Fluidra convierte su plan estratégico en impulso para sus máximos históricos
La confirmación de sus objetivos de negocio y las promesas de más dividendo y sostenibilidad prometen alargar la escalada alcista.
23 abril, 2021 01:07Noticias relacionadas
Los hitos marcados en un plan estratégico suponen una prueba de fuego para las cotizadas. Hace solo una semana, Fluidra ratificó con holgura sus objetivos para este año. Muy poco tiempo desde aquello, pero el suficiente para que la novata del Ibex 35 haya engordado sus máximos históricos y conseguido nuevos apoyos para seguir en escalada libre.
Desde que hace una semana la fabricante de piscinas y fuentes ornamentales confirmó los objetivos de su hoja de ruta, la mitad de los analistas que más de cerca siguen su evolución han revisado sus previsiones. Y el aplauso ha sido unánime, pues todos y cada uno de ellos han elevado el precio objetivo que conceden a sus acciones.
Hasta los más pesimistas -o cautos- con la evolución de Fluidra han estado de acuerdo en dar más cancha a su cotización en bolsa. Todo un reconocimiento a una compañía que confía en conseguir un crecimiento de ventas del 15% y una mejoría del 25% en sus beneficios por acción en medio de un escenario marcado por la incertidumbre en torno al ritmo y solvencia de la recuperación económica.
Rumbo a los 30 euros
De los siete analistas que en este corto espacio de tiempo ya han mejorado su opinión hacia la compañía, tres coinciden en ampliar su techo hasta los 30 euros por acción. Un precio objetivo que implica un potencial alcista del 12% desde su actual cotización, que conviene no olvidar que ya es de máximos históricos para la compañía catalana.
Con estas proyecciones sobre la mesa no resulta difícil entender por qué en Berenberg -la última casa que ha actualizado sus números sobre la compañía- aconsejan la compra de sus acciones. Esta es hoy por hoy la estrategia por la que se decantan un 43% de los analistas que emiten recomendación sobre la compañía. Un 36% aconseja mantener posiciones y solo el 21% restante considera que es momento de hacer caja y retirarse.
Relevo inversor
Esta es la táctica que en los últimos meses ha seguido la gestora estadounidense Rhône Capital, que ha aprovechado sus recientes y crecientes máximos históricos para reducir en dos ocasiones su inversión en Fluidra. Aunque con matices, porque la firma se mantiene como segundo mayor accionista de la compañía con un 21,5% del capital, solo por detrás de la sindicatura de las familias fundadoras, que aglutinan un 25%.
Ya en estos dos pasos por caja, previos a que la compañía anunciase que estaba en condiciones de cumplir con sus previsiones de negocio, Rhône Capital se encontró con un mercado deseoso de hacerse con acciones de la compañía. Tanto que en ambas ocasiones incluso amplió el volumen inicialmente planteado para sus colocaciones aceleradas.
Entre los protagonistas de este movimiento, la empresaria Carmen Godia, que se estrenó con un 3,86% de la cotizada, pero ya suma un 5% de sus acciones. A través de la sociedad patrimonial G3T SL acumula ganancias del 33% si se tiene en cuenta el precio de 20,2 euros por acción al que la gestora estadounidense cerró su primera colocación.
A diferencia de lo ocurrido recientemente con otras compañías que han perdido la confianza del mercado tras la publicación de sus plantes estratégicos, la concreción de cifras y los sólidos avances corporativos de Fluidra han conseguido el efecto contrario. En este sentido, varias casas de inversión subrayan el prolífico crecimiento inorgánico con el que la compañía se ha seguido nutriendo en plena pandemia.
El bum del Ibex
Este eje vertebral del plan de expansión del negocio de Fluidra se ha traducido en nada menos que cuatro anuncios de compra desde que empezó el año. Un ritmo que ha sido capaz de asumir gracias a las sinergias que ha ido consiguiendo de la que fue su gran apuesta en este ámbito, la compra de la estadounidense Zodiac en 2018.
El que fuera su primer ejecutivo, Bruce Brooks, se sigue desempeñando como consejero delegado de la española desde la absorción.
Sin duda, otro revulsivo alcista reciente para la compañía ha sido su inclusión en el Ibex 35, el índice por antonomasia de la bolsa española. Los administradores del selectivo eligieron a la compañía de piscinas como relevo de Bankia entre las varias candidatas que, casi en igualdad de posiciones, se disputaban el puesto. Desde entonces, además, la empresa ha experimentado un notable incremento en la negociación de sus títulos.
Mientras que antes de su entrada en el índice lo habitual era que cambiasen de manos poco más de 100.000 acciones de Fluidra en cada sesión, ahora es raro el día en el que esa cifra no se triplica, según datos oficiales de Infobolsa. El día hábil de bolsa antes de su inclusión -el viernes 26 de marzo- la entrada de institucionales para replicar el Ibex 35 en sus productos y la llegada de oportunistas se tradujo en una poco habitual cifra de 1,89 millones de títulos.
Dividendo al alza
En lo que va de año, la ‘novata’ del índice rey de la bolsa española suma un 28% a su capitalización, pero es que en los últimos 12 meses ha casi triplicado su valor en bolsa. El salto desde los menos de 10 euros por título de hace un año a sus actuales máximos al filo de los 27 euros es del 193%. El resultado no es otro que una capitalización que ronda los 5.200 millones de euros pero que firmas como Bank of America y JB Capital ya en los 6.000 millones y más allá.
La promesa de incrementar el dividendo un 15% en los próximos años -después de haberlo engordado un 90% de una tacada este ejercicio- y convertirse en una compañía neutra en carbono en el año 2027 también prometen contribuir a la causa alcista de la presidida por Eloi Planes. Atractivos reclamos, respectivamente, para los cazadores de rentabilidad asegurada por retribución al accionista y los entusiastas del imparable aumento de la inversión sostenible.