El sector de la salud ha sido siempre un foco de atención, pero esta atención se ha intensificado de forma notable recientemente, en un momento en el que la búsqueda de una vacuna para el Covid-19 se ha convertido en un objetivo prioritario.
A medida que nos encaminamos a una recesión que posiblemente sea de unas dimensiones y características nunca vistas en nuestra vida, puede que, cuando lleguemos al final de este periodo recesivo, el sector sanitario sea el que con mayor fuerza cotice al alza en los mercados bursátiles.
Durante la última década el índice MSCI World Health Care obtuvo un retorno del 13% anualizado, mientras que el MSCI World ganó un 8%. Y son muchas las razones que pueden llevarnos a pensar que este comportamiento superior puede continuar. Entre ellas, que el sector tiende a tener una sensibilidad reducida a la economía, ya que siempre hay demanda de nuevos productos y servicios médicos.
Salud como megatendencia
Además, el sector contaba ya con ventajas antes de comenzar la pandemia que indicaban un crecimiento estructural a largo plazo. El envejecimiento de la población y el aumento de la clase media en mercados emergentes apuntaban a un aumento exponencial de la demanda tanto en tratamientos farmacológicos como en suministros médicos.
En fondos de inversión, la categoría sectorial VDOS de Salud es una de las más rentables en lo que llevamos de año, con una revalorización del 1,7%. De este grupo de fondos, se han seleccionado los de mayor calificación, cinco y cuatro estrellas de VDOS, con una aportación mínima de hasta 6.000 euros, más adecuada para el inversor individual.
El más rentable de esta selección es la clase A en euros de AB Sicav I-International Health Care Portfolio de la gestora estadounidense AllianceBernstein Investments, que en el año obtiene una rentabilidad del 3,9%. En el último periodo anual se revaloriza un 18,8%, con un controlado dato de volatilidad por este concepto del 16%, que lo sitúa en el segundo mejor grupo de su categoría por este concepto, en el quintil cuatro. Invierte principalmente en compañías del sector sanitario de todo el mundo, con una selección de valores basada en un riguroso análisis fundamental que ayude a identificar las de mayor potencial de crecimiento a largo plazo, en diferentes condiciones de mercado.
Para ello, el equipo gestor se centra en aquellas empresas con una historia de elevados retornos sobre capital invertido, fortaleza de flujos de caja y valoraciones atractivas, bien porque ofrezcan nuevos tratamientos o terapias, o bien porque tengan la oportunidad de reducir costes a sus clientes. Entre las mayores posiciones en su cartera encontramos nombres como Roche (9,57%), United Health Group (8,39%), Pfizer (6,58%), Vertex Pharmaceuticals (5,83%) y Zoetis (4%). Se requiere una aportación mínima inicial de 2.000 euros para suscribir la clase A en euros de este fondo, que aplica una comisión del 1,8%.
Crecimiento estructural
La clase Y de acumulación en euros de Fidelity Funds - Global Healt Care consigue mantenerse en terreno positivo en el año, con un 0,5% de revalorización. A un año, obtiene una rentabilidad del 18,6%, con un coste por volatilidad en este último periodo del 16,8%, en el quintil cuatro también respecto al resto de fondos de su categoría. Invierte en empresas de alta calidad que puedan obtener un rendimiento creciente a lo largo del tiempo. Concretamente busca tres características: calidad, visibilidad y sostenibilidad, identificado negocios con retornos elevados y sostenibles sobre el capital invertido, así como aquellos que puedan mejorar materialmente sus retornos.
El gestor entiende que, dentro del sector sanitario, hay múltiples oportunidades para comprar compañías con crecimiento estructural, apoyado por la innovación. Es necesaria una aportación mínima de 2.500 dólares (aproximadamente 2.278 euros) para suscribir la clase Y de acumulación en euros del fondo, que grava a sus participes con una comisión fija del 0,8% y de depósito del 0,35%.
De la gestora suiza Bellevue, el fondo Bellevue Funds (Lux) - BB Adamant Medtech & Services gana un 14,5% a un año en su clase B en euros, con un dato de volatilidad del 19%. Desde comienzos de año, sin embargo, no consigue situarse en terreno positivo (-1,12%). Invierte globalmente en empresas del sector de salud y de las tecnologías médicas, buscando ofrecer a sus inversores una solución atractiva en todo el universo del sector, exceptuando las compañías farmacéuticas.
Incluye en su cartera compañías de cualquier tamaño de capitalización, basando su selección en análisis fundamental con el foco puesto en los beneficios médicos y el posible ahorro para el sistema sanitario, así como en el potencial esperado de sus productos y servicios. Sus mayores posiciones incluyen acciones de United Health (17,60%), Abbott Laboratories (0,1%), Cigna (6,2%), Medtronic (5,9%) y Edwards Lifesciences (5,8%). Aplica a sus participes una comisión fija de 1,6% y de depósito del 0,4%.
El sentimiento a corto plazo en el sector de salud se estima que sea optimista, especialmente en las áreas más defensivas, como farmacéuticas y biotecnológicas de gran capitalización, que cuentan por lo general con balances y flujos de caja fuertes y, en algunos casos, con buenas rentabilidades por dividendo.
Los subsectores en los que el sentimiento se vino abajo en marzo fue el de dispositivos médicos e instalaciones sanitarias, debido a los retrasos en procedimientos no urgentes en los hospitales. Las empresas de pequeña y mediana capitalización tampoco se comportaron muy bien, al percibirse como de mayor riesgo por su tamaño.
Con una visión más a largo plazo, de entre uno a tres años, los subsectores que se perciben como de peor comportamiento ofrecen mayores retornos. Suponiendo que se vuelva a una situación de cierta normalidad en ese periodo, las instalaciones sanitarias y las acciones de pequeña y mediana capitalización en subsectores como el biotecnológico se perciben como muy atractivas.
***Paula Mercado es directora de análisis de VDOS