La euforia se apoderó de Wall Street, que volvió a la senda de las alzas y cerró una semana creciendo un 6,8%. EEUU creó empleo contra todo pronóstico en el mes de mayo, lo que ha supuesto la primera gran sorpresa positiva para los inversores desde el mercado laboral de la primera economía del mundo en mucho tiempo. El ánimo alcista regresó a la Bolsa de Nueva York.
El dato del día estuvo en los 2,5 millones de empleos que se han creado en EEUU en mayo. La cifra se queda en poco frente a los más de 40 millones de ciudadanos que han perdido su trabajo en el país, pero adquiere toda su importancia si se compara con los 8 millones de nuevos parados que el consenso de los economistas aguardaba. Así, la tasa de paro de EEUU se reduce al 13,3%.
Con este motor, el Dow Jones subió un 3,1% hasta alcanzar los 27.000 puntos, cerrando la semana con un crecimiento del 6,8%. El S&P 500 subió un 2,6% para aproximarse a los 3.200 puntos, un 4,9% de crecimiento semanal. El Nasdaq rebotó un 2,1% y rebasó los 9.800 enteros para hacerse con nuevos máximos históricos y crecer un 2,8% semanal.
La mejoría de mayo viene acompañada por otros síntomas de la vuelta al trabajo de los ciudadanos estadounidenses tras los compases más exigentes del distanciamiento social en el país. En este sentido, el promedio de trabajo semanal subió a 34,7 horas y en el sector manufacturero se crearon 225.000 puestos de trabajo, cuando el mercado estaba esperando la destrucción de otros 440.000 empleos en este segmento de la economía.
Otra derivada de este escenario de renovado optimismo llega en el mercado de materias primas. El petróleo West Texas Intermediate (WTI) de referencia en EEUU sube cerca de un 4% y recupera los 39 dólares por barril, un precio no visto desde antes de la llegada del coronavirus a Europa.
Hertz, rally de volatilidad
En el foco de los inversores se coloca Hertz Global Holdings, la multinacional de alquiler de vehículos. Sus acciones son presas de la volatilidad más extrema mientras se sigue dilucidando la resolución al proceso de bancarrota que anunció hace unas semanas y que inició formalmente el viernes pasado.
Aun en esta situación, la compañía ha reconocido que pagó 16,2 millones de dólares para retener empleados de alto grado en plena incertidumbre corporativa. Hoy, sus acciones se disparan un 80%.
Turismo y teletrabajo
A pesar del incremento de precios del petróleo, las aerolíneas despegan con fuerza en el parqué neoyorquino, algo que también se replica en mayor o menor medida en la mayoría de empresas vinculadas al sector turístico. American Airlines se convirtió en abanderada de este rebote con alzas del 11% a pesar de que los analistas de Raymond James han señalado que su actual cotización supone una "valoración perfecta" de la compañía.
La temporada de resultados hizo parada este viernes en la tecnológica Slack, dueña de la aplicación de gestión de equipos del mismo nombre. Al cierre de su primer trimestre fiscal, finalizado en abril, sufrió pérdidas netas atribuidas de 75,2 millones de dólares, un 125% más que hace un año.
Sin embargo, gracias al aumento del teletrabajo por el confinamiento, la compañía elevó su facturación un 50% y consiguió un incremento del 28% en clientes de pago, hasta sumar 122.000 cuentas activas. La compañía se dejó un 14% en la jornada.