Geotermia en metro, coches y autobuses: Madrid Subterra diseña planes bajo tierra para generar energía limpia
En el subsuelo de la ciudad de Madrid hay posibilidades energéticas: el calor que producen los millones de personas que la habitan.
12 diciembre, 2021 05:30Noticias relacionadas
Los túneles de la M30, los alrededores de la parada de metro Sol, el intercambiador de autobuses de Conde de Casal... la capital de España puede dejar de ser el sumidero energético del país y empezar a generar su propia energía con el calor que producen las millones de almas que la habitan.
Esa es la idea de Madrid Subterra, un grupo de organizaciones públicas y privadas que buscan un modelo energético más autónomo, limpio y sostenible para Madrid. Su objetivo, sin ánimo de lucro, es promover la exploración y explotación del potencial de energía limpia y renovable del subsuelo de Madrid.
"Nuestra labor no es desarrollar los proyectos sino apoyar las ideas innovadoras", explica a EL ESPAÑOL-Invertia Armando Uriarte, el director general de Madrid Subterra, "e intentar que se lleven a cabo".
Paseo Verde del Suroeste
De los proyectos que ya están tomando cuerpo, destaca el de aprovechar el calor del futuro Madrid Paseo Verde del Suroeste, que pretende remodelar y soterrar a lo largo de cuatro kilómetros la A5 en el tramo de Paseo de Extremadura.
"Le propusimos al Ayuntamiento de Madrid que incluyera, en la redacción de los pliegos, el aprovechamiento energético".
Y la manera de conseguirlo es a través de lo que llaman Intercambiador Geotérmico. Se trata de un proyecto de geotermia, una infraestructura de tubos que podría instalarse en parkings, cimentaciones o túneles, y que en esta ocasión, se enterrarían junto con la carretera. Esos tubos llevarían agua a temperatura del terreno.
Después, se llevaría a una bomba de calor y se utilizaría para abastecer de agua caliente sanitaria (ACS) y calefacción a los edificios de la zona. "Según el último estudio realizado por la Universidad Politécnica de Madrid, se calcula una potencia disponible para refrigeración de 1.804 kW y 3.008 kW para calefacción".
La bomba de calor es un dispositivo que extrae el calor de un espacio y lo transforma en energía eléctrica. Mediante una de estas bombas se logra producir calefacción en invierno, refrigeración en verano y obtener agua caliente sanitaria (ACS).
El año que viene se lanza la licitación y, si todo va bien, se espera que en 2025 puedan estar finalizadas las obras.
Puerta del Sol
Bajo la Puerta del Sol se esconde un gran poder calorífico. "Metro de Madrid y metros de todo el mundo tienen un problema de calor enorme por el tránsito de trenes y tienen que evacuarlo porque si no, los pasajeros no podrían estar allí", añade el responsable de Madrid Subterra.
"Los sistemas actuales de refrigeración pasan por sistemas de ventilación que expulsan el aire caliente a la calle a través de unas rejillas pero que exacerban el efecto 'isla de calor' a la ciudad y al asfalto. Nosotros queremos aprovechar ese calor, ese recurso energético y evitar ese efecto". Es lo que han llamado Intercambiador de Calor y el sistema utilizado es muy parecido al de la A5.
"Elegimos la estación de metro de Sol por ser emblemática, porque genera un calor considerable y porque justo al lado está el edificio de la sede de la Comunidad de Madrid (CAM)". Y según sus cálculos, esta infraestructura podría generar todas las necesidades de ACS del edificio público e incluso hasta el 25% de la calefacción que consume.
M30 y Matadero
La aerotermia es la energía en forma de calor que una bomba es capaz de extraer del aire ambiental. En Madrid se podría extraer el calor de los túneles de la M-30 (generado por los motores y humos de escape de los vehículos) y además, "como se mete mucha agua del río Manzanares en los túneles, se tiene que bombear". Por eso, propone "utilizar ese agua que está a 18ºC todo el año para llevarla por los tubos y generar energía".
Utilizar la energía subterránea de Madrid, procedente de los túneles de la M30, sería un gran paso hacia una ciudad sostenible. El extenso entramado de túneles que existe bajo las calles de la capital es un potencial energético del subsuelo urbano.
Y esa energía podría destinarse para la climatización de los edificios de Matadero de Madrid, un conjunto de pabellones de estilo neomudéjar construido a principios del siglo XX a orillas del río Manzanares.
Intercambiador Conde de Casal
Por último, Madrid Subterra propone otro proyecto más. Se trata de la ampliación de la Línea 11 del metro, entre plaza Elíptica y Conde de Casal, donde se va a construir un intercambiador de transporte.
Los intercambiadores de calor y los muros termoactivos transfieren calor entre dos fluidos, o entre un sólido y un fluido en movimiento. Es decir, son los que establecen el contacto entre el lugar de donde se extrae el calor y el que ha de recibirlo. En Madrid, se utilizarían para llevar calor de los túneles del metro y la M-30 hasta los hogares.
"Aunque el coste, por ejemplo, de la infraestructura para generar energía en la A5 estimamos que podría ser de unos cuatro millones de euros, cualquier presupuesto sería rentable a la larga", concluye Armando Uriarte.
"Estamos hablando de proyectos que no solo no necesitan combustibles fósiles y por tanto no hay emisiones de CO2, sino que además, ayudan a que Madrid deje de ser un sumidero energético".