Rusia bombardea almacenes de gas en Ucrania y dispara los precios del mercado europeo casi un 10% en un solo día
En un año Ucrania deberá decidir si cierra definitivamente el único grifo que queda abierto de gas entre Rusia y Europa.
12 abril, 2024 02:17Con la guerra a las puertas de Europa, será difícil controlar la volatilidad de los precios de la energía en el Viejo Continente. Después de semanas de precios tan bajos como antes de la pandemia, el índice holandés de referencia, el TTF, ha escalado casi un 10% en sólo un día por los bombardeos a almacenes de gas en territorio ucraniano.
Rusia ha atacado dos instalaciones subterráneas de almacenamiento de gas en Ucrania, recordando las amenazas a la infraestructura energética del país, según adelanta Bloomberg.
Las instalaciones siguen funcionando mientras los especialistas evalúan el impacto del bombardeo, según Oleksiy Chernyshov, director ejecutivo de la estatal Naftogaz Ukrainy. Los ataques con misiles rusos también destruyeron la mayor planta de generación de energía en la región de Kiev.
Los ataques marcaron el cuarto asalto a la zona donde hay almacenes de gas de Ucrania. Los trabajadores y las instalaciones en tierra siguen siendo vulnerables.
Los incidentes resaltan el riesgo potencial para el almacenamiento de gas en el país, en caso de que las reservas de Europa se llenen este verano. Ucrania tiene más capacidad de almacenamiento que cualquier nación del continente al oeste de Rusia y está cortejando activamente a los traders para que mantengan suministros allí.
Los futuros del gas europeo subieron hasta un 9,5%, rozando los 30 euros/MWh y alcanzando el nivel de precios más alto en más de tres semanas.
Almacenes de gas para la UE
Las instalaciones de almacenamiento de Ucrania están ubicadas en la parte occidental del país, en la frontera con la Unión Europea, con sitios a una profundidad de hasta dos kilómetros bajo tierra. También están conectados a las redes de la UE, debido al papel que el país ha desempeñado durante décadas como ruta de tránsito para los suministros de energía rusos.
El gas almacenado en el país cayó a casi cero después de la invasión a gran escala de Rusia en 2022, pero se ha recuperado desde el año pasado, y empresas como Shell Plc y DXT Commodities utilizan sus instalaciones. También Naftogaz, la compañía nacional de petróleo y gas de Ucrania, ha mantenido conversaciones este año con RWE, la noruega Equinor y las francesas TotalEnergies y Engie. La antigua Gazprom Germania, rebautizada como 'Securing Energy For Europe' (SEFE) también está considerando volver a almacenar gas en Ucrania.
Ucrania ofrece a los traders extranjeros reservar hasta 10.000 millones de metros cúbicos de su capacidad de almacenamiento de gas natural este año, según Naftogaz. El volumen que puede destinarse a empresas internacionales representa alrededor de un tercio de la capacidad total del país y está a la par del nivel del año pasado.
Si bien Europa salió de la temporada de calefacción con inventarios de gas inusualmente altos, los operadores siguen alerta a la alta volatilidad y las interrupciones en el suministro.
Por otra parte, el gas que suministra a la instalación de GNL de Freeport en Texas disminuyó durante la noche, según datos de BloombergNEF, lo que se suma a las preocupaciones sobre el suministro. La planta ha estado en mantenimiento desde finales de enero y no ha estado en plena operación desde principios de este año.
Fin del gas ruso en 2025
A la influencia de la guerra en los precios del mercado de gas europeo, ahora la UE también corre otro riesgo más de aumentar los precios de la energía este invierno.
En 2025 podría expirar un acuerdo que mantiene el flujo de gas ruso a Europa a través de Ucrania, según ha publicado POLITICO.
Moscú y Kiev firmaron un acuerdo de tránsito de gasoductos de cinco años en 2019 que ha seguido suministrando gas a los países de la UE a pesar de dos años de guerra en Ucrania.
Ahora que el contrato finaliza el 31 de diciembre de 2024, Ucrania ha dicho que no buscará renovar el pacto. La comisaria de Energía de la UE, Kadri Simson, está de acuerdo, argumentando que el ejecutivo de la UE "no tiene interés" en presionar para revivir el acuerdo.
Eso significa que la UE pronto perderá alrededor del 5% de sus importaciones totales de gas, principalmente a Europa central y sudoriental, según el documento interno preparado por la Comisión Europea. Si esa pérdida se combina con una ola de frío prolongada, agrega el memorando, podría crear el "peor de los casos" para los países que dependen del tránsito de gas a través de Ucrania.
[La Eurocámara adopta la reforma para descarbonizar el mercado del gas y la del mercado eléctrico]
La perspectiva está generando ansiedad en toda la región, y es probable que Austria, Hungría y Eslovaquia enfrenten las mayores ramificaciones, según Aura Sabadus, analista senior de la firma de inteligencia de mercado ICIS.
Todos podrían eventualmente intercambiar importaciones rusas por suministros provenientes de Alemania, Italia o Turquía, pero Berlín acaba de aprobar una medida para gravar unilateralmente las exportaciones de gas, así que complicaría esa posibilidad.
Bruselas ya ha pedido a los países de la UE que eliminen gradualmente las importaciones de combustibles fósiles rusos para 2027. Y hasta ahora el bloque ha reducido su dependencia del gas ruso en alrededor de dos tercios en comparación con 2021, recurriendo a países como Noruega y Estados Unidos. Pero ahora la UE debe prepararse para un tipo diferente de corte.
Aun así, en Europa hay temor de que el corte planeado pueda provocar escasez de energía.