La industria audiovisual ha atravesado con la pandemia uno de sus momentos más críticos. Y a uno de los nombres más reconocidos de la industria en la bolsa española le ha pillado en pleno despliegue de su plan estratégico. Vértice 360º ha tenido que lidiar con este panorama en plena reconversión.
De esta hoja de ruta, de sus objetivos más inmediatos y del próximo cambio de denominación a Squirrel Media habla su presidente y consejero delegado, Pablo Pereiro Lage. Cinco años después de su desembarco en una compañía agonizante, el empresario conversa con Invertia sobre la transformación del sector, los ataques de inversores bajistas o la eterna cuestión del dividendo.
Todo ello con su plan hasta 2023 como columna vertebral. Una guía que contempla un beneficio neto de 52,7 millones de euros al final del recorrido, lo que supondría un salto del 1.623% frente a su resultado de 2020. El salto en el Ebitda se prevé de 11 veces, hasta los 58,2 millones de euros.
- El tiempo va avanzando para el plan estratégico de Vértice 360º, ¿cuáles son los hitos más inmediatos a los que se enfrenta?
En primer lugar, me gustaría remarcar que es un plan conservador, ya que no recoge la parte de crecimiento a futuro de ninguna de las operaciones inorgánicas que tenemos pensado realizar. Solamente recoge los crecimientos orgánicos y recurrentes con los que cuenta la compañía con su estructura actual.
En la parte de contenidos estamos ampliando mucho en derechos. Cuando entramos en Vértice 360º, todo el ámbito de productoras y distribuidoras era por y para España y ya distribuimos en todo el ámbito del mundo hispano, los mercados italoparlantes y los de habla portuguesa... casi una treintena de países. Y eso hace que el ámbito de crecimiento sea exponencial, porque de estar solo en el mercado doméstico -que demográficamente es pequeño-, vamos a los llamados países-continente.
Por la parte de servicios técnicos y tecnológicos, apuntamos mucho más allá de lo que es la cobertura de servicios audiovisuales. Apuntamos más a lo que es una teleco que una compañía tradicional de este segmento.
En televisión es necesaria una reorganización que debe pasar por una concentración
El impacto de crecimiento es una cuestión matemática tras el trabajo de inversión realizado en los últimos años. El desarrollo de todo lo que ya hemos invertido e integrado hace que haya un crecimiento recurrente.
- En cualquier caso, ¿se puede hablar de un plan conservador cuando prevé multiplicar beneficios por 17 o el Ebitda por 11 veces?
Creo que una de las dificultades actuales de Vértice 360º es que no cuenta con comparables, porque al final hemos conseguido un año 2020 pandémico en el que hemos ejecutado importantes operaciones de integración que harán que los números de 2021 no sean equivalentes. Ese es el primer salto importante, por eso la comparativa desdibuja la realidad.
Si uno se queda en el dato frío parece un crecimiento exponencial, pero -además de la comparativa entre ejercicios que no son homogéneos- ahora empiezan a llegar los frutos de todo aquello en lo que ya se venía invirtiendo años atrás. Las inversiones del 2019 se verán en el balance de 2021 y así sucesivamente. Cuando en cine se inicia un proyecto, dos años después llega el estreno, que para nosotros es la salida, no la meta. A partir de ahí comienza un periodo de unos 20 o 25 años de retorno.
En otras palabras, llevamos tres años de inversión importante que van a ver los frutos ahora. Cuando entré con Squirrel Capital en 2016 hubo que salir del concurso, luego reestructurar, reorganizar y recapitalizar... el desarrollo, aunque empezó en 2017, llegó un año después. Los focos comienzan a reflejar ahora lo que venimos haciendo desde hace años y eso es lo que hace que este y los más inmediatos puedan parecer unos ejercicios fantásticos.
- Ha mencionado que, aunque no se recogen en el plan, sí que hay operaciones de compra de empresas sobre la mesa. ¿Hacia dónde apuntan aquí?
Creo que ya somos la compañía más activa en el sector de los medios a nivel español. En la parte de televisión en abierto, las inversiones son prácticamente nulas, por lo que somos sin duda el jugador más activo. Lo mismo en la ventana de pago, en la que este año hemos sacado tres canales temáticos con Movistar. Así componemos una oferta que actualmente solo es igualable a las tres grandes majors.
Vamos a seguir creciendo en la parte de medios de manera importante. Tenemos que fortalecer más si cabe nuestra presencia y ser un referente. En particular, en televisión es necesaria y perceptiva una reorganización del sector que, desde mi punto de vista, debe pasar por una concentración. Nosotros nos postulamos en esa tarea de forma activa en todas sus ventanas, tanto en las ideas como en las inversiones.
