«Invertir en Japón permite protegerse de los mercados en máximos»
En un momento en el que los mercados están en máximos y vemos grandes subidas en el año, la atracción de un mercado de renta variable como Japón, que parece barato y no está correlacionado, es muy aparente, según el responsable de Inversiones en Capital Group. En su opinión, puede que parezca un mercado razonablemente defensivo, pero tiene una parte positiva y ésta es Abenomics y que el BoJ está tratando de romper con muchos años de deflación mediante una política monetaria ultralaxa, ultraexpansiva y con tipos de interés muy bajos. El rendimiento del sector bancario es una guía de cómo ve el mercado lo exitoso que está siendo Abenomics para estimular el crecimiento, dice Richard Carlyle.
21 noviembre, 2017 07:57Por Maite Nieva
Richard Carlyle, es responsable de inversión en Capital Group, y trabaja en la oficina en Londres. Cuenta con más de 33 años de experiencia en la industria, los últimos nueve en la gestora estadounidense. Antes de incorporarse a Capital Group, fue director de Renta Variable en Henderson Investors. Está licenciado en Economía con honores por la Universidad de Leicester.
¿Cuáles son las ventajas de invertir en Japón en un contexto como el actual?
Cuando nos fijamos en Japón lo hacemos como un inversor global y esto nos da cierta ventaja competitiva. Las grandes firmas como Toyota tienen una gran cobertura pero en grandes compañías, como Hoshizaki o Asahi Intecc, que tienen una cobertura mucho menor. Si eres un gestor y quieres basarte en análisis de ventas, estos cubren las grandes acciones, pero hay una cobertura mínima para pequeñas y medianas empresas. La cuestión es que están lejos de Tokio, por lo que un inversor internacional que vaya a Tokio por un día tendrá problemas para visitar las compañías más alejadas. Tener una oficina local ayuda, pero tener una perspectiva global es la gran diferencia. Llevamos muchos años en Japón y cuando abrimos una oficina local nos ayudó a entender mejor a las compañías japonesas. Gestionamos 10.000 millones de dólares en renta variable japonesa. No es ningún secreto que cuando el GPIF, uno de los mayores fondos de pensiones del mundo, seleccionó gestores no japoneses por primera vez, nosotros fuimos de los primeros elegidos.
¿Cómo afecta a las empresas japonesas tener una divisa débil frente al resto de monedas?
Japón tiene una gran sensibilidad a la divisa, ya que tiene un gran sector exportador. Además, los inversores son muy sensibles al yen y muchos inversores extranjeros cubren su exposición a renta variable japonesa vendiendo yenes. Esta es la razón por la que mucha gente está muy centrada en la divisa en Japón. Nosotros somos bottom-up stock pickers, por lo que nuestros gestores tendrán su visión del yen pero trabajan para asegurarse de que solo hay una posición en la cartera. Tratamos de ser neutrales sobre el yen.
¿Es sostenible la política de endeudamiento del Banco de Japón en un momento en el que la política de los Bancos Centrales amenaza con una burbuja de dimensiones desconocidas?
Es cierto que el gobierno de Japón ha tenido una gran deuda, de cerca del 190% del PIB y es mayor a la de cualquier otra economía desarrollada. En el conjunto de Japón, el gobierno está altamente endeudado pero las compañías tienen mucho efectivo. Y los consumidores igual. Se puede argumentar que tienen el mismo nivel de deuda que otros países, pero más distribuido hacia el gobierno que a la industria y consumidores. De esta forma, el gobierno puede gravar a las compañías y consumidores para obtener dinero de ellos y así repagar la deuda. Otro hecho importante es que incluso cuando el gobierno tiene una deuda significativa, esta deuda está dentro de Japón. Está en gran medida en manos de aseguradoras o bancos. Sin embargo, la deuda sigue subiendo y por eso necesitamos que Abenomics funcione y restablecer el crecimiento en la economía.
¿Los riesgos en Japón están equilibrados?
Cualquier inversor de cualquier parte del mundo sabe los aspectos negativos de Japón: tiene una gran deuda en relación al PIB, una población envejecida, escándalos recurrentes... Lo que intentamos es encontrar la parte positiva y esta es Abenomics y que el BoJ está tratando de romper con muchos años de deflación mediante una política monetaria ultra laxa y ultra expansiva y con tipos de interés muy bajos. Está demostrando ser un trabajo realmente duro y complicado. Hay una generación que ha vivido siempre con caídas en los precios, por lo que es complicado terminar con este ciclo psicológico. Pero hay cosas positivas. Se está empezando a ver inflación, aunque va a ser más largo de lo que se espera. Estamos empezando a ver verdaderas carencias laborales, como en el comercio minorista, donde muchos negocios no encuentran oferta laboral a tiempo parcial y están contratando a empleados a jornada completa, a quienes pagan un 20-25% más. Algo muy positivo para la inflación si realmente se produce un aumento de los salarios.
