La política monetaria expansiva del Banco Central Europeo (BCE) ha resultado eficaz en la estabilización de la economía de la zona euro y en la creación de las condiciones necesarias para un ajuste sostenido de la inflación hacia el objetivo de la institución, ligeramente inferior al 2%, aunque es importante en este momento del ciclo vigilar de cerca los riesgos de esta posición, según ha advertido el economista jefe del BCE, Peter Praet.

"Una política monetaria paciente, prudente y persistente aún es necesaria", ha señalado el banquero belga durante un congreso celebrado en la ciudad alemana de Colonia. "Al mismo tiempo y particularmente en esta fase del ciclo de la política monetaria hay que monitorizar de cerca los riesgos de nuestra política", ha añadido.

Asimismo, el banquero ha destacado la apropiada activación de instrumentos macroprudenciales en varios casos, apuntando que resulta esencial contar con un marco macroprudencial sólido y exhaustivo que complemente a la política monetaria.

No obstante, el economista jefe del BCE ha apuntado que la política monetaria "debería también signos de excesos financieros".