Petronor (Repsol) instalará en el Puerto de Bilbao su planta de combustibles sintéticos
La Autoridad Portuaria de Bilbao ha adjudicado a la filial del grupo Repsol una parcela de 46.700 metros cuadrados en Punta Sollana.
23 septiembre, 2020 17:27Noticias relacionadas
Petronor, filial del grupo Repsol, instalará en una parcela de 46.700 metros cuadrados del Puerto de Bilbao su nueva planta de combustibles sintéticos a partir de hidrógeno verde, generado con energía renovable, con una inversión de 67 millones de euros en una primera fase.
El consejo de administración de la Autoridad Portuaria de Bilbao ha resuelto adjudicar a Petronor el concurso para el otorgamiento de esta parcela en el Puerto de Bilbao, en Punta Sollana, para la puesta en marcha de un proyecto de "marcado carácter estratégico, de alcance global y referencia mundial, vinculado a la innovación y la sostenibilidad medioambiental", que "contribuirá a la reducción de emisiones de CO2 y a desarrollar la economía de hidrógeno en torno al Puerto de Bilbao como núcleo neurálgico".
Según ha informado la Autoridad Portuaria, este proyecto consiste en la construcción de "una de las mayores plantas mundiales de producción de combustibles sintéticos a partir de hidrógeno verde, generado con energía renovable".
La principal característica de estos combustibles es que se producen con agua y CO2 como única materia prima, pudiendo utilizarse en motores de combustión de coches, camiones o aviones, así como otras aplicaciones.
En una primera fase la inversión ascenderá a 67 millones de euros, con la previsión de que estas instalaciones se encuentren operativas a partir de 2024. Posteriormente el citado proyecto se complementará con las Fases II y III, que se ubicarán junto a la primera y supondrán una inversión adicional de 76 millones de euros, consistiendo en una planta de generación de gas a partir de residuos urbanos, como papel, cartón, plástico y textiles, lo que evitará utilizar combustibles tradicionales y propiciará la economía circular.
Inicialmente esta planta de pirolisis podrá procesar alrededor de 10.000 toneladas al año de residuos urbanos, cifra que puede ascender a 100.000 toneladas en fases posteriores. Este gas se empleará como combustible para la propia refinería.
Última parcela de suelo industrial
Los 46.700 metros cuadrados adjudicados en Punta Sollana corresponden a la última parcela libre de la zona industrial del Puerto de Bilbao, en el Abra Exterior. El proyecto de Petronor competía en concurso público con otros dos proyectos, también de "gran interés", según ha señalado la Autoridad Portuaria.
La propuesta finalmente seleccionada se vincula con aspectos como "la innovación, la tecnología puntera, la sostenibilidad, la descarbonización y la transición energética, que contribuye a la reducción de la huella de carbono", criterios que se alinean con la estrategia de la propia Autoridad Portuaria de hacer del Puerto de Bilbao "un espacio más sostenible e innovador".
Asimismo, se ha tenido en consideración, entre otras cuestiones, "la alta inversión confirmada, la viabilidad técnica, económica y operativa del proyecto, y la generación de empleo".
La Autoridad Portuaria ha destacado que se trata de "una decidida apuesta de Repsol por Euskadi, teniendo cuenta lo que supone una empresa como Petronor para el empleo y la riqueza del entorno". Con un potencial productivo de 12 millones de toneladas/año, es la mayor refinería de España y exporta algo más de un tercio de su producción. Cuenta con una plantilla de cerca de 1.000 trabajadores y genera un empleo inducido de 6.200 personas.
Proyectos anunciados en junio
El pasado 15 de junio, el consejero delegado de Repsol, Josu Jon Imaz, anunció la construcción en Euskadi de una planta de producción de combustibles sintéticos, con cero emisiones netas, y otra planta de pirólisis que generará gas a partir de residuos urbanos, en la que la compañía española tendrá por socio al 'gigante' petrolero Saudi Aramco.
Con estos proyectos, la compañía avanza decididamente en la transición energética y en el objetivo de ser una compañía cero emisiones netas en el año 2050.