Nuevo año, mismas dudas: las grandes tecnológicas arrancan 2023 con más despidos y un negocio con un futuro incierto
Amazon y Salesforce anuncian recortes de plantilla en la primera semana de enero, que se suman a los más de 150.000 empleos suprimidos en 2022.
8 enero, 2023 02:05Las grandes compañías tecnológicas han comenzado 2023 de la misma forma que terminaron 2022: recortando plantilla. El cambio de año no ha logrado disipar las nubes en el horizonte de un sector que vio como la pandemia de la Covid-19 impulsaba aún más su crecimiento, pero que ahora está sufriendo las consecuencias de una economía global en clara ralentización.
La subida la inflación y de los tipos de interés están suponiendo un revés para unas empresas acostumbradas hasta hace no mucho a registrar resultados récords. Sin embargo, unas cuentas trimestrales decepciones, unas plantillas sobredimensionadas y la perdida de confianza de los inversores han obligado al sector a apretarse el cinturón, lo que pasa necesariamente por llevar a cabo reducciones de personal.
Los datos publicados por Layoffs.fyi, una página web que desde que comenzó la pandemia lleva recopilando las cifras de despidos en el sector tecnológico, muestran que el pasado año más de 1.000 empresas de esta industria llevaron a cabo recortes de plantilla que afectaron a más de 150.000 empleados. Entre ellas, lo gran mayoría de las 'Big Tech': Amazon, Meta, Twitter, Netflix, Cisco o Snap.
Recortes que ya han tenido su continuación en 2023 pese a que apenas ha pasado una semana desde que comenzó el año. Amazon ha sumado otros 8.000 empleados al recorte de 10.000 personas que llevó a cabo en noviembre. Un número similar de trabajadores se verá afectado por el recorte anunciado por Salesforce. Vimeo despedirá al 11% de su plantilla (unas 150 personas) y ByteDance, la matriz de TikTok, suprimirá centenares de puestos en su versión china Douyin, así como en sus divisiones de vídeo e inmobiliaria.
Mientras tanto, el Nasdaq ha comenzado 2023 también a la baja después de haber perdido un 33% de su valor en 2022, la mayor caída del índice desde 2008. Mayor ha sido aún el desplome bursátil de las Big Tech: Meta Platforms ha caído alrededor de un 65%; Amazon y Netflix han bajado más de un 50%; y Alphabet (Google) más de un 40%. Por su parte, los descensos de Apple o Microsoft han rondado el 30%.
"El gran declive"
Álvaro Antón Luna, responsable de Abrdn para Iberia, señala que los inversores del sector tecnológico recordarán 2022 como "el año del gran declive". Y es que después de un largo periodo de crecimiento y de que los beneficios de las empresas superasen sistemáticamente las estimaciones, el pasado año fue el ejercicio en el que se ralentizaron ambas variables.
Por su parte, Daniel Garrido, director de Recursos Humanos en CEF-UDIMA, apunta en declaraciones a EL ESPAÑOL-Invertia que el alto volumen de despidos que se registró el pasado año y que probablemente se mantenga este 2023 se ha debido a un compendio de diferentes causas que están "íntimamente ligadas".
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Por un lado, está la guerra en Ucrania tras la invasión rusa, que aceleró la subida de la inflación y, en consecuencia, de los tipos de interés. Para compañías con una gran necesidad de financiación como las tecnológicas, esto ha supuesto un encarecimiento "muy notable" de sus costes financieros y se han visto obligadas a reducir otros costes fijos, como los gastos de personal.
Por otro, se encuentra el fuerte crecimiento que registraron durante la pandemia de la Covid-19. Cora de Diego, technology business manager de Hays, añade que los recientes despidos responden sobre todo al "sobredimensionamiento de sus plantillas durante estos últimos años". De hecho, recuerda que empresas como Meta, Twitter, Netflix, Google o Amazon ampliaron su fuerza laboral de manera masiva, en algunos casos llegando casi a duplicarla respecto a años anteriores.
