Un tercer gobierno socialista, a punto de conceder una tercera licencia de televisión a Prisa
El Ejecutivo quiere que la TDT se adapte a la tecnología UHD antes de acabar el año y es posible que exista espacio para una nueva concesión televisiva.
19 julio, 2024 02:24El Grupo Prisa acelera los trabajos para poner en marcha una nueva televisión. Lo hace al son de los tambores que suenan en el sector y que hablan de que el Gobierno podría sacar a concurso un nuevo canal en los próximos meses.
Un hecho que al equipo de Joseph Oughourlian, presidente del grupo de medios, le vendría al pelo. En sus planes está el disponer de una cadena que le permita competir con los grandes grupos de comunicación también en el campo audiovisual. Sin embargo, por ahora, no ha podido ejecutarlos.
Aunque todavía es pronto para saber qué ocurrirá, de consumarse y ganar el proceso Prisa obtendría su tercera licencia de televisión en los últimos 35 años. Todas ellas de la mano de un gobierno socialista. Y supondría el tercer intento de la editora de El País y la SER por convertirse en un operador televisivo tras la experiencia de Canal + y la fallida de Cuatro.
Ahora bien, para que el Gobierno se plantee lanzar un concurso antes necesita culminar el Plan de Evolución Tecnológica de la TDT. Una planificación que se presentará el próximo martes al sector y que conlleva su actualización para emitir en Ultra Alta Definición (UHD). Algo que, por ahora, sólo hace Radio Televisión Española.
Un proceso que se espera esté terminado de aquí a final de año y que no obligará a reantenizar a los ciudadanos pero que sí hará necesario resintonizar las televisiones con las nuevas frecuencias de los canales. No vamos a entrar en términos técnicos, pero al concluir todo ese proceso de actualización debería quedar espacio libre para crear un nuevo canal de televisión.
Ahí es donde el Ministerio de Transformación Digital ya ha trasladado a los actores implicados que, de confirmarse, se estudiaría la posibilidad de sacar a concurso dicho canal a lo largo del año que viene. Ahora bien, no hay nada confirmado por parte del Gobierno sobre este asunto.
En el sector se da por descontado que, si existe la posibilidad, la frecuencia disponible saldrá a concurso a primeros del 2025. ¿El destinatario? Todo aquel que quiera presentarse, aunque se da por hecho que Prisa será el adjudicatario final.
Sobre todo si se tiene en cuenta que el Ejecutivo sostiene que “hay una absoluta desproporción de medios conservadores”, tal como le dijo a Carlos Alsina el pasado junio de 2023 el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
Las fuentes consultadas por EL ESPAÑOL-Invertia creen que es plausible pensar que el Gobierno podría plantearse la posibilidad de intentar buscar espectro para dos canales de televisión. ¿El objetivo? Evitar el malestar del sector televisivo y mediático porque consideran que existe bastante interés de distintos grupos por obtener licencias de televisión.
Prisas del Gobierno
Por ahora, la única certeza, es que el Gobierno quiere que las televisiones en TDT pasen a emitir en UHD, algo que confirma el Ejecutivo y que -recuerda- es obligado hacer, pues la normativa exige incorporar la última tecnología en cuanto esté disponible.
Ahora bien, fuentes del sector ven “inauditas” las prisas que le han entrado al Gobierno, cuando hay tiempo hasta 2030 para llevar a cabo todo el proceso de incorporación del Ultra HD con todo su potencial.
Unos cambios que fueron adelantados por El Confidencial este jueves. En Prisa eluden hacer comentarios sobre este asunto y sobre la posibilidad de que puedan lanzar una televisión en abierto. Fuentes conocedoras, en cambio, explican que el proyecto televisivo es una opción en estudio y no niegan que, de haber un concurso, se plantea una “gran oportunidad” para llevar a cabo sus planes.
En el sector es vox populi que Prisa ha estado hablando con varios grupos televisivos para intentar alquilar o comprar una frecuencia disponible. Algo que supondría el desembolso de dos millones de euros anuales para un alquiler o de unos 12-15 millones para una compra.
Cifras inasumibles para el presidente de Prisa, Joseph Oughourlian, cuyo objetivo ahora es cuadrar las cuentas del grupo de medios. Por tanto, un concurso supone una oportunidad. De salir vencedores estarían incorporando un activo que -si fallara su televisión- se podría vender o alquilar.
Como ha contado este periódico, el proyecto televisivo está en fase de estudio y es liderado por el director de Contenidos, José Miguel Contreras, y el director del área de vídeo de Prisa Media, Fran Llorente. El objetivo sería crear una televisión eminentemente informativa aprovechando la marca y la fuerza informativa de El País al estilo de lo que hace CNews en Francia.
