Ana Rosa Quintana ha vivido un verano vertiginoso, quizás mucho más complejo de lo que se ha visto reflejado en las páginas de papel couché. La propia presentadora declaraba a Hola que su periodo estival no había tenido sobresaltos: "Ha sido un verano muy tranquilito, en casa con la familia".

Un balance publicado horas antes de que este lunes 7 de septiembre volviese a ponerse al frente de El Programa de AR -su casa desde hace 16 años- pero que no fue totalmente fiel a la realidad. Y es que entre junio y julio protagonizó dos hechos cruciales para su futuro, dos acontecimientos desconocidos para el gran público.

En medio de sus vacaciones la popular presentadora renovó su contrato con Mediaset, firmando un compromiso de "larga duración" y entró en el capital de la productora Unicorn, la que realiza su programa y de la que ha pasado a ser socia mayoritaria. Unos movimientos que despejan su futuro profesional en el mediano plazo, pero que a la vez agregan cierta incertidumbre a su portfolio de negocios.

Dos acontecimientos que la reflejan de cuerpo entero y que dejan a la luz una de sus grandes características: sus ganas de emprender y su apoyo a la industria audiovisual española, todo ello en medio de las incertidumbres generadas por el coronavirus y las malas perspectivas inmediatas para el sector. 

Con un patrimonio de al menos diez millones de euros, con 64 años cumplidos, una renovación bajo el brazo y un share diario del 20%, pocos se habrían embarcado en una nueva aventura empresarial. Pero ella lo ha hecho.

Entrada en Unicorn

En el caso de su renovación, las fuentes consultadas por Invertia indican que habría sido por al menos tres años y con un máximo de cinco, dependiendo de la evolución de la relación de la presentadora con la cadena de Paolo Vasile, con lo que completaría al menos veinte años al mando de las mañanas de Telecinco.

Respecto de las cifras, en varios sitios se han publicado montantes que hablan desde cuatro a seis millones de euros. "Ninguna cifra ha acertado", dicen fuentes del sector que se remiten a la cláusula de confidencialidad firmada entre Ana Rosa y Mediaset. Una cláusula millonaria que nadie quiere romper.

El cualquier caso, desde su entorno se asegura que lo importante es que Quintana seguirá al frente del espacio y que se ha llegado a un acuerdo favorable para las dos partes, asumiendo el impacto de la crisis económica generada por el coronavirus en el futuro de la televisión.

Una renovación que se ha producido casi al mismo momento que tomaba la decisión de volver a invertir en el mundo audiovisual. En julio se conocía que entraba en el capital de  Unicorn Content como socia mayoritaria, de la que Mediaset tiene el 30%. Lo hacía a través de su empresa OTELUM, S.L.

La productora fue fundada por Xelo Montesinos -la histórica directora de El Programa de AR- a finales de 2017 y en 2018 sustituyeron a Cuarzo en la producción del espacio. La propia Ana Rosa había abandonado a mediados de 2017 el capital de la productora que fundó y tras el fin del periodo de no competencia, decidió embarcarse en la nueva aventura. 

Inversiones patrimoniales

Ana Rosa apuesta por una empresa pujante, en crecimiento y que ha logrado hacer un hueco en el panorama nacional en solo tres años. Unicorn Content facturó 22,6 millones de euros en 2019 y ganó 2,6 millones de euros, un buen ejemplo de su buena salud financiera.

Ello gracias a que es la segunda productora con más horas en directo de la televisión española con espacios como 'El programa de AR', 'Ya es mediodía', 'Cuatro al día', 'En el punto de mira', '120 Minutos' y 'Mujeres al poder'.

"Olfato financiero no le falta", dicen quienes la conocen. De hecho, Ana Rosa Quintana lo ha ganado todo, económica y profesionalmente y en buena medida gracias a que ha sabido conjugar su éxito en la pequeña pantalla con la gestión de sus empresas.

En 2000 fundó Cuarzo y en 2009 vendió el 51% -junto a sus otros tres socios- a Banijay. Se estima que por esta operación obtuvo unos 18 millones, a los que sumaron otros tres millones en 2019 cuando se cerró su salida definitiva.

En otra decisión importante para su futuro económico, en marzo de 2018 decidió cerrar su sicav y convertirla en sociedad limitada. De esta manera, Argomaniz Inversiones tiene en estos momentos un patrimonio de diez millones de euros, según sus cuentas de 2018. Es la hucha de Ana Rosa, donde tiene su mayor activo patrimonial.

Prescriptora televisiva

Y es que Ana Rosa tiene dos caras. La primera, y más conocida, es la de una presentadora de éxito que lleva más de una década siendo líder de audiencias de las mañanas televisivas. Una periodista que día a día se levanta a las seis para ponerse al frente de su propio espacio, uno de los más reconocibles de la televisión española.

Pero tiene una cara desconocida para el gran público, la de una empresaria con un gran olfato para los negocios, con un patrimonio considerable, un puñado de sociedades e inversiones en diferentes negocios incluso más allá del mundo de la televisión. 

Pero nada de este éxito económico hubiese posible sin su éxito profesional. Para valorar este impacto, solo un detalle. Esta semana ha vuelto a su programa después de las vacaciones, marcando un 20% de share y retomando el liderazgo desde el primer día. Ni la entrevista del Presidente de Gobierno del lunes en las nuevas mañanas de La 1 pudo hacerle sombra. Sánchez solo obtuvo un 7% de share y Ana Rosa se acercó al 20%.

Una muestra del valor de Ana Rosa como figura televisiva y prescriptora de las marcas. Las fuentes consultadas por este diario indican que el coste de los anuncios que se emiten en su programa, es el más alto después del prime time de la cadena. Es decir, que la segunda mayor recaudación publicitaria de Telecinco se genera con Quintana.

Esto la convierte en quizás la mayor prescriptora de la televisión. Es una de las figuras con mayor tirón entre los españoles, por lo que 20 segundos en su programa, pueden costar "varios cientos de miles de euros". La rentabilidad de Ana Rosa está asegurada y su futuro en el mediano plazo, también.