La transformación digital es a partes iguales un reto y una necesidad para todas las empresas y administraciones. Sheila Méndez, directora de este segmento de Izertis, señala que “siempre se ha intentado ser competitivos con base en el ahorro de costes de personal e infraestructuras” cuando es en este salto tecnológico “donde realmente está el potencial”.
Como prueba de esta sentencia apunta hacia el sector industrial, donde afirma que ya “se está viendo un retorno muy claro de su inversión en transformación digital”. En este caso, Méndez apunta que la clave está en “optimizar mucho la operativa”, ya que, aunque haya fábricas que no pueden producir más, “sí pueden optimizar la producción que llevarán a cabo mediante la implementación de una estrategia y el despliegue de tecnología”.
Por lo que se refiere a la administración pública, la directora de transformación digital de Izertis, señala que la clave aquí reside en “ahorrar tiempo en procesos que llevan muchos trámites e interacciones” con el objetivo de “el papel casi ni exista”. Un postulado que se puede llevar también a la empresa, donde cada vez más decisiones deberían basarse en datos más que en estimaciones a ciegas.
En cualquier caso, Méndez afirma que “se puede y se debe calcular cuánto puede aumentar el beneficio” con la implementación de cualquier mejora tecnológica. “Es lo que tiene que hacer girar a todo, el retorno de la inversión, que tiene que ser medible y contar con indicadores que nos ayuden a medir el seguimiento adecuado del plan”, sentencia la experta.