En el conjunto del año la tasa de crecimiento alcanza el 5,8 por ciento, con 131 millones de pernoctaciones. El 60 por ciento de las pernoctaciones se realizaron en apartamentos turísticos, el 30 por ciento en campings,

el 8 por ciento en alojamientos de turismo rural y el 2 por ciento restante en albergues.

España, que acaba de recuperar la segunda posición como destino turístico mundial con un nuevo récord de 82 millones de visitas foráneas en 2017, no es ajena al auge de los alojamientos de residencias particulares que está tratando de regular y que concentra gran parte de las visitas en algunas de sus principales ciudades.

Aunque los hoteles todavía concentran alrededor del 72 por ciento de las pernoctaciones, los establecimientos alternativos siguen creciendo a tasas más elevadas. Las tradicionales pernoctaciones en hoteles en el año récord de 2017 crecieron de hecho un 2,7 por ciento, menos de la mitad que las extrahoteleras, según datos recopilados en ambos casos por el Instituto Nacional de Estadística.spain