Hay compañeros directivos que hablan mucho de Ebitda, pero no de beneficios porque son pérdidas
Lo mismo se puede aplicar a la parte de radio, donde también hay una gran dispersión a excepción de los dos o tres primeros jugadores.
En la parte de exteriores, hay una gestión muy anclada al pasado. Aquí irrumpimos como una idea de mucho más futuro que presente que fusiona la parte de contenido con la de tecnología, como en exteriores digitales, en la que recientemente hemos cerrado un acuerdo estratégico internacional con Telefónica. Esto demuestra que el plan no trata de que las unidades de negocio se peleen o se canibalicen entre ellas, sino de que se integren, que sean sinérgicas. Utilizamos big data, business inteligence y otras herramientas para abandonar soportes fijos y estáticos y ayudar a captar la atención y facilitar la interactuación con los clientes, porque la publicidad también es contenido.
- Esto último recuerda a escenas de 'Minority Report' y otros títulos de ciencia-ficción. ¿Estamos más cerca de la publicidad totalmente personalizada?
Actualmente, más que limitaciones técnicas y tecnológicas, tenemos limitaciones normativas. Con el desarrollo de las campañas a futuro podemos saber mucho sobre quiénes reciben la campaña… son infinitos los datos que podemos identificar sin invadir la privacidad. Eso ya permite desarrollos de tecnología muy avanzada para generar adaptaciones de las fórmulas y los contenidos en función de adónde quieren llegar y de qué manera.
Algo que hace pocos lustros era ciencia-ficción, ahora es una realidad. No creo para nada en las estrategias sustitutivas, sino en una evolución, en las sinergias y en la complementariedad. En nuestro catálogo tenemos la serie 'StartUp' que habla de la historia de las criptomonedas... ¡y hace unos años no eran ni ficción!
- ¿Hay margen para el crecimiento en un sector dominado por gigantes?
Vamos evolucionando de una manera mucho más rápida de lo que se podía predecir. Los grandes grupos de comunicación tienen unas grandes inversiones que están pendientes de amortización, por eso los que han nacido o se han mimetizado con estos cambios, como puede ser el caso de EL ESPAÑOL, tienen ventaja.
Creo que el nuevo nombre que en breve adoptaremos, Squirrel Media, nos identifica muy bien en este sentido: una ardilla en un mundo de elefantes. Hemos irrumpido y crecido en un sector francamente cerrado, con gigantes muy pesados, tradicionales y que tienen un ámbito institucional, político y económico muy arraigado. Ahí llegamos como un animal que coexiste, que es mucho más ágil y rápido y que no se alimenta necesariamente de lo mismo que los elefantes.
Nunca he cobrado los bonus aún teniendo el derecho al doble del salario que he percibido
- ¿Esto también se aplica a la televisión digital terrestre (TDT), dominada por Atresmedia y Mediaset?
Creo que sí hay espacio para más de dos competidores o grandes grupos. La modalidad de negocio que tenemos es de estrategia de major, es decir, la TDT no deja de ser una ventana de distribución de productos propios y eso es radicalmente diferente a las estrategias de esos elefantes. Nosotros no tenemos esa modalidad de negocio televisivo tradicional que a fecha de hoy funciona.
En TDT tenemos BOM Cine, que es un canal de cine en abierto, pero con mentalidad de televisión de pago. Sin embargo, para Vértice 360º es una ventana más de distribución, una optimización más de algo ya óptimo, es sumar ingresos a algo cuya amortización ya está distribuida entre otras ventanas.
Tenemos la autonomía de los ingresos, la estrategia vencedora de la majors de que la televisión no sea tu principal canal de distribución y tenemos el cerebro tecnológico y técnico que forman parte de la compañía. Con todo eso, el producto final de Vértice 360º se parece como un huevo a una castaña a lo que son Atresmedia y Mediaset.
- Durante el azote más duro de la pandemia, el negocio de la TDT ha ido bien. ¿Qué tal el resto de unidades?
En la pandemia hemos sufrido como cualquier compañía. El primer trimestre del año lo llevamos bastante bien, pero en abril sufrimos bastante, sobre todo en la parte publicitaria, porque con el confinamiento hubo un pánico que cortó las campañas de publicidad, algo que es habitual y natural en momentos de crisis. No obstante, después también ha sido la que más rápido se ha recuperado.
En las otras partes de negocio, aunque cae la parte de directos, el soporte a los grandes medios se mantiene. Al final, con todo el mundo en casa, ha crecido el consumo y se ha tirado de la parte de contenidos enlatados, en la que Vértice tiene un gran catálogo.
