La construcción copa el 47% del volumen emitido en Bolsa por empresas no financieras
Los sectores de la construcción y actividades inmobiliarias coparon el 47% de todo el volumen de financiación emitido por las sociedades no financieras mediante acciones en mercados cotizados el pasado año, según datos del Banco de España.
15 noviembre, 2018 10:10Según el artículo 'La evolución reciente de la financiación no bancaria de las empresas españolas'. publicado este jueves por el organismo, la financiación alternativa desde 2009 alcanza 50.000 millones anuales, frente al descenso de 34.000 millones de préstamos bancarios.
Con alrededor de 8.000 millones de euros emitidos en 2017, frente a menos de 1.000 millones un año antes, el sector de la construcción ya participa en este tipo de emisiones por encima del dato que registraba antes de la crisis, cuando contribuía a la emisión de alrededor de 6.000 millones de euros.
Debido a esta menor actividad durante los años de crisis por parte del sector de la construcción y actividades inmobiliarias, la rama más activa en este tipo de emisiones de renta variable fue la de industria, energía y suministros, que concentró el 38% de todos los fondos captados mediante la emisión de acciones a lo largo del periodo 2005-2017.
MENOR DEPENDENCIA BANCARIA
En total, desde el comienzo de la crisis, la renta variable ha sido la principal fuente de financiación externa de las empresas, con una media anual de 37.100 millones de euros en el periodo, una tendencia que confirma el proceso de desapalancamiento iniciado por las empresas no financieras tras el estallido de la 'Gran Recesión' para diversificar las fuentes de financiación y evitar, así, una total dependencia de los préstamos bancarios.
De hecho, la emisión de valores --bonos o capital-- en mercados oficiales o alternativos y la captación de recursos propios a través de entidades de capital riesgo entre 2009 y 2017 alcanzó un valor medio anual de 50.000 millones de euros, frente al descenso medio anual de 34.000 millones de euros en préstamos.
Según explica el estudio, la mayor dependencia en España de la financiación bancaria se debe a la estructura de su tejido empresarial, que se compone del 99,7% del total de pequeñas y medianas empresas, las cuales, a la hora de buscar financiación, tienen mayores dificultades para emitir valores.
Sin embargo, después de que tanto las autoridades comunitarias como las nacionales hayan impulsado el desarrollo de mercados de valores alternativos --como el MAB y el MARF-- o nuevas modalidades de entidades de capital riesgo e iniciativas como la financiación participativa --crowdfunding--, unido a los bajos tipos de interés y los cambios en la regulación, las sociedades no financieras han aprovechado para acometer un intenso proceso de desapalancamiento.
Ya en 2017, estos mercados alternativos, dentro del segmento de expansión, que es el que agrupa a las sociedades no financieras, superaron los 40 emisores admitidos a negociación, aunque estos mercados todavía siguen representando apenas el 1% de la financiación con valores captada por este tipo de empresas.
OTRO TIPO DE FINANCIACIÓN
En el ámbito de los mercados de renta fija, el número de emisiones en 2017 se multiplicó por más se seis en comparación con el dato de 2007, impulsado por el contexto general de recuperación económica y por el abaratamiento del coste relativo de esta modalidad de financiación comparado con los préstamos bancarios, gracias al impulso del programa de compras de deuda privada del Banco Central Europeo.
Por su parte, el volumen de fondos canalizado por el capital riesgo hacia las empresas españolas supuso el 2,6% del PIB el año pasado, aunque el grueso de los fondos destinados a este tipo de financiación procedió de fuera del país.
Por último, pese a que aún no existen datos oficiales sobre el volumen negociado en las plataformas de crowdfunding, se estima que, a lo largo de los tres últimos años, los fondos captados han aumentado en todo el mundo un 40% anual, superando entre enero y junio de 2018 los 9.400 millones de euros, de los que China concentraría el 80%, seguido de Estados Unidos, con un 11% de cuota. Por el contrario, España solo coparía el 0,2% de este importe, aunque a finales de 2017, la CNMV había autorizado ya 26 plataformas de este tipo.