El Partido Popular ha presentado su plan para reducir el desbocado precio de la luz. Sus propuestas se centran en reducir la fiscalidad energética y en utilizar la milmillonaria recaudación por CO2 para que la factura de los consumidores españoles pueda ser hasta un 20% más barata.

En algunos puntos coincide con el PSOE y en otros se olvida que la factura de las familias está indexada al mercado diario y por tanto, es víctima de sus vaivenes.

Pero eso es lo que ha anunciado su presidente, Pablo Casado. Su objetivo es recortar 9.000 millones con cuatro medidas muy concretas pero que coinciden con las demandas que el sector eléctrico lleva tiempo reclamando.

Casado ha insistido en reclamar una rebaja fiscal y que se saquen determinados costes del recibo de la luz, como por ejemplo los asociados al suministro a las islas, los costes extrapeninsulares, y que se carguen a los Presupuestos Generales del Estado.

En un desayuno informativo de Fórum Europa, Casado, ha dicho que con la reforma energética que propone su formación es la vía para, por fin, ver aliviado el bolsillo de los consumidores, especialmente los domésticos. 

Cuatro medidas

Primera medida: en primer lugar, pretenden reducir con carácter "permanente" la fiscalidad energética. En concreto, eliminar el impuesto a la producción eléctrica -algo que el Gobierno ha hecho como suspensión temporal en este tercer trimestre-.

Segunda medida: por otro lado, proponen otra media también se ha hecho por el Gobierno hasta el final de año. Reducir el IVA del 21 al 10%, aunque algunas asociaciones de consumidores piden reducirlo al máximo posible, es decir, al 4%.

Tercera medida: a esas dos reducciones impositivas, que según Casado supondría la rebaja en unos 2.000 millones de euros cada una, el PP añadiría que "los derechos de emisión de CO2 reviertan en el sistema eléctrico, es decir, en la factura de la luz", lo que supondrían entre 2.300 y 2.500 millones adicionales, según sus cálculos.

Casado ha dado así por hecho que las empresas eléctricas repercutirían a los consumidores esos menores ingresos para "las arcas del Estado".

Cuarta medida: una tercera medida que el presidente del PP propone es "que los costes no energéticos, como son los costes extrapeninsular se puedan afrontar directamente también por el presupuesto".

Costes extra

Los costes extra peninsulares son la diferencia entre lo que se paga por la electricidad en la Península, con mayor capacidad de generación, respecto a las islas, que están más aisladas.

Hasta ahora se está pagando al 50% por el presupuesto, y supone un cargo de 750 millones en la factura. Sería otra partida a reducir.