El mapa del ahorro en España sigue claramente dominado por el imperio de la banca. A los españoles les sigue costando dar el salto a los mercados de inversión, pero poco a poco la escasa rentabilidad de los productos tradicionales, la proliferación de herramientas digitales y la aparición de las empresas fintech van facilitando que el dinero salga de debajo de los colchones y de las cuentas corrientes.
Este es el motor de Micappital, una firma que nació en 2017 y que ahora coge carrerilla en su objetivo de hacer que los clientes a los que asesora ganen dinero sin cambiarse de banco con los productos que su entidad ya tiene en catálogo. Un reto que no siempre es posible, como explica Miguel Camiña, uno de los cofundadores de la fintech, en esta conversación con 'INVERTIA' en la que repasa toda la actualidad de los mercados financieros.
Pregunta (P.): ¿Cómo definiría a Micappital y qué aporta a un pequeño ahorrador?
Respuesta (R.): Micappital es una fintech que ayuda y acompaña al cliente en la gestión de su ahorro e inversión, apoyada en una plataforma tecnológica que permite prestar un servicio parecido al de la banca privada, pero democratizándolo a cualquier perfil de cliente, pues se ofrece desde un importe mínimo de 1.000 euros. Diseñamos un plan de inversión a la medida del pequeño ahorrador y hacemos un seguimiento diario para tener su dinero siempre controlado e invertido en los productos más interesantes para su caso particular.
P.: ¿Cuál es el principal obstáculo que han descubierto para que los españoles salten del ahorro a la inversión?
R.: Sin duda, la falta de cultura financiera. El desconocimiento de conceptos básicos como el interés compuesto o los efectos de la inflación sobre los ahorros parados en cuenta corriente son dos ejemplos claros que nos ayudan a entender a este tipo de personas y su comportamiento respecto a sus ahorros. Por otro lado, hay una parte de miedo y desconfianza hacia un mundo desconocido, ya que se han hecho muchas cosas mal en el pasado y eso ha mermado la confianza de los ahorradores.
Con este escenario, la propuesta de Micappital es defender al cliente por encima de todo, ponernos siempre de su lado y trabajar para ellos, no para los bancos. La mejor forma de entender esto es nuestro novedoso sistema de comisiones: los clientes sólo nos pagan por nuestro servicio cuando ganan dinero con sus inversiones; si no conseguimos que ganen, no cobramos. Y no recibimos ningún pago de ninguna entidad o banco, así que nuestro modelo de negocio se basa exclusivamente en nuestros clientes.
"Los clientes tienen una relación amor-odio con sus bancos: saben que pueden estar tranquilos con su dinero, pero no terminan de confiar en sus recomendaciones"
P.: ¿En qué consiste esta política? ¿Ganar dinero es tener beneficios o también perder, pero menos que el índice de referencia en cada caso?
R.: Es una de las formas que tenemos de mostrar a los clientes que somos diferentes. Cobramos dos euros al mes por cada 1.000 euros de inversión, sólo si el mes es positivo en rentabilidad para el cliente. Y hasta un máximo de 20 euros mensuales a partir de 10.000 euros de inversión. Si el cliente no obtiene rentabilidad en un mes, no se le cobra nada.
No utilizamos índices de referencia, nuestro cliente quiere ganar dinero, no le importa si el índice gana o pierde: él quiere ganar siempre. Por eso hacemos cobros mensuales, para obligarnos a estar siempre pendientes de las inversiones y hacer un seguimiento diario muy exhaustivo para detectar oportunidades. No nos gusta el modelo bancario de recomendar un producto al cliente y dejarle ahí invertido cuatro o cinco años porque se pierden muchísimas oportunidades y, seguramente, el producto que actualmente es bueno, no sea el mejor dentro de cinco años.
P.: ¿Cuál es el perfil tipo de sus clientes actualmente?
R.: Tenemos identificados tres tipos de perfiles diferentes. El rango ‘millennial’ está muy claro dentro de nuestros clientes, personas entre 25 y 35 años que empiezan a generar ahorros, pero no tienen el tiempo o el conocimiento necesarios para gestionarlos por sí mismos. Un segundo grupo se compone de personas con edades cercanas a la jubilación, que tienen algo más de experiencia inversora y son los que mejor valoran nuestro servicio porque tienen más conocimiento de cómo funciona el sector y rápidamente identifican el valor añadido. Les caracteriza que suelen ser inversores más conservadores que los ‘millennials’.
Por último, hemos identificado otro perfil de inversión: las mujeres con hijos, que hasta ahora en muchos casos dejaban las decisiones financieras en manos de sus parejas, pero poco a poco van tomando las riendas de sus ahorros, algo que nosotros incentivamos. Son el perfil más disciplinado en cuanto al ahorro, y no les gusta asumir riesgos.