El mayor impacto ha venido por la paralización del cine. De hecho, tenemos recuperadas todas las líneas de negocio menos la de estreno. Sin embargo, acaba de reactivarse con 'Poliamor para principiantes', que se exhibió por primera vez el 21 de mayo. Además, el 16 de junio tenemos previsto el estreno mundial de 'El Otro Guardaespaldas 2', que espero que sea el gran estreno de 2021 junto con 'Fast and Furious 9'. Aunque quizá será un estreno no a todo lo grande, será una apuesta importante por activar el sector y tenemos de nuestra parte a los distribuidores y el resto de partners.
-Durante la pandemia también han cogido fuerza otras fórmulas de consumo audiovisual, como las redes sociales o nuevas plataformas, como Twitch. ¿Considera que podrían ser una amenaza?
Considero que no es sustitutivo. Cualquiera de estas fórmulas, por ámbito creativo, público objetivo o modalidad hace que estemos ante ventanas diferentes. No deja de ser una expresión que garantiza y da mayor influencia a lo que estamos haciendo. Me explico: los que usan estas herramientas son productores, guionistas, directores, distribuidores en un ámbito amateur o aspiracional, así que no dejan de ser nuevas piscifactorías de talento que seguramente acaben en la radio, la televisión, el cine…
No quiero pasar esa línea sutil en la que están muchas compañías de tener accionistas pagados
En realidad, no lo veo un ámbito competidor o sustitutivo, veo un ámbito complementario que coexistirá. Yo no soy un amante de la ventana por la ventana, porque el contenido tiene que ser de calidad. Hace menos de diez años, las concesiones de TDT eran activos no susceptibles de valoración, eran superestratégicos... de repente prácticamente se regalan.
Este es un momento muy complejo para nosotros, pero de oportunidad. A nivel de análisis técnico y financiero, solo hay un camino: crecer. Y, a su vez, los grandes solo tienen un camino: decrecer. Hace una década Telefónica solo tenía que perder y MásMóvil solo tenía que ganar. Valiendo esta analogía, espero que Vértice 360º sea un MásMóvil de la industria audiovisual.
En los próximos años veremos cuál es el techo para Vértice si es que lo hay. De momento, ya sabemos que a diferencia de otros grupos, cuyo techo es España, nosotros ya trabajamos en 90 países.
- Con este potencial al que aspiran, ¿cómo definiría al Vértice 360º de hoy frente al que encontró a su llegada?
Cuando llegué a Vértice 360º, la frase que me decía toda la gente que me quiere y aprecia era: "¡Qué necesidad tienes de enterrar al muerto!". Y esas eran las mejores palabras que me decían, preocupados por la inversión que habíamos realizado con la compra del 44% de la participación de manos de Ezentis. En 2016, no creían que la compañía estaba enferma, ni en la UCI, ni a punto de morir, sino que todos la daban ya por muerta.
Hoy definiría a Vértice como uno de los proyectos audiovisuales transversales más prometedores e ilusionantes a nivel global. Una compañía que estaba muerta y defenestrada a la que se iba a enterrar más que dar vida, ahora presenta unos datos de crecimiento inexistentes en el resto del sector. Ya es un proyecto con cara y ojos, pero necesita demostrar que es y puede ser una de las grandes realidades internacionales. Y lo será en 2023.
-¿Cómo ve a la compañía que preside para entonces?
Nosotros trabajamos hoy para dentro de dos años. Este año, después de tres ejercicios de gestión -porque el primero fue más de tareas administrativas-, tendremos más de 100 millones de ingresos con una ratio de transformación en beneficios que tienen que superar el 20%. Y en 2023 hay que superar los 200 millones de euros.
Para conseguir eso, no todo es bueno para la cazuela, porque en el negocio publicitario muchas veces los proyectos se quedan en márgenes del 2% o 3%. Tampoco nos interesa la integración de cualquier cosa, sino mantener nuestras ratios. Hay compañeros directivos que hablan mucho de Ebitda, pero no de beneficios porque en verdad son pérdidas. Yo creo que hay que buscar el rendimiento en la última línea del balance.
- Si se cumplen estas previsiones, ¿habrá bonus para el consejo?
El consejo de administración actual se bajó sus retribuciones al entrar. En 2017, 2018 y 2019 se cumplieron las previsiones de beneficio, aunque no en volúmenes de negocio. En mi caso, nunca he cobrado los bonus aún teniendo el derecho al doble del salario que he percibido como consejero delegado y presidente en nombre de Squirrel Capital.