CNews, propiedad de Vincent Bolloré, es una cadena de información 24 horas que apoya a la ultraderecha. Es uno de los principales apoyos del ultraderechista Eric Zemmour, que incluso fue presentador estrella de la cadena televisiva. Ahora bien, en este caso, el giro ideológico de la cadena de Prisa no sería la ultraderecha sino la izquierda. ¿Objetivo? Enfrentarse al universo catódico de la derecha y la ultraderecha en España.
Por ahora todo está en barbecho, pero en el interior de Prisa -y sobre todo de El País- se da por descontado que el proyecto saldrá adelante. Por tanto, todo es cuestión de tiempo. Más si se abre la puerta a que el Gobierno de coalición progresista le otorgue una licencia televisiva. La tercera que obtendría Prisa desde 1989, y todas ellas de la mano del Partido Socialista.
La primera aventura televisiva de Prisa llegaba aquel año por empeño de su fundador y presidente, Jesús de Polanco. El Gobierno de Felipe González estaba inmerso en la puesta en marcha de las televisiones privadas.
Las privadas
Sobre la mesa, y tras meses de discusiones, había ofertas para crear Tele 5, con Silvio Berlusconi y Miguel Durán, presidente de la ONCE, a la cabeza, y Antena 3 con el Conde de Godó junto a periódicos regionales, varias empresas españolas y Rothschild y Univisión, que iba de la mano de Zeta, Jacques Hachuel y Rupert Murdoch, entre otros.
Prisa parecía que iba a quedarse fuera, pues no estaba dispuesta a ir en consorcio con otros socios. Sin embargo, finalmente, Polanco dio la sorpresa y presentó una oferta para una televisión denominada Canal + en la que iba de la mano de Canal + Francia.
Semanas más tarde, y por sorpresa, el 25 de agosto de 1989 se concedieron licencias a Antena 3, Tele 5 y Canal + con autorización para convertirse en una televisión de pago. Algo que no estaba previsto en un primer momento en los pliegos de licitación. Daba así el Gobierno la razón a Polanco, de quien cuentan quienes estaban en aquella época por la casa, que dijo que “no hay cojones a dejarme sin televisión”.
Canal + fue la bandera televisiva de Prisa a partir de 1990 cuando arrancó sus emisiones terrestres. Siete años más tarde las compaginaría con las de satélite, cuando Prisa -a través de Sogecable- fundó Canal Satélite Digital en donde Canal + llegó a tener también otras dos versiones: azul y rojo, que conformaban el paquete prémium.
La aventura local
Mientras Canal + con su doble emisión estaba en pleno apogeo, Prisa decidió lanzarse también a ocupar el espectro televisivo local. Lo hizo a través de Localia TV, una red de emisoras fundada en 1999. Cerró una década después ahogada por las deudas asumidas por las elevadas inversiones para adquirir licencias de TDT en las distintas regiones y ciudades donde emitía.
Canal Satélite Digital no acababa de despegar. Tras la creación de Vía Digital por Telefónica, ambas plataformas de satélite acabaron fusionándose en 2002 para dar lugar a Digital +, que mantuvo la marca Canal + como parte de su oferta hasta hace unos años, siendo sustituida por Movistar Plus.
Prisa mantuvo la licencia de Canal+ a través de emisiones analógicas hasta 2005. En aquel entonces el Gobierno de Rodríguez Zapatero aprobó el Plan Técnico Nacional de Televisión Digital Terrestre que daría lugar a la conformación del universo televisivo actual.
En él se acordaron dos grandes hitos: el primero, autorizar a Prisa a convertir Canal + en una televisión en abierto: Cuatro.
El segundo, la creación de La Sexta, en donde -entre otros- estaban José Miguel Contreras (actualmente en Prisa), Tatxo Benet, Emilio Aragón o Jaume Roures. Una televisión de corte progresista, que acabó años más tarde en manos de Atresmedia.
Cuatro inauguraba sus emisiones el 7 de noviembre de 2005 de la mano de Iñaki Gabilondo. Cuatro años después el grupo encabezado por Juan Luis Cebrián fusionaba su negocio de televisión con Mediaset.
Esto permitía que Cuatro pasara a depender de la cadena italiana que se hacía con el 82% del negocio, mientras que el 18% restante quedaba en manos de Prisa que, además, recibía algo más de 500 millones de euros.
Fueron experiencias que todavía están grabadas a fuego entre los más viejos de Prisa. Son conscientes de que lo único que se les ha resistido es la televisión, pero algunos han asumido que no es lo suyo. Ahora parece que la historia puede repetirse. Veremos si con mejor éxito que entonces.