Al cierre de las operaciones, el Dow Jones de Industriales, el principal indicador del mercado, ganó un 0,03 % o 5,34 puntos, hasta los 21.012,28 enteros, a unos cien puntos del récord del 1 de marzo pasado. Por su parte, el selectivo S&P 500 estuvo casi plano, pero con una ganancia de 0,09 puntos, suficientes para que conquistara una nueva marca histórica, de 2.399,38 enteros, por encima de la que se anotó el pasado viernes. El S&P 500, que estaba en terreno negativo a escasos segundos de que acabara la sesión, logró colocarse en terreno positivo cuando se anotaron las últimas operaciones. También tuvo su propio récord el índice compuesto del Nasdaq, que ganó un 0,03 % o 1,90 puntos, hasta los 6.102,66 enteros. Por sectores, el avance mayor fue para el tecnológico, que subió un 0,53 %. El retroceso más pronunciado lo tuvo el de materiales básicos, que perdió un 0,77 %. De los treinta títulos incluidos en el Dow Jones, la estrella hoy fue Apple, que lideró ese grupo con una ganancia del 2,71 %, hasta los 153 dólares la acción, lo que colocó a esa firma en un nivel récord de capitalización, superando los 800.000 millones de dólares. Detrás de Apple quedaron las dos petroleras del Dow Jones, ExxonMobil (1,06 %) y Chevron (0,84 %). En la cola del grupo se situaron la química DuPont (-1,08 %) y el grupo bancario Goldman Sachs e Intel, ambos con un descenso del 0,81 %). El avance de Apple estuvo ligado a informes de la firma del gurú de Wall Street Warren Buffett, quien anunció que al cierre del primer trimestre de este año elevó hasta los 19.200 millones de dólares el valor de las acciones que poseía de esa firma tecnológica. Tres meses antes, la firma de Buffett, Bershire Hathaway, tenía unos 7.100 millones de dólares en títulos de Apple. Gracias a esos informes, Apple consiguió al cierre una capitalización de 811.000 millones de dólares, unos 500.000 millones más que el principal grupo bancario de Estados Unidos, JPMorgan Chase. Apple había superado los 400.000 millones el 18 de enero de 2012. Al margen de ese hito histórico de la firma con la mayor capitalización bursátil de todo el mundo, pocas cosas más afectaron a las operaciones del parqué neoyorquino. Por ejemplo, tuvo un impacto nulo el resultado de la segunda vuelta de las elecciones presidenciales francesas, en las que ganó el centrista Emmanuel Macron, frente a la ultraderechista Marine Le Pen. El mercado ya había asumido que, de acuerdo con las encuestas previas, Macron tenía asegurada su victoria en las urnas, por lo que el resultado electoral no fue ninguna sorpresa. En otros mercados, el petróleo de Texas terminó con un avance del 0,45 %, hasta los 46,43 dólares el barril, y al cierre de Wall Street el oro avanzaba hasta 1.227,3 dólares la onza, la rentabilidad de la deuda pública a diez años subía al 2,387 % y el dólar subía ante el euro, que se cambiaba a 1,0926 dólares.