Eso se explica porque mi interés no es cobrar un bonus, sino que la compañía vaya bien y retribuya por su comportamiento en bolsa y, llegado el momento, en dividendos, porque Squirrel Capital es titular de un 94% de la compañía. El resto de accionistas sabe que lo que le preocupa y ocupa a Pablo Pereiro Lage es que la compañía pueda llegar a valer 20 veces más. Si te implicas en ello, es muy difícil que tengas vagos en tu estructura.
En 2016, no creían que la compañía estaba enferma, ni en la UCI, sino que todos la daban ya por muerta
Ahora procuro tener un salario ajustado para lo que es el Mercado Continuo, ya vendrán otros momentos. Necesitamos dar la consistencia de que lo que decimos lo cumplimos después de haber resucitado al muerto. Y eso en medio de un 2021 que todavía sigue afectado por la pandemia.
- Ha mencionado al resto de accionistas. Dado su escaso peso, ¿podría plantearse un escenario de exclusión de bolsa?
No, no tiene ningún sentido que Squirrel Capital haya hecho una operación tan relevante de concentración en lo que hoy es Vértice 360 para proceder después a una exclusión. Lo que ocurre es que en 2020 hubo un momento pandémico en el que el grupo ha sufrido ataques bajistas para intentar tomar posiciones a la mitad de precio y Squirrel Capital ha salido en defensa de la compañía. Por eso, conforme a las reglas de mercado se han comunicado esas operaciones.
Lo que se ha hecho es ir en defensa de la compañía y de su patrimonio, que es el de todos los accionistas. Ha sido una defensa feroz, contra todos, a capa y espada y facilitando que los accionistas que se quisieran ir tuvieran liquidez. Y todo eso se hace porque creemos firmemente en el proyecto.
En breve, esta situación coyuntural que ha elevado el porcentaje de peso de Squirrel Capital se irá diluyendo. Como presidente, consejero delegado y accionista me gustaría que Vértice 360º entre en el Ibex Small Cap en diciembre de este año. Creo sinceramente que en fundamentales, en liquidez y en todos los demás parámetros cumplimos todos los requisitos, pero no alcanzamos el 15% de free-float computable. Ese es el mínimo al que aspiro, porque la inclusión sería un salto cuantitativo y cualitativo.
El producto final de Vértice 360º se parece como un huevo a una castaña a Atresmedia y Mediaset
- Antes ha hecho mención al dividendo. ¿Se plantean avanzar en esta línea?
El mayor pago a los accionistas es la revalorización de los inversores mediante el incremento de valor de la compañía. Creo que ahí es donde estamos. Si algo solo puede crecer, la inversión en ello va a merecer la pena. Después, habrá que introducir el dividendo, pero no lo veo a corto plazo.
En primer lugar, porque me parece grosero repartir el beneficio y quedarme con un 90%. Me parece una descapitalización frente a los esfuerzos por hacer que la compañía sea mejor. Así que no voy a vaciar la caja de la compañía aunque los demás accionistas también se beneficiaran.
Segundo, porque creo que es una aportación adicional a la revalorización de la compañía. Sin embargo, tengo muy claro que no quiero pasar esa línea sutil en la que, desde mi punto de vista, están muchas compañías de tener accionistas pagados. No quiero levantarme todos los días pensando que los inversores están porque pago un 8%, ya que un día sale mal y se van y la cotización se desploma.
En resumen, dividendos sí, pero el día que aparezcamos en el top cinco del sector. Más vale medio dedo adelante cada trimestre que siete metros hacia delante y luego 14 hacia atrás. Y ya llevamos 16 trimestres consecutivos de crecimiento.
- En toda la reestructuración de la compañía está pendiente el cambio de nombre, ¿cuándo llegará?
En España, dependiendo con quien hables, Vértice 360º tiene unas connotaciones u otras, aunque siempre ha sido reconocida y conocida positivamente como productora. Ahora, le cambiamos de denominación a Squirrel Media porque creemos que es mucho más de lo que era Vértice. Mantener la denominación sería volver a encajonarnos en productora y distribuidora española.
Además, hay que dar la idea internacional, no somos ya de España para España. En 2023 no creo que el mercado doméstico ocupe ni un 20% de nuestros ingresos, porque nuestra expansión es hacia afuera.
Queremos dar el salto al mundo anglosajón para convertirnos en una ardilla muy grande. No obstante, el nombre quedará como marca seguramente en la parte de contenido en España y quizá en los más de 20 países de Latinoamérica que ya están acostumbrados a ella.
Ahora, estamos pendientes de inscripción registral, que la calculo para dentro de unas semanas. El código de negociación en bolsa llegará de forma automática. Gracias al cambio normativo, decidimos no presentar las cuentas del primer trimestre para presentar ya al cierre del semestre como Squirrel Media el próximo 7 de septiembre.