Más de un año después, el Ibex 35 volvió a cotizar por encima de los 9.000 puntos. El índice español superó la ansiada cota después de 463 días por debajo de ella y de tres intentos fallidos por superarla. En su cuarta semana consecutiva alcista, el selectivo se apuntó ganancias del 2,77% hasta los 9.059,2 puntos.

La insistencia de los bancos centrales en la continuidad asegurada de sus herramientas de estímulo se tradujo en un nuevo impulso alcista para los índices de renta variable. El asalto de Wall Street a nuevos máximos históricos insufló ánimos alcistas en los parqués europeos y, especialmente, en el rezagado Ibex 35.

En este sentido, a pesar de sus fuertes avances de los últimos días, el índice español todavía se quedó lejos de sus máximos previos al estallido de la pandemia, en los 10.087 puntos. Y eso a pesar de que ya consiguió elevar sus ganancias acumuladas en lo que va de año hasta el 12,2%. Los analistas argumentaron así que no era momento de seguir el viejo dicho que prescribe eso de 'sell in May'.

Con una remontada de 244 puntos en la primera semana de mayo, esta se convirtió en la mejor para el índice español en los últimos dos meses. Desde primeros de marzo el Ibex 35 no había repuntado con tanta fuerza. Y eso fue posible especialmente gracias a los valores financieros.

A pesar de la persistencia confirmada de los estímulos financieros, y con ellos de los tipos de interés oficiales en mínimos históricos, la solvencia demostrada por la mayoría de la banca en sus cuentas trimestrales impulsó con fuerza su cotización. Así, Banco Sabadell se convirtió en el valor estrella de la semana, con una revalorización del 23,8%.

Bancos y piscinas

Las cuentas del primer trimestre del año también impulsaron al alza las acciones de BBVA (+5,6%), Bankinter (+2,4%) y Banco Santander (+1,5%), entre otros. Aunque más generosos fueron las ganancias para Telefónica, un 3,4% al alza a la espera de publicar su balance del periodo comprendido entre los meses de enero y marzo.

Mucho menos pesado en la cesta de valores del índice rey de la bolsa española, pero más abultado en cuanto a su propia evolución, fue el repunte del 8,2% de Fluidra. La compañía consiguió ganarse el respaldo del mercado después de haber publicado cifras récord trimestrales y mejorado sus ya de por sí exigentes objetivos de negocio para el conjunto de este ejercicio.

Fiasco renovable

Al otro extremo de la tabla de revalorizaciones el miedo a un pinchazo en la valoración de las renovables se hizo patente tras el deslucido estreno de Ecoener, que el martes debutó con un sonoro retroceso del 15% en su precio bursátil.

Así, Siemens Gamesa cedió un 11,9% en la semana, Solaria se dejó un 6,2% y Acciona perdió un 6,1%. Y eso que la compañía que preside José Manuel Entrecanales reiteró sus planes para escindir en una nueva compañía cotizada independiente sus negocios de energía con un claro diseño de cartera y un plan para repartir hasta un 50% de los beneficios a modo de dividendo.

Solo una compañía del índice español cerró la semana con un comportamiento peor al de este bloque. PhamaMar pagó con descensos del 17% la posibilidad de que la Organización Mundial del Comercio (OMC) apruebe la liberación de patentes de vacunas y otros medicamentos clave en la lucha contra la pandemia de la Covid-19.

Una amenaza que se materializó solo unos días después de conseguir el visto bueno de las autoridades sanitarias españolas para el ensayo Fase 3 de su fármaco Aplidín frente a infección moderada por el coronavirus.

La última de la semana

Aunque el Ibex 35 encontró al fin el impulso necesario para abalanzarse sobre los deseados 9.000 puntos, la fiesta podría haber sido mayor de no ser por los descensos por los que a última hora del viernes se decantaron tres blue chips del selectivo. Al cierre, subidas del 0,86%.

Desde el Gigante Asiático llegan unas cifras más sólidas de lo esperado tanto en exportaciones como en importación, dando nuevos síntomas de solvencia tanto de la economía nacional como global. Además, los datos de producción industrial de Alemania contribuían al optimismo al batir las previsiones.

En la parte menos grata de la tabla de revalorizaciones, solo tres valores que, por su peso en la cesta del índice impidieron un cierre más generoso para su gráfica. Las protagonistas a este lado fueron Telefónica (-1,6%), Inditex (-1,2%) y Banco Santander (-0,08%).

Al frente de los avances de la sesión se colocó Solaria, un 5,6% animada después de sesiones de castigo a las renovables por los planes de Acciona para seguir adelante con el estreno bursátil como compañía independiente de su división de energía. Además, la cotizada tomó impulso del incremento del 24% registrado en su beneficio gracias, fundamentalmente, a la aportación de esta misma área de energía. 

El segundo puesto se lo llevó Fluidra con avances del 4,2% después de haber publicado sus cuentas trimestrales que volvían a colocar a la especialista en piscinas y fuentes ornamentales en senda de subida libre.

Otra compañía que cotizó cuentas trimestrales fue Ferrovial, que consiguió sumar un 2,6% en bolsa tras reducir sus pérdidas gracias al incremento de la facturación y anunciaba los detalles de su próximo dividendo elección. Por su parte, Amadeus logró sumar un 3,5% después de publicar cuentas por encima de las estimaciones de consenso. Y eso a pesar de que la demanda aérea siguió muy penalizada por la pandemia.

Algo parecido le ocurrió a IAG, que vio cambiar su suerte con respecto a las pérdidas de primera hora al terminar la sesión con avances del 2,6% gracias a haber conseguido moderar sus pérdidas un 36,6%.

Más de 70 puntos

Por el mercado secundario de deuda, los bonos españoles a diez años rondaron tipos del 0,49%. Una cota en torno a la cual llevaban días moviéndose, incluso tanteando el 0,5%. Esto supuso máximos de los últimos ocho meses.

A consecuencia de este repunte, desigual entre las diferentes referencias soberanas europeas, la prima de riesgo subió ligeramente. Al término de la semana, los 71 puntos básicos suponían máximos de los últimos seis meses.