"Debido a la 'sobrecontratación', la reciente incertidumbre en relación a la situación económica actual, la reducción de sus beneficios millonarios en algunas de ellas y la caída del precio de sus acciones, entre otras razones, las Big Tech se han visto obligadas a reducir presupuestos y reestructurar sus plantillas que, de nuevo y como han reconocido ellas mismas, estaban sobredimensionadas", incide.
De Luna coincide en este mismo diagnóstico y añade que las firmas que operan en el sector empresarial están resistiendo mejor que las que están expuestas al consumo, ya que se trata de una tecnología que apuesta por la "transformación digital", en contraposición a los modelos impulsados por el consumo y la publicidad.
Inestabilidad
De cara a 2023, el escenario parece que, por el momento, no va a ser muy diferente al vivido en 2022, como muestran los anuncios de Amazon, Salesforce, Vimeo o Bytedance. De hecho, el responsable de Abrdn para Iberia anticipa que el panorama podría seguir siendo inestable hasta que se aclaren las expectativas para 2023.
El director de Recursos Humanos en CEF-UDIMA destaca que "desafortunadamente" la perspectiva en 2023 no cambia mucho respecto a lo vivido en 2022. Así, señala que la inversión de empresas y familias destinada a la tecnología se está ralentizando, "algo lógico tras décadas de avance y crecimiento".
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"Volvemos a lo mismo, estas grandes tecnológicas tienen una gran financiación que depende en muchas ocasiones de su posición bursátil. Y esto, ante la incertidumbre económica con la que comienza el año, nos lleva de nuevo a un escenario en el que precisarán reducir otros costes entre los que volverán a estar los gastos de personal", apunta.
Por su parte, De Diego cree que es posible que se sigan viendo despidos en algunas Big Tech como manera de ajustar costes ante la nueva situación del mercado, y hasta que vuelvan a alcanzarse a niveles de dimensionamiento de equipos y departamentos más cercanos a los de años anteriores.
No obstante, la technology business manager de Hays cree que serán "más residuales" y apunta que las perspectivas del sector, a nivel general, "son muy buenas", ya que la digitalización y el consumo tecnológico no paran de crecer. A ello se suma que la escasez de perfiles "sigue siendo una realidad" en este mercado.
De Luna añade que en la actualidad las expectativas de ingresos para 2023 no están claras, lo que puede tener tambien consecuencias en sus valoraciones bursátiles. Así, apunta que los inversores pueden dudar a la hora de volver a tomar posiciones hasta que las estimaciones de crecimiento estén más definidas. Pero aún así remarca que el sector sigue siendo "atractivo" para el mercado ya que, a largo plazo, los vientos de cola estructurales permanecen intactos.
España
Mientras tanto, la industria tecnológica española parece ajena a los recortes masivos de personal que están teniendo lugar al otro lado del charco o en el continente asiático. "En España, el sector está en un momento de crecimiento muy bueno y la tendencia es que este año siga igual", subraya De Diego.
No obstante, recuerda que el tejido empresarial nacional está compuesto mayoritariamente por pymes cuyo negocio y volumen de contratación no son comparables a los de los gigantes estadounidenses, "con lo que estos desajustes de sobredimensionamiento no son extrapolables al engranaje de las empresas tech nacionales".
Por su parte, Garrido añade que los ajustes de plantilla en el sector se están produciendo sin necesidad de tantos despidos. "En España existe un déficit de candidatos para cubrir sus posiciones que, unido a la situación financiera que no permite elevar los costes de contratación, lleva a las empresas españolas igualmente a un recorte de plantilla", recalca.
Además, subraya que la normativa laboral en España es distinta a la estadounidense y no permite de forma ágil llevar a cabo esos grandes despidos masivos. "Y si se llevasen a cabo el coste sería mucho mayor que el que habría en los Estados Unidos", agrega.