Cuatro años de crisis y un horizonte con nuevas amenazas: los fabricantes eólicos vuelven a 'pinchar' este 2024
- La crisis del sector añade nuevas presiones a las cuentas de Siemens Gamesa, Vestas y GE Vernova, mientras Nordex empieza a ver la luz.
- Más información: Gamesa reactiva la venta de sus problemáticas turbinas en España y revisará todos los proyectos ya operativos.
La crisis que comenzó hace cuatro años sigue sin dar tregua a las compañías referentes en la fabricación de aerogeneradores. Impulsada en 2020 por los problemas de las cadenas de suministro y el encarecimiento de las materias primas, la recesión eólica vuelve a socavar las cuentas de Siemens Gamesa, Vestas y GE Vernova en 2024.
La caída de la demanda, un aumento en los costes por reparación de proyectos instalados y la creciente competencia de China empañan el horizonte de recuperación de las empresas. Sólo Nordex (el fabricante de Acciona) logra sobreponerse a la tormenta.
Aunque Siemens Energy logró reducir en un 59% la sangría en su filial eólica Siemens Gamesa, el negocio continuó registrando unas pérdidas operativas de 1.781 millones de euros en su último ejercicio fiscal (que termina en septiembre).
Los pedidos del fabricante español se redujeron en el último año un 2,8%, principalmente debido a las interrupciones temporales en la comercialización de las problemáticas turbinas 4.X y 5.X onshore.
Christian Bruch, CEO Siemens Energy, alertó en la presentación de sus cuentas que la filial vasca continuará registrando una "pérdida muy significativa", con una previsión negativa de 1.300 millones de euros para el ejercicio 2025. Por ello, subrayó la necesidad de trabajar en la contención de gastos, entre las cuales se incluyen los 4.100 despidos anunciados este año (430 en España).
En esta línea, indicó que se mantienen las negociaciones con los sindicatos y expresó la intención de mitigar el impacto en algunos casos mediante recolocaciones, aunque sin garantizar la continuidad de las fábricas.
La danesa Vestas también enfrenta importantes desafíos operativos y financieros en 2024 que están afectando su rentabilidad. Hasta septiembre, registró unas pérdidas netas de 104 millones de euros, un 47% más que en el mismo periodo de 2023.
Entre los principales aspectos negativos se encuentra el impacto de las elevadas provisiones de garantía, que en el tercer trimestre alcanzaron 313 millones de euros, representando un 6% de los ingresos trimestrales.
Estas provisiones reflejan costes adicionales asociados al mantenimiento y reparación de aerogeneradores instalados, un problema que la empresa atribuye a desafíos técnicos y a un aumento en los costes de reparación. Esta situación ha añadido presión a los márgenes, limitando la capacidad de Vestas para capitalizar su sólida cartera de pedidos.
A nivel estratégico, la danesa ha tenido que ajustar sus planes de inversión. En concreto, Vestas redujo su presupuesto de inversiones a 1.000 millones de euros desde los 1.200 millones inicialmente proyectados, como respuesta a las complejidades de la cadena de suministro y la necesidad de optimizar recursos.
Al otro lado del charco, la debilidad de los fabricantes eólicos también se vio reflejada en las cuentas de GE Vernova. Los pedidos en el área de energía eólica cayeron un 19% en comparación con el mismo trimestre del año anterior, reflejando una menor demanda en un mercado global. Esta caída, combinada con problemas en contratos y retrasos en proyectos offshore, añadieron mayor presión al negocio.
La división de energía eólica offshore, una de las apuestas más ambiciosas de la compañía estadounidense, registró pérdidas operativas de 306 millones de dólares durante el trimestre.
Como resultado de estos desafíos, la compañía estadounidense reportó una pérdida neta de 99 millones de dólares en el trimestre.
El caso de Nordex
Nordex es la única compañía que consigue recuperar la rentabilidad en 2024 tras varios años en números rojos. El fabricante alemán de aerogeneradores, participado por Acciona, registró pérdidas de 8,7 millones de euros en los primeros nueve meses del año, reduciendo casi por completo los 333,7 millones de euros de pérdidas acumuladas en el mismo periodo de 2023.
La empresa logró un ebitda positivo de 189,5 millones de euros, en contraste con los 66,6 millones que se dejó hasta septiembre del año anterior. Durante este período, la filial de Acciona alcanzó 5.083 MW en nuevos pedidos de turbinas, superando los 4.892 MW del mismo lapso del año pasado.
Nordex mantiene su previsión para el cierre del año, estimando que el margen ebitda se situará en la parte alta del rango esperado, entre el 3% y el 4% de las ventas. A medio plazo, la compañía aspira a alcanzar un margen del 8%.