El precio del alquiler de la vivienda en España se redujo un 8,1% en el último año. En septiembre, el precio del metro cuadrado se situó en 10,5 euros, según los datos publicados por el portal inmobiliario Idealista.
La caída en Cataluña, con un descenso del 8,8%, superó la media nacional, seguida de Madrid, con una reducción de los precios de los alquileres del 7,2%, y de Baleares, con los precios del alquiler un 3,5% más baratos que hace un año.
Por el contrario, 11 comunidades autónomas mostraron incrementos, con un encarecimiento del 6% en Cantabria y del 5,3% en Castilla-La Mancha.
Las ciudades con el mercado más dinámico antes de la pandemia fueron las que más notaron la contracción de los precios. Madrid registró el mayor descenso interanual, con una reducción del 7,7%, seguido de Orense, con un 7,4%, y Barcelona, con una caída de los precios del alquiler del 7,3%.
A pesar de la caída del último año, en el último trimestre la tendencia se ha dado la vuelta y han comenzado a recuperarse, con un repunte del precio del suelo del 2% en Barcelona, del 1,9% en Palma y del 1,5% en Madrid.
San Sebastián, la más cara
El metro cuadrado se situó en Barcelona en 14,8 euros, una cifra muy similar a la de Madrid, en 14,7 euros, aunque la capital más cara para vivir fue San Sebastián, con el precio del metro cuadrado en 14,9 euros. Las ciudades más baratas para alquilar, según el índice de Idealista, son Ciudad Real, con el metro cuadrado a 5,5 euros, Cáceres y Cuenca, a 5,6 euros en ambos casos.
En total, el alquiler es ahora más caro que hace un año en 34 capitales, con una subida del 9,1% en Huesca y del 7,9% en Albacete. Por provincias, 40 de ellas han seguido la misma tendencia alcista, con un repunte del 8,9% en Cuenca y del 7,3% en Pontevedra.
El portavoz de Idealista, Francisco Iñareta, considera que "el mercado del alquiler ha vuelto a coger fuerza" gracias a la consolidación del proceso de vacunación.
"La bajada del stock ha provocado que en algunas grandes capitales se empiecen a registrar subidas trimestrales en el precio de las rentas. La relación entre precio y stock es directa", ha explicado Iñareta.
También ha advertido de que "las políticas restrictivas (...) pueden provocar el efecto contrario al deseado", con una retirada del parque inmobiliario que provoque una subida del precio de los alquileres.