Las posibilidades de que Iberia finalmente no compre Air Europa han crecido en los últimos meses debido a las duras condiciones de la Comisión Europea y a la mala situación de la aerolínea de Globalia, que hace que la compra no sea tan estratégica. Pero si la operación no llega a buen puerto, no es el final para la compañía aérea de la familia Hidalgo, ya que tiene tres opciones para sobrevivir.
“El sector está pesimista en cuanto a la venta de Air Europa y no parece que la compra vaya a producirse”, apunta el analista aéreo Miguel Sánchez, quien destaca como la primera opción para apuntalar su supervivencia seguir los pasos que llevó a cabo Norwegian para evitar su quiebra.
“Air Europa deberá llevar a cabo una importante reestructuración”, asegura. Esta implica poner en marcha una serie de ajustes, como recortar rutas poco eficientes, vender aviones y aplicar un expediente de regulación de empleo (ERE) sobre su plantilla, que en 2020 ascendía a 2.917 trabajadores (unos 1.200 menos que en 2019).
Esta reestructuración también será necesaria porque se calcula que su deuda ronda entre 600 y 800 millones de euros. Además, según fuentes cercanas a la operación, ya habría consumido el primer rescate otorgado por la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), por valor de 475 millones, y podría necesitar una segunda ayuda.
A esto hay que sumar que cerró su ejercicio 2020 con pérdidas de 428 millones de euros y tiene problemas para pagar a proveedores y devolver el dinero de los vuelos cancelados por la Covid.
Estamos hablando de una opción de supervivencia en solitario para Air Europa. Una alternativa complicada y por la que “la compañía lo va a pasar mal”, afirma el analista aéreo.
Entrada de terceros
De ahí que la segunda alternativa sea que “el Gobierno se quede en el accionariado de Air Europa hasta que la aerolínea remonte el vuelo”, señala. Una opción viable que aseguraría la continuidad de la aerolínea y, por tanto, también garantizaría al Estado la recuperación del rescate (aunque sea más allá de los siete años pactados).
La otra opción es la llegada de un inversor extranjero. El grupo Air France-KLM ya se interesó por Air Europa antes de que lo hiciera IAG, por lo que podría ser una opción en un momento de consolidación aérea. La alemana Lufthansa sería otra. “El problema es que, una vez que ha entrado capital público español en una aerolínea, es difícil que se venda a una compañía extranjera, pero podría pasar”, añade.
Cabe recordar que Air Europa cuenta con una de las flotas de aviones más modernas y una serie de slots -derechos de despegue y aterrizaje- muy golosos para cualquier aerolínea. Tanto que, de no fraguarse la compra, también se consideraría un duro golpe para Iberia y el plan de convertir Barajas en un gran hub capaz de competir con cualquier otro.
Además, IAG se enfrenta a una posible demanda por parte de la familia Hidalgo de 500 millones de euros por los daños causados, según publicó ‘El Confidencial’. Cantidad mucho más alta de los 40 millones de penalización establecidos en el último contrato de compraventa que se activarán en caso de no llevarse a cabo la compra.
Trabas en Bruselas
Lo cierto es que la operación está a expensas de Europa. Hace unas semanas, la compañía aérea de IAG presentó nuevas concesiones. Esto provocó que el plazo para que Bruselas apruebe o no la operación de compra se vuelve a extender hasta el 4 de enero. Cabe recordar que, en un inicio, pasó del 5 de noviembre al 3 de diciembre y ahora a principios del próximo año.
Esta nueva fecha se sale de los planes de Iberia, que esperaba cerrar la operación a finales de este año. La intención de compra se anunció en noviembre de 2019, hace justo dos años, y el impacto de la Covid ha rebajado el precio de compra de 1.000 millones a 500 millones. Y aquí tampoco es descartable que, en caso de cerrarse la compra, sea por un precio aún menor.
En esta ocasión, Bruselas no ha dado detalles de los compromisos ni concesiones de la aerolínea. Si bien es cierto que no es la primera vez que Iberia anuncia concesiones. Antes de verano, la Comisión impuso 70 remedies y la aerolínea firmó acuerdos con Volotea y World2Fly para la cesión de slots para evitar problemas de competencia en algunas rutas.
El nuevo escenario da menos de un mes a Bruselas para evaluar si las concesiones propuestas por IAG y Air Europa son viables para dar luz verde o no a la compra.
Una compra que en los últimos meses se ha complicado. La Autoridad de Competencia y Mercados (CMA) de Reino Unido -equivalente a la CNMC en España- ha anunciado que investigará el proceso de compra para determinar si hay problemas de competencia.
Y para ello se da de plazo hasta el 19 de enero para concluir su decisión tras la investigación inicial. Al parecer, la ruta Londres-Madrid, una de las más competitivas, es la que más problemas generaría.
Una serie de trabas que amenazan la operación de compra. Sin embargo, la familia Hidalgo tiene todavía opciones para salvar a Air Europa.
Noticias relacionadas
O gestiona tu suscripción con Google
¿Qué incluye tu suscripción?
- +Acceso limitado a todo el contenido
- +Navega sin publicidad intrusiva
- +La Primera del Domingo
- +Newsletters informativas
- +Revistas Spain media
- +Zona Ñ
- +La Edición
- +Eventos