Estamos viviendo un periodo muy especial. La peor pandemia de los últimos cien años nos ha llevado al colapso de la mayor expansión económica y nos ha introducido en un nuevo ciclo económico y de mercado. De la misma forma que el colapso ha sido de unas características extraordinarias, podría esperarse que la recuperación también lo sea.
Aunque las oportunidades de valor no son tan generalizadas como en anteriores ciclos, sí que pueden identificarse segmentos de mercado con un gran potencial de recuperación. Una de estas oportunidades está en las compañías cotizadas de pequeña y mediana capitalización, o small y midcaps.
En Europa, vemos como los índices EuroStoxx Small y EuroStoxx Mid, de pequeña y mediana capitalización respectivamente, han conseguido un mayor avance en la recuperación desde sus máximos del pasado 19 de febrero que el EuroStoxx 50. El que mayor ventaja lleva es el EuroStoxx Small, al que sólo le resta un 5% para llegar a su máximo del 19 de febrero, frente a un 8% del EuroStoxx Mid, y al 10% por ciento del EuroStoxx 50.
De acuerdo con esta evolución, podemos encontrar algunos los fondos de la categoría VDOS de renta variable internacional Europa que consiguen situarse en terreno positivo desde comienzos de año.
A la cabeza de una selección de fondos de este grupo, con calificación cinco estrellas de VDOS y aportación mínima inferior a 6.000 euros, se sitúa la clase B en euros de Credit Suisse (Lux) Small and Mid Cap Alpha Long/Short con una revalorización del 11,3%. En el último periodo anual, su rentabilidad es del 13,9%, con un dato de volatilidad controlado del 6%, que lo sitúa entre los mejores de su categoría por este concepto, en el quintil cinco. Se propone obtener retornos absolutos positivos explotando las ineficiencias del mercado de mediana y pequeña capitalización europeo, centrándose especialmente en los países de habla alemana.
El equipo gestor compra los valores que espera se vayan a comportar mejor, al mismo tiempo que vende las compañías que, en su opinión, se comportarán peor que el mercado. Sus mayores posiciones incluyen acciones de Wirecard (5,09%), MorphoSys (4,89%) y Airbus (4,11%). Aplica a sus participes una comisión fija del 2%, además de una comisión variable del 20% sobre resultados positivos del fondo respecto a su índice de referencia, el CS AllHedge Index Long/Short Equity.
Con un horizonte de inversión a largo plazo, Comgest Growth Mid-Caps Europe gana un 3,8% por rentabilidad desde enero en su clase de acumulación en euros. A un año se revaloriza un 18,1%, con un coste por volatilidad del 20,8%. Su objetivo de inversión es crear una cartera de compañías europeas de alta calidad y con potencial de crecimiento a largo plazo. Entre sus mayores posiciones se incluyen acciones de GN Store Nord (6,43%), Icon (5,33%), Straumann Holding (4,59%), SimCorp (4,23%) y Temenos (4,06%). Se requiere una aportación mínima de 50 euros para invertir en este fondo, que aplica una comisión fija es del 1,5% y de depósito del 0,01%.
La clase Y de acumulación en euros de Fidelity Funds - European Dynamic Growth obtiene una rentabilidad del 0,04% en el año y del 16,6% en el último año, con un dato controlado de volatilidad del 18,1%, que lo posiciona en el mejor grupo de su categoría por tal concepto, en el quintil cinco. El equipo gestor selecciona valores con un sesgo hacia el crecimiento, invirtiendo en empresas europeas que cotizan por debajo de su valor intrínseco y centrándose en aquellos casos en los que el mercado no tiene en cuenta el potencial de crecimiento a largo plazo.
Ponen el acento en vectores de crecimiento estructurales, más que cíclicos, y se centran en aquellas variables endógenas de la empresa en vez de en las que dependen de factores externos. Acciones de SAP (6,2%), Novo-Nordisk (5,4%), British American Tobacco (4,3%), Roche Holding (3,9%) y Grifols (3,8%) representan las mayores posiciones en la cartera del fondo. Sus partícipes soportan una comisión fija del 0,8% y de depósito del 0,35%. La suscripción de la clase Y de acumulación en euros del fondo requiere una aportación mínima de 2.500 dólares (aproximadamente 4.428 euros).
Más potencial frente a la crisis
Ya antes del brote de coronavirus, las smallcaps estaban registrando una tendencia alcista superior a la de las de gran capitalización. Esta tendencia ha continuado, tal como puede observarse en el gráfico adjunto.
Las compañías de pequeña capitalización tienen la ventaja de su mayor agilidad y suelen ser compañías innovadoras, de crecimiento, con potencial en etapas de cambio como la actual. Su cobertura por las casas de análisis es inferior a la de las compañías de gran capitalización, lo que supone una oportunidad para gestores con capacidad propia de análisis.
Su pequeño tamaño las hace vulnerables a crisis económicas, tanto por lo específico de su actividad como por la dificultas para conseguir financiación. No obstante, esto último no debería constituir una dificultad ahora, considerando las fuertes ayudas que la Comisión Europea está poniendo a su disposición.
***Paula Mercado es directora de análisis de VDOS