¿Qué impacto tiene la política macroeconómica actual y una Bolsa en máximos históricos en el fondo Capital Group Japan Equity Fund (LUX), uno de los más rentables?
En un momento en el que vemos a los mercados en máximos, y grandes subidas en el año, la atracción de un mercado de renta variable que parece barato y no está correlacionado es muy aparente. Y puede que Japón parezca un mercado razonablemente defensivo. Si se echa la vista atrás 20 años para fijarse en los grandes bloques de renta variable (EEUU, Europa, los mercados emergentes y Japón), se verá que EEUU y Europa se mueven juntos, con momentos en los que EEUU lo ha hecho mejor. Los emergentes son una pequeña versión de beta elevada y cuando los mercados de renta variable suben, los emergentes suben incluso más. Sin embargo, Japón siempre ha estado descorrelacionado.
¿Cuál es la filosofía de inversión del fondo?
Tenemos visiones macro pero en definitiva es bottom-up. Intentamos tener un equipo equilibrado que cubre todos los entornos de mercado. Todos los fondos de Capital Group son multi gestor. El objetivo es lograr un track record reiterado a largo plazo que no se apoye en el mercado japonés mediante un sesgo particular. Tenemos tres gestores en la cartera de análisis y les pedimos que inviertan en sus ideas de alta convicción. Seung Kwak, el líder del equipo y gestor growth, trata de encontrar compañías de primer nivel y que estén establecidas en Japón. Akira Horiguchi tiene el foco sobre pequeñas empresas y Andrew Johnson, es gestor value. El value ha tenido un gran rendimiento durante 4 o 5 años seguidos, pero lo que intentamos es asegurarnos de que lo tenemos cubierto, incluso cuando la dirección del mercado cambia y el growth se vuelve más popular.
¿Qué sectores tienen más peso en la cartera del fondo?
Somos bottom-up stock pickers. Estamos sobreponderados en bancos y en el sector financiero no bancario. Los bancos japoneses han decepcionado durante mucho tiempo. Sufren por la falta de crecimiento, no aumentan los préstamos y los tipos de interés están muy bajos. La brecha entre lo que pagan por depósitos y lo que ganan por préstamos es muy reducida. Si Abenomics funciona, se tendrán dos cosas: una economía de mayor crecimiento, con más demanda de préstamos y, segundo, unos tipos de interés más altos, lo que da a los bancos una posibilidad de obtener un buen margen de tipos de interés netos. El rendimiento del sector bancario es prácticamente una guía de cómo ve el mercado lo exitoso que está siendo Abenomics para estimular el crecimiento. Creo que es natural estar muy expuestos al sector financiero si se cree en Abenomics. También estamos sobreponderados en el sector de maquinaria. Hay muchas compañías domésticas que crecen con la industria automovilística japonesa. Suelen suministrar pequeñas piezas de los sistemas de producción de automóviles. Tenemos firmas como SMC, que produce piezas para los robots que ensamblan los coches. Normalmente estas compañías tienen unos costes de I+D elevados, por lo que tienen productos líderes en el mercado que se venden a precios altos, pero cuando se equipa una fábrica de vehículos, se emplean máquinas que duran muchos años y se está dispuesto a pagar por los mejores productos. La expansión de la industria automovilística japonesa se ha detenido, pero China es el nuevo mercado. Este cambio beneficia a los productores japoneses.
¿Cuál ha sido la evolución del fondo?
Empezamos en Japón hace más de 20 años. Comenzamos gestionando para instituciones japonesas y para clientes globales con filiales japonesas. Esta fue nuestra base de clientes y ha crecido hasta ser un producto que vendemos en todo el mundo. Nuestro principal inversor es japonés, pero tenemos inversores en EEUU, Europa¿ En Capital Group no tenemos muchos fondos de un único país. Tenemos fondos de renta variable estadounidense o europea, pero realmente Japón es uno de nuestros mandatos más limitados, por lo que tenemos que asegurarnos de que ofrece retornos realmente buenos. Hemos tenido un rendimiento muy bueno este año, después de un par de años algo más flojos. Nuestro track record a largo plazo está al día con los mejores. Tratamos que funcione bien tanto en mercados growth como value.