La opa de Six Group por el control de BME ya cuenta con el visto bueno del consejo de administración de la española. No ha habido sorpresas. Al órgano rector de la gestora delas bolsas españolas le han bastado tres de los diez días de plazo con los que contaba para manifestarse a favor de la operación.
El respaldo a la opa de Six ha sido unánime entre los 11 miembros del consejo de administración de BME, que además se han comprometido a vender sus acciones en la operación. En este sentido, el informe remitido este miércoles a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) “valora positivamente el precio de la oferta” y considera que “los compromisos asumidos por Six y las condiciones y cautelas impuestas por la autorización del Consejo de Ministros son, en su conjunto, adecuados” para el desarrollo de los mercados secundarios oficiales españoles.
BME ha contado con la asesoría de Morgan Stanley para valorar el precio inicial de 34 euros por acción planteado por Six, que quedará en 32,98 euros por acción una vez que se descuenten los dos dividendos repartidos por la española desde que los suizos hicieron su primer anuncio. El banco de inversión estadounidense ha concluido en un informe fechado en este mismo 1 de abril que esta contraprestación es “adecuada desde un punto de vista financiero”.
Unanimidad del consejo
Sin perjuicio de que los consejeros puedan cambiar de opinión más adelante durante el plazo de aceptación, que se prolonga hasta el próximo 11 de mayo, todos ellos se han comprometido a acudir con toda su cartera a la operación. Entre ellos, Juan March, que posee apenas 500 acciones de BME pero representa a Corporación Financiera Alba, que es dueña de un 12% del capital de la firma.
Actualmente, y según la relación de inversiones que BME ha remitido a la CNMV, los consejeros suman una participación de apenas un 0,411% en el capital social de la compañía. Six Group ha establecido que para sacar adelante la opa debe cosechar una aceptación mínima del 50% más una acción.
No obstante, los dueños de la Bolsa de Zúrich no tienen intención de proceder a la exclusión bursátil de la compañía a no ser que solo quede fuera de su control menos de un 5% del accionariado de la española entre inversores que individualmente no sobrepasen la cota del 3%.
El consejo de administración también ha mostrado su intención de vender en la operación las 764.055 acciones propias que acumula en autocartera. Un paquete que equivale a un 0,914% del capital social, según consta en el informe remitido al supervisor.
Sin noticias de Euronext
Con la puerta abierta a que estas decisiones puedan variar si llegase en tiempo y forma una oferta competidora, BME da los detalles de la relación establecida con Euronext en los últimos meses. El informe recoge que el grupo radicado en Ámsterdam mantuvo contactos con BME en noviembre “en los que se calificó a sí misma potencial oferente de buena fe”, de manera que se le facilitó la misma información que a Six.
No obstante, reconoce que “durante los meses de diciembre de 2019 y el año 2020 no ha habido nuevas conversaciones o comunicaciones”, si bien no fue hasta el pasado 30 de marzo que este potencial competidor de los suizos se retiró formalmente del proceso.
Asimismo, cabe recordar que el consejo de BME se comprometió a la firma de un acuerdo de penalización en caso de que la oferta no saliese adelante una vez autorizada por la CNMV si aparece una oferta competidora, como podría ser la de Euronext. En tal caso, tendría que asumir el pago de un 0,5% del importe comprometido para la operación, lo que equivale a 14 millones de euros.