P.: ¿Cuáles son sus actuales cifras de clientes y patrimonio asesorado?
R.: Ahora mismo contamos con alrededor de 600 clientes, a los que estamos ayudando a invertir algo más de 14 millones de euros dentro de los 17 bancos que tenemos disponibles en nuestra plataforma, en la que contamos además con cerca de 3.000 usuarios registrados.
P.: ¿Estas cifras se ven beneficiadas o perjudicadas por un clima de incertidumbre económica como el actual?
R.: Nuestros clientes normalmente tienen sus ahorros parados en la cuenta corriente, y necesitan un pequeño empujón y un apoyo para pasar de ser sólo ahorradores a convertirse en inversores. Es decir, somos nosotros quienes ejercemos de estímulo para ellos, les animamos a entrar en el mundo de la inversión más por nuestra actitud proactiva que por su voluntad objetiva de búsqueda de asesoramiento frente al clima de incertidumbre. No obstante, es posible que en los próximos años veamos un cambio radical en esta materia, impulsado por la regulación, la digitalización de la banca y la consolidación de las empresas fintech como la nuestra.
P.: Desde su experiencia, ¿es cierto eso de que muchas veces se escucha que todos los bancos son iguales?
R.: Sí, nosotros siempre decimos que los clientes tienen una relación amor-odio con sus bancos: saben que pueden estar tranquilos con su dinero ahí, pero no terminan de confiar en lo que estos les recomiendan. No se fían del todo de que esas recomendaciones busquen su propio beneficio. Aquí es donde entra Micappital, que analiza todos los productos de inversión disponibles en su banco sin necesidad de que el cliente mueva su dinero y los filtra para elegir el más interesante de acuerdo con sus preferencias y sus circunstancias.
P.: ¿Han tenido que recomendar alguna vez a un cliente que se cambiara de banco en función de su perfil?
R.: Si, muchas veces, desgraciadamente. Como he explicado, nosotros no cobramos hasta que el cliente gana dinero, por lo tanto, si está en una entidad donde los productos son de baja calidad o tienen unas comisiones muy altas la probabilidad de que el cliente gane es muy baja. En consecuencia, no es interesante invertir a través de ese banco, ni para él ni para nosotros. También hay que decir que los bancos se están poniendo las pilas y están mejorando su oferta de productos disponibles para el cliente minorista.
"Desgraciadamente, hemos tenido que recomendar cambiar de banco muchas veces si sus productos son de baja calidad o tienen comisiones muy altas"
P.: Dentro de esta renovación, ¿hay realmente opciones de conseguir rentabilidad con un perfil conservador y una cartera modesta?
R.: El inversor conservador tiene muy pocas alternativas para invertir, se ve obligado a asumir más riesgo del que estaría dispuesto si quiere conseguir rentabilidad. Por eso hay que tener mucho cuidado con este tipo de inversores, y ser muy cauteloso con el análisis de riesgo. En Micappital utilizamos para ello potentes algoritmos desarrollados por nuestro equipo. Este tipo de inversores los tratamos de forma especial, y normalmente les recomendamos invertir un importe menor del que tenían previsto, pero asumir un poco más de riesgo para optar a sacar algo de rentabilidad, manteniendo su perfil de riesgo global totalmente ajustado a su situación.
De otra parte, nuestras recomendaciones siempre están enfocadas a que el cliente rentabilice sus ahorros, por lo que en muchos casos también hemos recomendado cuentas remuneradas o promociones de los bancos para mejorar esa rentabilidad de cara a inversores conservadores.
P.: De hecho, actualmente tienen abierta una campaña de bonificación, ¿en qué consiste?
R.: Esta campaña la hemos desarrollado gracias al ‘feedback’ de nuestros clientes y al análisis del mercado actual. Está muy relacionada con la pregunta anterior, con la necesidad de buscar una alternativa para el inversor conservador. Los bancos no están incentivando a los pequeños y medianos ahorradores a que inviertan, las cuentas remuneradas y depósitos que hay en la banca no dan rentabilidad y exigen cumplir una serie de requisitos para beneficiarse de las promociones, como domiciliar nóminas o recibos o contratar seguros.
Con este panorama, decidimos crear la Cuenta Inversora Remunerada al 5%, que añade un 5% anual sobre los primeros 1.000 euros de la inversión. Está diseñada para estimular al ahorrador para convertirse en inversor, dándole una protección extra y una rentabilidad adicional. Se puede obtener invirtiendo con el apoyo de Micappital en cualquiera de los 17 bancos españoles que tenemos disponibles. Es una promoción limitada a las primeras 3.000 cuentas, porque la financiamos nosotros directamente, y en estas primeras semanas está siendo un gran éxito.