La bolsa va a ser la gran apuesta de Citi el próximo año. El banco estadounidense, cuya división de banca privada acaba de publicar sus perspectivas y estrategia para el 2021, está muy sobreponderado en renta variable ahora que la vacuna ya se está empezando a poner a los primeros pacientes y hay más visibilidad económica. Sin embargo, huye de los bonos para la recuperación post-Covid.
En términos generales, la banca privada de Citi está un 9,5% sobreponderada en renta variable y un -10% infraponderada en renta fija. Dentro de la bolsa, le gustan más las acciones desarrolladas que las emergentes, con una sobreponderación del 4,7% frente a un 2,8%. En el mundo de los bonos, escapa sobre todo de la deuda desarrollada con grado de inversión, de donde viene toda su infraponderación, ya que en otros activos de renta fija está neutral en promedio.
"Estamos alcistas", reconocen. Este posicionamiento destaca sobremanera respecto a diciembre de 2019, en los momentos pre-Covid. Hace 12 meses, Citi solo estaba sobreponderado al 1,5% en renta variable y su infraponderación en renta fija era cuatro veces menor, del -2,5%.
Los clientes VIP del banco americano arrancaban el 2020 muy expuestos a los bonos públicos de su propio país, el principal activo en sus carteras con una sobreponderación del 3,8%, cuando hoy les asignan un -0,2%, según el resumen hecho por David Bailin, el director de Inversiones de este área.
En su guía para los altos patrimonios y las grandes corporaciones, Citi ve oportunidades de inversión en las pequeñas y medianas capitalizadas globales, así como en las estrategias de capital riesgo enfocadas en las pymes incapaces de acceder a los parqués y mercados públicos. Por sectores, ve con buenos ojos los sectores cíclicos y expuestos a la recuperación postcoronavirus, incluidas las financieras, industriales y el inmobiliario. Dentro de este último, también pone un pie sobre los activos en problemas, en especial sobre las hoteleras.
Mantener tecnológicas
No obstante, el experto aboga por no desinvertir en los sectores defensivos que mejor se han comportado en 2020 durante el virus, como tecnología, medios y telecomunicaciones, con Amazon como gran valor refugio. "Pueden hacerlo algo peor, creando una oportunidad para los inversores de momentum", pero no hay que salir de ellos. Tampoco tener una ponderación ni una concentración excesiva en estos sectores o en sus acciones individuales.
Según el análisis de Citi, Estados Unidos es el mercado con mayor proporción de acciones defensivas ante la Covid, un 67,2%, que además de los sectores anteriores también incluyen cuidados de la salud, bienes de consumo o servicios públicos. En contra, hay un 32,8% de acciones cíclicas a la Covid en Wall Street. Los mercados donde más cíclicas hay para jugar en el post-Covid son Asia sin Japón (75,2%), Europa Central y del Este, Oriente Medio y África (CEEMEA, en inglés, un 70,5%) y Latinoamérica (64,4%).
Bailin recomienda aprovechar la situación para reemplazar algunos bonos con cupones bajos o negativos por acciones de alto dividendo, titulizaciones hipotecarias u otros instrumentos financieros que buscan ingresos de la volatilidad.
Por megatendencias, sus cuatro favoritas son la hiperconectividad y el 5G, incluidos los proveedores y los beneficiarios; el continuo crecimiento de Asia; los proveedores más innovadores relacionados con la atención médica vinculados a poblaciones que envejecen, así como las energías renovables.
Riesgos
Pero este optimismo colectivo también conlleva sus riesgos. "Aunque ha llegado la 'caballería' de la vacuna, necesitamos entender la seguridad y la longevidad de las propias vacunas. Con un nuevo gobierno en EE.UU., hay esperanzas para un comercio y unas relaciones internacionales más normalizadas, pero la composición muy diversa de los gobiernos desde las Américas hasta China o Brasil puede limitar la capacidad de lograr mucho. Y sin bajos tipos de interés de forma sostenida, la recuperación misma puede estar en peligro", advierte su director de Inversiones. "Todos estos riesgos deben ser monitorizados y considerados cuidadosamente", sostiene.
Previsiones hasta 2030
El cénit de las previsiones de Citi son sus estimaciones de rentabilidad anualizada para los diez próximos años, hasta 2030. Cobran especial sentido tras un año tan negativo marcado por la pandemia. Según Gregory van Inwegen, responsable global de Análisis Cuantitativo y Asset Allocation de Citi Investment Management, el capital riesgo subirá un 14,2% de forma anualizada durante la próxima década; las acciones emergentes, un 9,2%, y el inmobiliario, un 8,8%.
Previsiblemente, ninguna categoría terminaría en rojo al cierre de 2030, en media anualizada, aunque a algunos activos les costará batir a la inflación, caso de los activos monetarios estadounidenses, con una proyección del 0,7%, las materias primas o la renta fija desarrollada de máxima calidad, con perspectivas del 1,2% en ambos casos.
Por su parte, las bolsas desarrolladas rentarían un 5% cada año de aquí a 2030 y los hedge funds, un 4%, solo diez puntos básicos menos que la deuda de peor calidad (high yield) global.