcalá de Henares (Madrid), y recientemente ha anunciado que abrirá este mes dos centros logísticos robotizados en Illescas (Toledo) y Corvera (Murcia).
Además, Amazon también cuenta con tres centros logísticos urbanos en Madrid y Barcelona, que proporcionan entregas rápidas a través de Amazon Fresh. Asimismo, la compañía cuenta con dos centros de distribución, ubicados en Getafe (Madrid) y Barberá del Vallés (Barcelona), y diecinueve estaciones logísticas repartidas por todo el país. En total, la red actual de Amazon en España abarca más de 30 centros diferentes.
A esto hay que sumar que Amazon anunció que en 2021 creará 3.000 nuevos puestos de trabajo fijos en España, con lo que su plantilla alcanzará un total de 15.000 empleados, duplicando su plantilla fija en el país en dos años, desde los 7.000 empleados de finales de 2019.
Por otro lado, Amazon está haciendo crecer rápidamente sus centros de desarrollo de software -Tech Hubs- en Madrid y Barcelona, donde casi 600 desarrolladores de software, ingenieros informáticos y científicos de datos trabajan en aplicaciones para Amazon Business, Kindle y libros, comercio minorista e inteligencia artificial.
Algo que para la vicepresidenta de la división de moda refleja la apuesta de Amazon por el talento español.
¿Y hasta dónde llegará Amazon en España? Pues quizás al espacio, como ya ha hecho su creador, Jeff Bezos. De momento no parece tener límites al igual que el desarrollo profesional de las dos directivas españolas que han progresado dentro de la empresas en diversos cargos directivos y para las que estos diez años han pasado volando.