El 30% de los inmuebles que hay en España fue construido en el siglo XXI. Catastro ha publicado una estadística con datos tan curiosos como que el 35% del patrimonio inmobiliario de Melilla se construyó durante el boom inmobiliario (del 2000 a 2009); ocurrió lo mismo en 10 comunidades autónomas.

En un artículo sobre la antigüedad del patrimonio inmobiliario urbano construido, Catastro detalla por décadas y comunidades autónomas la evolución de las edificaciones y los periodos en los que más se construyeron.

Entre 2000 y 2009 la actividad constructora se disparó hasta los 9,3 millones de edificios, prácticamente el doble que en las décadas anteriores. Luego llegó la crisis y desde 2009, hasta nuestros días, se han construido 1,3 millones.

Al analizar los periodos de construcción de los inmuebles residenciales por CCAA, destaca cómo Melilla, Murcia, Valencia, Canarias, Andalucía, Castilla-La Mancha, Baleares, Cantabria, La Rioja y Ceuta presentan patrimonios inmobiliarios principalmente creados en la década del boom.

No ocurrió así en Cataluña y Madrid, por ejemplo. En ambas regiones la mayor parte de sus viviendas se construyeron en la década de los 70.

La mayor antigüedad de la edificación se encuentra en la España del interior. En Castilla y León, Galicia, Aragón, Extremadura y Asturias, las viviendas que predominan se construyeron antes de la década de los 50.

La antigüedad no es solamente un atributo meramente informativo de la edificación a efectos catastrales, sino que aporta un elemento determinante para la adecuada valoración de los inmuebles. Catastro valora los inmuebles aplicando el método de reposición, es decir calculando el coste actual de la construcción en función de su calidad y uso, depreciándose en función de la antigüedad y conservación.