El Ministerio de Consumo que dirige Alberto Garzón, está ultimando en un real decreto que limitará la publicidad del juego de azar y las apuestas online de ámbito estatal a la franja horaria de la madrugada de radios y televisiones, entre las 1:00 y las 5:00 horas.
La medida adelantada este miércoles por varios medios se incluirá dentro de paquete de medidas para controlar el juego en nuestro país. Este jueves se iniciará además una ronda de contactos con todos los agentes sociales para lograr el mayor consenso en la nueva regulación.
No obstante, fuentes del sector de los medios indican a EL ESPAÑOL que una medida de estas características podría ser muy dañina para el sector, en plena desaceleración del mercado publicitario.
Estas mismas fuentes indican que este veto afecta a prácticamente toda la publicidad del juego que se emite en horario de máxima audiencia y en el caso de la radio en todos los carruseles deportivos y en los programas deportivos nocturnos de noche.
Limitar esta publicidad exclusivamente a la franja de la una a las cinco de la mañana sería no solo condenarla al ostracismo, sino que se traduciría en que prácticamente se acaben este tipo de anuncios en radio y televisión.
Impacto real
Los pocos spots y cuñas que se emiten en estas franjas sugeridas lo hacen a un precio mínimo, ya que prácticamente no tienen audiencia. ¿Cuál sería el impacto? Los datos del año 2018 -el último año cerrado- indican que el sector de juego y apuestas invirtió 130,2 millones en medios de comunicación, según Infoadex.
Si tomamos como referencia los datos de la Dirección Nacional de la Ordenación del Juego tenemos que la inversión solo en publicidad del juego online fue de 170,3 millones en 2018, a lo que hay que sumar otros 143,7 millones si se incluyen patrocinios.
En los primeros nueve meses del año pasado -últimos datos disponibles- el sector se gastó 123,7 millones de euros en medios de comunicación, un crecimiento del 4% respecto de los primeros nueve meses de 2018.
Las fuentes consultadas indican que con una medida que restrinja la publicidad solo a la franja de madrugada el impacto en los medios de comunicación (radio y televisión) podría ser de al menos 150 millones al año. Es decir, publicidad que dejarían de emitir en los horarios que lo hacen actualmente.