Zegona rentabiliza su apuesta por Vodafone: sus acciones valen 10 veces más que cuando anunció su compra hace un año

Vodafone España es actualmente el único activo de la firma de inversión británica fundada en 2015 por Eamonn O’Hare y Robert Samuelson, actuales consejero delegado y director de operaciones de la compañía, respectivamente. De ahí que el comportamiento de las acciones de Zegona esté muy vinculado a cómo evolucione el negocio de la operadora española. 

Hace un año, cuando se anunció oficialmente la operación, las acciones de Zegona se encontraban suspendidas por orden de la Autoridad de los Mercados Financieros (FCA por sus siglas en inglés). El regulador había decidido detener temporalmente su negociación el 22 de septiembre de 2023 tras aparecer los primeros rumores sobre una posible compra de Vodafone España.

Rescatando a Vodafone: el plan de Zegona para dejar atrás una década de pérdidas y volver a ser competitivos

Cuando se suspendió su cotización, los títulos de Zegona tenían un precio de 31,20 peniques esterlinos (0,312 libras). El 14 de noviembre, fecha en la que se retomó su negociación en la Bolsa de Londres una vez se hizo oficial la operación, su valor se disparó un 352%, hasta cerrar en los 141 peniques (1,41 libras). 

En los meses posteriores, las acciones de la compañía mantuvieron la tendencia alcista. Superaron los 200 peniques a principios de febrero, coincidiendo con la autorización de la Comisión Nacional de los Mercados de la Competencia (CNMC) y la Comisión Europea (CE), y se situaron por encima de los 300 peniques a mediados de julio. 

Mayores subidas

En especial, destaca la subida del 16,91% registrada el 24 de julio, la segunda mayor desde que se comunicó la operación. Ese día Vodafone España anunció un preacuerdo no vinculante con Masorange para la posible creación de una sociedad conjunta de fibra a nivel nacional en la que prevén dar entrada a un tercer inversor. 

Otros repuntes importantes fueron los registrados el 2 de febrero (14,75%), un día después del visto bueno de la CNMC; el 3 de junio (8,66%), fecha en la que oficialmente Zegona se hizo con el control de Vodafone; o el 31 de julio (7,41%), la jornada posterior al anuncio de su acuerdo con Telefónica para crear una empresa conjunta de fibra. 

En estos doce meses, el precio máximo alcanzado por las acciones de Zegona se registró el pasado 26 de septiembre, cuando los títulos de la firma británica cerraron la sesión en los 372 peniques. Esto supone un 1.092% más en comparación con lo que valían antes de conocerse la operación con Vodafone. 

Tras este máximo, las acciones de la firma británica comenzaron a descender ligeramente y a cierre de la sesión del 30 de octubre de 2024 cotizaban en los 330 peniques. No obstante, su precio sigue estando casi un 960% por encima del que marcaban antes de que fuera suspendida su cotización.

Primer aniversario

Un año después de anunciarse la operación, Vodafone España ha cambiado considerablemente. El mismo día que comunicó su acuerdo con el grupo de telecomunicaciones británico para hacerse con su filial en nuestro país, Eamonn O'Hare ofreció una rueda de prensa en la que ofreció los primeros detalles de los planes que tenía Zegona para Vodafone España.

Incluso se anunció el nombramiento de José Miguel García como futuro consejero delegado de la operadora. La cotizada británica volvía a confiar de nuevo en este veterano del sector español de las telecomunicaciones para reflotar el negocio de la operadora después de haber trabajado con él en Euskaltel. 

Los dueños de Avatel disuelven el consejo de administración de la matriz de la operadora en plena recta final de su venta

La operación se cerró a finales de mayo de 2024, ya que el Gobierno tardó algo más de lo previsto inicialmente en dar su visto bueno. El lunes 3 de junio García y su equipo, formado tanto por directivos de Vodafone como por fichajes externos, tomaron las riendas de la operadora. 

Y nada más llegar comenzaron a implementar la estrategia en la que habían estado trabajando mientras se cerraba la compra. En las primeras semanas, se revolucionó la oferta comercial de Vodafone España con medidas como una nueva cartera de tarifas o la decisión de hacer permanentes los descuentos de los que disfrutaban los clientes.

También comenzó a negociar acuerdos con sus rivales para la creación de empresas conjuntas de infraestructuras en busca de una mayor eficiencia en la gestión de la red y la puesta en valor de sus activos. Y se lanzó a por nuevos clientes mayoristas, como muestra el reciente acuerdo con PTV, que hasta entonces operaba en la red de Masorange. 

Pero también aplicaron medidas para ahorrar costes, incluido un Expediente de Regulación de Empleo (ERE) anunciado apenas dos semanas después de que Zegona se hiciera con el control de Vodafone España. Tras unas duras negociaciones, finalmente, la empresa alcanzó un acuerdo con los sindicatos para la salida de 898 empleados, un 75% de forma voluntaria.