Los directores de los medios catalanes han vuelto a rechazar este miércoles la intervención del gobierno del Partido Popular y han reivindicado su independencia informativa. En una rueda de prensa que se emitió por streaming “para todo el mundo” comparecieron Vicent Sanchis, director de TV3, Saül Gordillo, director de Catalunya Ràdio, y Marc Colomer, director de la ACN.
En un comunicado conjunto leído por diferentes trabajadores en catalán, español, vasco, gallego, inglés, francés y alemán se calificó la intervención del Estado como un "ataque directo a la ciudadanía, que vulnera su derecho a recibir información plural y equilibrada".
Indicaron además que el control gubernamental secuestra la libertad de prensa y dinamita los principios fundamentales de la Unión Europea. Reivindicaron además su historia como líderes de audiencia como "referentes de información plural y de entretenimiento de calidad".
El Parlament es la única autoridad vigente
Durante la rueda de prensa también recordaron las resoluciones de las asambleas de trabajadores que no reconocen ninguna autoridad nombrada en Madrid y que insisten en que el Parlament es la única autoridad vigente. Respecto de eventuales medidas para rechazar esta intervención indicaron que esperan que Moncloa mueva ficha, aunque "será una decisión personal" de cada trabajador, indicaron.
Una plantilla que es en estos momentos la mejor pagada de las televisiones autonómicas. La Corporación Catalana de Medios Audiovisuales (CCMA), que incluye a TV3, Catalunya Ràdio y sus medios digitales, cerró el año 2016 con una plantilla de 2.312 trabajadores, que, según las cuentas remitidas al Registro Mercantil suponen un gasto en plantilla de 159 millones de euros.
Más trabajadores que Atresmedia y Mediaset
Considerando que hay importantes diferencias entre salarios directivos y de trabajadores, esto significa que la media de salario anual de cada trabajador del CCMA es de 68.771 euros, solo superada por las dos televisiones privadas Atresmedia y Mediaset y encima de Radio Televisión Española (RTVE) y de las autonómicas de mayor tamaño.
RTVE tiene unos gastos de plantilla mucho más elevados de 386,9 millones, según sus presupuestos de 2016, pero también una plantilla que supera ampliamente a TV3, con 6.300 personas. Esto rebaja la media salarial a los 61.412 euros, siete mil euros menos que la televisión pública catalana.
Canal Sur es la segunda cadena autonómica con mayor gasto en plantilla con 85,2 millones de euros y un equipo de 1.257 personas, según los últimos presupuestos Radio Televisión Andalucía (RTVA). Esto se traduce en una media salarial de 67.780 euros.
Por encima de ETB, Canal Sur y TVG
Por su parte, la cadena pública vasca ETB mantiene unos gastos de 60,1 millones y 975 trabajadores, con una media de 61.640 euros. Finalmente TVG tiene un gasto de 37,5 millones en personal para 824 trabajadores, lo que se traduce en un salario medio de 45.509 euros.
En las televisiones privadas esta media crece de manera importante. En el caso de Atresmedia sus 1.800 trabajadores significaron un gasto de 131,1 millones de euros en personal, dejando la media salarial en 72.833 euros. Mediaset tiene 1.275 empleados con un coste de 105,8 millones y una media de 82.980 euros por trabajador.
Conviene señalar que las dos cadenas privadas mantienen costes inferiores de plantilla y tienen mucho menos trabajadores que TV3. Todo ello con una facturación por publicidad quince veces superior a los 61 millones que ingresa la pública catalana y que cubre solo una quinta parte de sus costes totales.
Rechazo frontal de la plantilla a la intervención de TV3
La asamblea de trabajadores de TV3 del lunes rechazó frontalmente la intervención del gobierno central en la cadena autonómica, amparada en el artículo 155. Moncloa indicó que su objetivo era “garantizar la transmisión de una información veraz, objetiva y equilibrada, respetuosa con el pluralismo político, social y cultural” y deslizó la posibilidad de nombrar nuevos cargos y controlar las cuentas de la televisión.
En un manifiesto aprobado por la mayoría de sus trabajadores, la plantilla indicó que solamente reconocen como autoridad al Parlament “los únicos que los trabajadores reconocemos como responsables de cumplir con el servicio público que tenemos encomendado". Respecto del nombramiento de nuevos directivos han dicho que "si esto ocurriera no tendremos más remedio que no reconocer su autoridad".